Biden dice que le ha “sorprendido” enterarse de que tenía documentos secretos en una oficina privada

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se ha pronunciado este martes desde Ciudad de México por primera vez sobre el hallazgo en una oficina privada suya de una decena de documentos confidenciales de la época en que era vicepresidente de Barack Obama. Se ha mostrado “sorprendido” de enterarse de que había documentos de esa etapa en un armario de una oficina a la que dio uso privado, ha asegurado que se toma en serio la información confidencial y que desconoce el contenido de dichos documentos.

Biden ha comparecido tras la Cumbre de Líderes de América del Norte, conocida como la cumbre de los Three Amigos, junto al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau. La primera pregunta ha sido sobre la frontera, pero Biden claramente esperaba esta segunda y ha empezado contestándola y bromeado con que no recordaba la primera.

“La gente sabe que me tomo seriamente los documentos con información clasificada”, ha empezado. “Encontraron unos documentos en una caja, en un armario cerrado, y en cuanto lo hicieron se dieron cuenta de que había varios documentos clasificados en esa caja. E hicieron lo que debían: llamar inmediatamente a los Archivos [Nacionales] y entregárselos”, ha añadido. “Me informaron sobre este descubrimiento y me sorprendió saber que hay registros gubernamentales que fueron llevados a esa oficina, pero no sé lo que hay en los documentos”, ha continuado. “Mis abogados han entregado las cajas a los Archivos [Nacionales], y estamos cooperando plenamente, cooperando plenamente con la revisión y que espero que termine pronto y será el momento de dar más detalles”, ha concluido.

Aunque las circunstancias son muy diferentes, las palabras del presidente contrastan con el juicio que Biden hizo de su antecesor por los documentos que se llevó a su mansión de Mar-a-Lago, en Florida. En una entrevista para el programa 60 minutos emitida en septiembre pasado, ante la pregunta sobre lo que pensó al ver la fotografía de los documentos secretos incautados en el registro de la mansión de Trump, Biden contestó: “¿Cómo es posible que eso ocurra? ¿Cómo alguien puede ser tan irresponsable? (...) Es totalmente irresponsable”.

Los documentos encontrados en su oficina no deberían estar en su poder desde que dejó el cargo. Y el presidente no ha dado ninguna explicación al respecto.

La principal diferencia con el caso de Trump es que los responsables de los Archivos Nacionales no eran conscientes de su existencia y nunca le pidieron que los entregase y, sobre todo, que Biden nunca se resistió a devolverlos ni incumplió un requerimiento al respecto, como hizo Trump, sino que fueron entregados de forma inmediata a los Archivos.

Según comunicaron este lunes, los abogados de Biden encontraron el pasado 2 de noviembre una decena de documentos clasificados como confidenciales en un armario del Centro Penn Biden para la Diplomacia y el Compromiso Global, un think tank dependiente de la Universidad de Pensilvania, en Washington, en lo que era una oficina privada del presidente. Aunque el hallazgo se produjo días antes de las elecciones legislativas del 8 de noviembre, su descubrimiento no ha trascendido hasta este lunes.

Biden utilizó periódicamente ese espacio desde mediados de 2017 hasta el inicio de la campaña electoral de las elecciones presidenciales de 2020. Los documentos fueron hallados cuando los abogados del presidente estaban empaquetando archivos guardados en un armario cerrado con llave para prepararse para desocupar esa oficina. El mismo 2 de noviembre, la Oficina del Asesor Jurídico de la Casa Blanca lo notificó a los Archivos Nacionales, que tomaron posesión de los materiales a la mañana siguiente. Entre ellos, hay memorandos de los servicios de inteligencia estadounidenses y material informativo sobre asuntos como Ucrania, Irán y el Reino Unido, según la CNN. La ley estadounidense obliga a conservar los registros presidenciales y a ponerlos a disposición de los Archivos Nacionales tras el cese en el cargo.

Para Trump, en todo caso, es un balón de oxígeno inesperado. Tras haber acusado, sin pruebas, a Barack Obama de haberse apoderado de documentos de su etapa en la Casa Blanca, se ha encontrado con algo todavía mejor, que su principal rival político también lo hizo. “¿Cuándo va a hacer una redada el FBI para registrar las numerosas casas de Joe Biden, quizá incluso la Casa Blanca? Estos documentos definitivamente no estaban desclasificados”, escribió el lunes en su red social, Truth Social. Trump se ha preguntado este martes por qué el hallazgo no se hizo público antes de las elecciones del 8 de noviembre.

Este mismo martes, la nueva mayoría de la Cámara de Representantes ha aprobado la creación de una subcomisión para que investigue lo que los republicanos consideran una utilización partidista del Departamento de Justicia como arma política, en referencia a las investigaciones que salpican a Trump.

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