El opositor ruso Navalni, condenado a 30 días de cárcel
El líder de la oposición extraparlamentaria dice que la medida intenta impedir que impulse las protestas contra la impopular reforma de las pensiones
Alexéi Navalni, el principal líder de la oposición extraparlamentaria rusa, fue condenado este lunes a 30 días de prisión por el tribunal de distrito de Tverskoi de Moscú por violar las estrictas leyes de protestas públicas, aunque el propio Navalni considera que se trata de un pretexto para impedirle liderar un mitin contra la impopular reforma de pensiones convocado para el 9 de septiembre próximo, día de elecciones locales y regionales en Rusia.
Navalni, de 42 años, fue arrestado el pasado sábado en su casa moscovita y el motivo fue haber vulnerar la ley de manifestaciones por haber organizado una protesta, no autorizada, a principios de este año, el 28 de enero, cerca de la Plaza Roja. La policía asegura que no se ha detenido a Navalni durante estos seis meses porque no le encontraban. "Este proceso, bastante extraño, ha sido sido montado exclusivamente para que no pueda participar en el proceso de preparación de los actos de protesta contra el aumento de la edad de jubilación", declaró Navalni en el juicio, agregando que no se reconoce culpable. Estos casos, señaló, los guardan, los preparan y los concretan cuando los necesitan. Esta es la tercera vez que en lo que va de año que Navalni es sentenciado por su participación en mítines no autorizados.
La ley de pensiones aprobada en primera lectura ha despertado el descontento entre la población rusa, que, según las encuestas, rechaza por inmensa mayoría que la edad de jubilación para las mujeres suba de los 55 años actuales a los 63 y para los hombres, de 60 a 65, en un proceso que finalizará en 2028.
Con este movimiento, las autoridades han neutralizado al opositor para el 9 de septiembre, una fecha en la que en Moscú y en otras zonas del país se celebran elecciones municipales y regionales. El favorito para la alcaldía de la capital rusa es Serguei Sobyanin, aliado de Vladímir Putin. Como explicó Vladímir Cheríkov, jefe regional de seguridad en Moscú, las razones para rechazar esta marcha fueron varias, entre ellas, que Navalni quería realizar la protesta por las calles centrales Tverskaya y Ojotni Riad, que estarán ocupadas por el público por la celebración del Día de la Ciudad. Además, por ser día de elecciones, está prohibida por ley toda propaganda política.
Estas no han sido las únicas malas noticias que Navalni ha recibido en las últimas horas: el Ministerio de Justicia rechazó la solicitud de inscripción del Partido del Futuro, organización que reúne a sus partidarios. Según Justicia, no presentaron todos los documentos requeridos, entre ellos, faltaba una parte de los protocolos de las reuniones de las filiales regionales en las que se eligió a los delegados al congreso del partido y otras faltas formales.
Navalni anunció que apelará la decisión, pero si esta es rechazada se verá obligado a organizar un nuevo congreso de su organización que trata de inscribir sin éxito desde 2014.
Mientras tanto, otro opositor, Serguéi Udaltsov, líder del Frente de Izquierda, ha tenido que ser hospitalizado por segunda vez en los últimos diez días, debido a un empeoramiento de su salud causado por la huelga de hambre que mantiene en la cárcel. Udaltsov fue sentenciado el 14 de agosto a 30 días de prisión por la misma falta de Navalni: incumplimiento de las normas para organizar manifestaciones. Udaltsov fue uno de los dirigentes del mitin que a fines de julio reunió en Moscú a miles de personas que no están de acuerdo con que les aumenten la edad de jubilación.
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