_
_
_
_

Eva Kaili, la cara más visible del escándalo de la Eurocámara, defendía a Qatar como “un modelo en derechos laborales”

La antigua presentadora de televisión, que ingresó muy joven en el partido socialista de Grecia, criticaba las ayudas sociales del Gobierno de Syriza por ser para “vagos”. La justicia griega congela sus bienes, los de su pareja, su padre y su hermana

La socialista griega Eva Kaili, vicepresidenta del Parlamento Europeo, durante una sesión el 22 de noviembre en Estrasburgo.Foto: REUTERS
Francisco Peregil

La eurodiputada socialista griega Eva Kaili, de 44 años, es la cara más visible del caso de corrupción que sacude el Parlamento Europeo, que estalló el viernes con la detención en Bélgica de seis personas, entre las cuales hay cuatro imputados, todos ellos investigados por supuestos sobornos procedentes de Qatar, sede del Mundial de fútbol 2022. Kaili ha visto cómo se desmorona en una tarde una carrera política que inició a los 22 años como concejala en Salónica, su ciudad natal, dentro del partido socialista griego (Pasok); continuó a los 29 como la diputada más joven de su país, y continuó como europarlamentaria a los 36 años hasta ocupar desde el pasado enero una de las 14 vicepresidencias de la Eurocámara. Este martes el pleno del Parlamento Europeo la ha despojado del cargo.

La policía belga se incautó el viernes en el domicilio de Kaili de 150.000 euros en billetes de 20 y de 50. La antigua periodista está ahora imputada por pertenencia a organización criminal, blanqueo de dinero y corrupción. Su pareja, el italiano Francesco Giorgi, de 33 años y asistente parlamentario en la misma Cámara, también ha sido imputado.

Kaili ensalzó a Qatar en la tribuna de la Eurocámara el 22 de noviembre, dos días después de un viaje al emirato. Dijo: “El torneo de fútbol de Qatar es un ejemplo concreto de cómo la diplomacia deportiva puede conducir a una transformación histórica de un país cuyas reformas han inspirado al mundo árabe”.

Antes, Kaili había descrito a Qatar como un “modelo en derechos laborales”, saliendo al paso de las numerosas críticas que ha recibido el país del Golfo por parte de organizaciones humanitarias. La eurodiputada cargó contra los críticos: “[Los organizadores de Qatar] se comprometieron con un objetivo y se abrieron al mundo”, espetó en un discurso citado por la agencia Reuters. “A pesar de eso, algunos aquí pretenden boicotearlos. Los atacan y acusan de corrupción a todos los que hablan con ellos o se comprometen con ellos”.

El periodista griego Tasos Telloglou indica por teléfono desde Atenas que Kaili era una periodista famosa, presentadora de noticias en el mayor canal privado de Grecia, y en 2002 decidió presentarse como concejala en las elecciones municipales de Salónica. “El Pasok”, explica Telloglou, “estaba lleno de gente muy mayor, necesitaba cambiar de imagen. Y Eva Kaili era una cara muy conocida y atractiva”.

Kaili se fue distanciando en los últimos meses del partido socialista. El diario Le Monde recordaba el lunes unas declaraciones suyas de 2019, en las que criticaba las ayudas sociales que impulsó el Gobierno de izquierdas del partido Syriza (2015-2019), cuando las medidas impuestas por la Unión Europea hundieron en la pobreza a millones de griegos tras el rescate europeo de la década pasada. Kaili criticó esas ayudas diciendo que “los subsidios son para vagos”. Poco a poco, la antigua periodista se iba colocando en el margen más a la derecha de la formación.

El momento de mayor fractura con la organización se produjo en verano, cuando el líder de los socialistas, Nikos Androulakis, reveló que estaba siendo espiado por los servicios secretos de su país. Kaili se cuidó entonces de no criticar al partido conservador griego en el poder, Nueva Democracia. Y no asistió a las sesiones de la comisión del Parlamento Europeo encargada de investigar ese asunto, a pesar de que pertenecía a ella.

El padre de Kaili se encuentra en libertad condicional después de que la policía lo detuviese con 600.000 euros en metálico. Por su parte, la justicia griega ha congelado los bienes tanto de Kaili como del padre y de Magdalena, hermana de la eurodiputada. El Pasok la expulsó de sus filas el sábado y el Parlamento Europeo la ha suspendido de sus funciones. Entre los bienes congelados a ella y sus familiares por la justicia griega se encuentran depósitos por valor de 463.000 euros, tres automóviles, seis propiedades e inversiones de hasta 2,5 millones de euros, según destacan varios medios griegos.

El periodista Tasos Telloglou relata que era vecino de Kaili antes de que ella se mudara a Bruselas, en 2014. “Entonces llevaba una vida normal, sin extravagancias”, recuerda. Telloglou recuerda que cuando Kaili era concejala en Salónica, solía mantener muy buenas relaciones con Ivan Savvidis, un magnate ruso con nacionalidad griega, dueño del equipo de fútbol Paok de Salónica. “Cuando Rusia invadió Ucrania”, recuerda Telloglou, “Kaili no condenó la invasión. Después dijo que esa postura había sido un simple error y se solidarizó con Ucrania”.

El sitio griego Efsyn destacó el lunes que Eva Kaili viajó el 20 de noviembre a Qatar sin publicar ninguna foto sobre el viaje. “El 30 de noviembre”, relata Telloglou, “después de su viaje a Qatar, fundó junto a su pareja una agencia inmobiliaria en Atenas. El capital de esa agencia está ahora congelado por la justicia”.

El 1 de diciembre participó en una votación de una comisión parlamentaria a la que no pertenecía y en la que no había anunciado su presencia. La comisión trataba sobre la exención de visados entre Qatar y la Unión Europea. Kaili votó a favor de los intereses de Qatar. “Después”, explica Telloglou, “confesó que había votado por error. Pero son muchos errores en su carrera: primero lo de no condenar la invasión de Rusia y después esto”.

Sigue toda la información internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Francisco Peregil
Redactor de la sección Internacional. Comenzó en El País en 1989 y ha desempeñado coberturas en países como Venezuela, Haití, Libia, Irak y Afganistán. Ha sido corresponsal en Buenos Aires para Sudamérica y corresponsal para el Magreb. Es autor de las novelas 'Era tan bella', –mención especial del jurado del Premio Nadal en 2000– y 'Manuela'.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_