Pasar hambre para “encontrar a Jesús”: exhumados 58 cadáveres de supuestos seguidores de una secta en Kenia
El líder de la iglesia, al que el presidente del país considera como “terrorista” y “criminal”, ha sido detenido junto a otros 14 sospechosos
Los forenses exhuman desde el viernes en un bosque al este de Kenia decenas de cadáveres de supuestas víctimas de una secta del fin del mundo, que animaba a sus miembros a dejar de comer para “encontrar a Jesús”. Las autoridades kenianas han recuperado ya 58 cuerpos, pero el número de víctimas mortales aún puede aumentar.
Hasta 112 personas se han dado por desaparecidas en la zona en relación con este suceso, según Cruz Roja. Ocho de las víctimas fueron halladas todavía vivas, pero se encontraban ya en muy mal estado y acabaron falleciendo, ha señalado este lunes el inspector general de policía Japhet Koome, citado por la agencia Reuters. Otras 29 personas han sobrevivido.
El supuesto líder de la secta cristiana, Paul Mackenzie Nthenge, fue detenido el pasado 14 de abril junto con otros 14 sospechosos, según la policía.
Las informaciones acerca de lo que sucedió en el bosque de Shakahola, en Malindi (a más de 500 kilómetros de la capital, Nairobi), recuerdan al horror del suicidio colectivo de la secta apocalíptica del estadounidense Jim Jones, que en 1978 dejó 900 muertos en Jonestown (Guyana).
En el caso de Kenia, la supuesta secta se denominaba Good News International Church (iglesia internacional de las buenas noticias) y sus miembros vivían desde hace un tiempo indeterminado en un terreno de más de 300 hectáreas en el bosque Shakahola, de acuerdo con medios locales. La televisión keniana Citizen TV ha mostrado imágenes de niños y adultos escuálidos, tumbados en el suelo. Dicha emisora también ha entrevistado a familiares de miembros de la iglesia, que aseguran que los fieles no creían en la escolarización de los niños ni confiaban en los médicos.
El pastor Mackenzie Nthenge, que está en huelga de hambre en prisión desde el día de su detención, ya había sido investigado el pasado mes de marzo por la muerte de dos menores en circunstancias similares, pero salió en libertad bajo fianza, según el diario keniano The Nation.
El presidente de Kenia, William Ruto, ha equiparado lo sucedido en Malindi a un acto de terrorismo: “Mackenzie, que finge ser un pastor, es en realidad un criminal”, declaró este lunes, recogen medios locales. “Los terroristas usan la religión para justificar sus terribles actos. Las personas como Mackenzie usan la religión para exactamente el mismo fin”. El ministro del Interior, Kithure Kindiki, ha criticado en sus redes sociales el “abuso” del derecho constitucional de la libertad de culto y ha pedido regulaciones más firmes de “toda iglesia, mezquita, templo o sinagoga”.
La Cruz Roja ha puesto a disposición de los familiares de las víctimas un servicio de identificación en el hospital de Malindi, anunció la organización este lunes.
Sigue toda la información internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.