Trump al rapero afroamericano Jay-Z: “Gracias a mis políticas el desempleo entre negros está en mínimos históricos”

Donald Trump, el combativo presidente, cargó este domingo contra el rapero afroamericano Jay-Z tras sus críticas hacia el republicano en un programa televisivo. El ocupante de la Casa Blanca, que en su pasado fue presentador de la telerrealidad y es adicto a la televisión, se enzarzó co

“Que alguien informe a Jay-Z que gracias a mis políticas, el desempleo entre negros está según los últimos datos en LA TASA MÁS BAJA DE LA HISTORIA”, tuiteó Trump temprano este domingo. Horas antes, Jay-Z en una entrevista en CNN había criticado al presidente por presumir de eso.

“No está bien decir cosas horribles aunque pongas dinero en nuestros bolsillos. Al fin y al cabo no se trata de dinero. El dinero no es felicidad. Eso que es lo que no capta (Trump). Hay que tratar a la gente como personas, eso es lo que importa”, afirmó el rapero, uno de los candidatos mejor posiciones para la gala de los Grammy esta noche. Jay-Z también tachó de “dolorosos, decepcionantes y falsos” los comentarios de Trump cuando se refirió hace unas semanas a las naciones africanas como “países de mierda”. “Más allá del enfado, es doloroso. Este es el líder del mundo libre hablando así”, dijo el músico.

Los datos del censo estadounidense muestran una disminución progresiva del desempleo entre afroamericanos a lo largo de los años, pero sigue estando con un tasa, 6,8%, que duplica la misma cifra para los blancos, 3,7%. Aunque la tasa siga cayendo, el mérito es difícilmente atribuible a un presidente sino a una tendencia desde hace años, según muestran los estudios.

Trump es además uno de los presidentes más antagonistas hacia la población afroamericana, que en su mayoría suele decantarse por el Partido Demócrata. Con el auge del magnate en la política, los grupos de odio y supremacía blanca han florecido con más fuerza y se han visto aupados por guiños desde el Ejecutivo. Una de las circunstancias más evidentes fue en agosto de 2017, cuando una concentración de grupos de la ultraderecha asesinó a una joven contramanifestante. Trump denunció que tanto los neonazis como sus opositores eran culpables. Su equidistancia fue, para muchos, una confirmación del racismo del presidente.