El Supremo mantiene a Robert F. Kennedy en las papeletas de Wisconsin y Míchigan, dos Estados clave

Robert F. Kennedy Jr empezó la carrera electoral de las presidenciales como aspirante a la nominación demócrata. Cuando vio que no tenía ninguna posibilidad, se postuló como independiente. Y a medida que su campaña se quedaba sin dinero y que sus perspectivas electorales no iban a ninguna parte, decidió retirarse y dar su apoyo a Donald Trump. Sin embargo, su nombre estaba ya impreso en las papeletas de algunos Estados. Aunque pidió borrarlo, las autoridades de algunos de ellos se negaron. RFK Jr recurrió al Supremo, que este martes ha decidido que su nombre permanezca en las papeletas de Wisconsin y Míchigan dos Estados clave en las elecciones presidenciales del 5 de noviembre.

Los votantes, al menos en su gran mayoría, saben que el candidato independiente se ha retirado. Sin embargo, si algunos deciden votarle, esos votos podrían llegar a marcar la diferencia en unas elecciones tan reñidas. El ahora aliado de Trump argumentaba que la aparición en las papeletas en contra de su voluntad violaba su libertad de expresión, recogida en la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, al silenciar o disimular indirectamente su apoyo a Trump.

Las autoridades estatales, en cambio, alegaban que las papeletas ya estaban listas y se habían empezado a enviar. Tener que eliminar al candidato obligaba a producir nuevas papeletas o a tachar su nombre en las existentes, con complicaciones logísticas evidentes. “Más de 1,5 millones de votantes de Míchigan ya han devuelto su papeleta de votante ausente. Otros 263.634 votantes han votado anticipadamente. Según la Constitución de Michigan, la votación anticipada en persona continúa en todas las jurisdicciones hasta el 3 de noviembre de 2024. Desde ahora hasta el 5 de noviembre, miles de votantes de Michigan continuarán devolviendo sus papeletas de votante ausente o presentándose en persona para emitir su voto anticipadamente. Además, decenas de miles de estas papeletas ya han sido tabuladas, aunque es posible que no se generen resultados. Una vez que las papeletas se tabulan, se convierten en anónimas, lo que significa que no se puede rastrear ninguna papeleta hasta su votante”, argumentaba ante el Supremo el secretario de Estado de Míchigan.

En el mismo sentido, las autoridades de Wisconsimn alegaban que darle la razón al candidato “obligaría a los secretarios de los condados y municipios de Wisconsin a fabricar a mano y pegar millones de pegatinas en las papeletas de Wisconsin para cubrir su nombre, al menos en las papeletas que aún no han llegado a los votantes y han sido devueltas”.

El Supremo ha rechazado de plano los recursos, como antes había hecho con otro referido a Nueva York. En esos casos, los jueces no argumentan su decisión. La decisión referida a Wisconsin se ha tomado sin ningún voto particular en contra, pero en la de Míchigan, el juez Neil Gorsuch muestra su discrepancia.