El rey de Marruecos sustituye al jefe de Gobierno
El islamista Benkirán llevaba cinco meses sin poder formar un Ejecutivo de coalición
El político más popular de Marruecos, Abdelilá Benkirán, secretario general del islamista Partido Justicia y Desarrollo (PJD), será sustituido como jefe de Gobierno por otro dirigente de su formación, según anunció el Palacio Real en la noche del miércoles a través de un comunicado. Es la primera vez que Marruecos vive una situación semejante desde que en 2011 las protestas de la primavera árabe auspiciaron una Constitución nueva y la convocatoria de unas elecciones en las que Benkirán obtuvo su primer mandato. Cinco años después, tras vencer en las elecciones legislativas del pasado 7 de octubre, el rey Mohamed VI le encargó formar un Gobierno de coalición. Pero Benkirán se negó a encabezar un Ejecutivo con las condiciones que le exigían los otros partidos.
Muchos analistas vieron ahí un pulso entre el rey y Benkirán. Finalmente, este miércoles por la noche, un día después de que Mohamed VI aterrizara en Rabat, el rey ha decidido nombrar a otro dirigente del PJD, del que aún no se ha revelado el nombre. El Palacio Real, explicó en su comunicado, difundido por la agencia oficial MAP, que el rey tomó está decisión “en virtud de las prerrogativas que le otorga la Constitución” y con la intención de “superar el inmovilismo actual”. Así pues, otro dirigente islamista, que sin duda no tendrá ni el carisma ni el tirón popular que Benkirán, será el encargado de formar un Gobierno de coalición.
Entre los nombres que sonaban el miércoles con más fuerza se encontraba el ministro de Justicia, Mustafá Ramid, el exministro de Transporte, Driss Rebbah, y el exministro de Exteriores, Saadeddine Othmani. En cualquier caso, el Palacio aún no ha designado oficialmente al sucesor de Benkirán.
La Constitución de Marruecos está diseñada de tal forma que es imposible que un partido gobierne en mayoría absoluta. Benkirán obtuvo en octubre 125 de los 395 escaños del Parlamento, 18 más que en los comicios de 2011. Pero necesitaba la alianza de varios partidos. En esos momentos resultó clave la figura del ministro en funciones de Agricultura y presidente del partido liberal RNI (Reunión Nacional de Independientes), el empresario multimillonario y amigo íntimo del rey, Aziz Ajanuch.
A pesar de que el RNI solo obtuvo el cuarto puesto en las elecciones, con 37 diputados, Ajanuch exigió a Benkirán la exclusión del gobierno del Partido Istiqlal, tercera fuerza, con 46 escaños. Benkirán se opuso en principio a esa medida, pero después aceptó. Y entonces Ajanuch le exigió la inclusión en el Gobierno del conservador Unión Constitucional y al progresista Unión Socialista de Fuerzas Populares (USFP). Fue entonces cuando Benkirán dio un gran portazo al amigo del rey. De haber aceptado formar esa coalición, el poder de los islamistas habría quedado bastante diluido en el Ejecutivo de coalición.
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