_
_
_
_

El ‘lobby gay’ y otras teorías del Frente Nacional por la Familia

Tres representantes del movimiento civil en contra del matrimonio igualitario y los cambios en materia de educación sexual en México expresan sus puntos de vista

Una de las protestas del movimiento nacional.Foto: atlas | Vídeo: FRENTE NACIONAL DE LA FAMILIA / ATLAS

La homosexualidad es reversible, los anticonceptivos causan esterilidad, la transexualidad es un trastorno mental y existe un ‘lobby’ o grupo de presión gay a nivel internacional para que se creen leyes a favor de la comunidad LGBTI. Son algunas de las teorías de los representantes del Frente Nacional por la Familia que desarrollan con conceptos intrincados y adjetivos superlativos, con argumentos que se desdibujan en estudios y datos sobre el matrimonio igualitario y la adopción de parejas del mismo sexo que no terminan de citar y explicar.

“Si volteamos a los países desarrollados y la legislación internacional lo que encontramos es que los que estaban en ese tema (del matrimonio igualitario) hoy están retrocediendo y están diciendo: ‘Vamos para atrás con esa legislación que ha hecho daño’. Lo vemos en Suecia, lo vemos en Francia”, dice la Norma Edith Martínez Guzmán, diputada federal por el Partido Encuentro Social y consejera de la organización Jalisco es uno por los niños. Pero ni en Suecia ni en Francia se ha dado un paso atrás en materia de derechos para la comunidad LGBTI. Al ser cuestionada de nuevo los ejemplos cambian por Hungría y Polonia.

¿Qué pide el Frente Nacional por la Familia?

• Que no se reforme el artículo 4to constitucional donde se establece el concepto de “familia”.

• Que no se implemente la iniciativa del presidente sobre la legislación nacional del matrimonio igualitario

• Que se prohíba la adopción a personas del mismo sexo

• Que no se lleve a las escuelas el concepto de “ideología de género” en el que se establece que los géneros son construcciones sociales

Las marchas contra el matrimonio igualitario y la adopción de parejas del mismo sexo -del 10 y el 24 de septiembre- están coordinadas por este Frente, en el que se agrupan alrededor de un millar de organizaciones conservadoras. El movimiento se conformó en mayo pasado en respuesta a la iniciativa del presidente de México, Enrique Peña Nieto, que pretende consagrar en la Constitución la igualdad de derechos que la sentencia de junio de 2015 de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) garantizó en el tema del matrimonio igualitario. La enmienda del presidente es considerada una “amenaza” por la agrupación. Hasta ahora la organización prevé que se realicen alrededor de 112 manifestaciones en todo el país. “Las medidas del Ejecutivo son desafortunadas porque obedecen un interés meramente electoral y pretenden imponer una idea de familia que nada tiene que ver con los fines del matrimonio y las relaciones fecundas”, asegura Mario Romo, vocero del Frente.

El 19 de julio de 2015 la Suprema Corte de Justicia de la Nación publicó la Tesis de Jurisprudencia 43/2015 en la que establece que “la ley de cualquier entidad federativa que, por un lado, considere que la finalidad de aquél (matrimonio) es la procreación y/o que lo defina como el que se celebra entre un hombre y una mujer, es inconstitucional”. Desde entonces si cualquier pareja del mismo sexo quisiera casarse en algún Estado que no lo permita, podría recurrir a esta sentencia.

“El estilo de vida homosexual es un infierno”

Los tres representantes del movimiento entrevistados para este diario dicen respetar la homosexualidad y no estar en contra de las personas del mismo sexo que deciden tener una vida en pareja, pero sus respuestas contrastan con este punto de vista: a pregunta expresa sobre la posible homosexualidad de uno de sus hijos la presidenta en la Unión Neoleonesa de Padres de Familia, Luz María Ortiz Quinto, señala: “Lo voy a amar y lo voy a respetar y lo voy a apoyar y lo voy a acompañar para que regrese a su heterosexualidad”.

“Un niño que se lo dan a una pareja homosexual, que no es su hijo biológico, el día que quiera se larga, no tiene por qué tratar de ayudarlos: el niño fue víctima. Les dieron a estos dos homosexuales al niño para que ellos pudieran sentir que son familia. El estilo de vida homosexual es un infierno”, dice una mujer de la cual no se revela su nombre en un video promocional del Frente Nacional por la Familia.

Aunque dicen no promover el odio hacia la comunidad LGBTI sus argumentos están cargados de adjetivos negativos como “indefinidos” y suposiciones sobre el futuro de los hijos de las familias homoparentales. “Es muy doloroso que dos personas del mismo sexo sabiendo que no le pueden dar al niño lo que le corresponde en justicia hagan acciones para dejar a ese niño sin lo que le corresponde. Es como: ‘yo necesito ese juguetito para estar completo, necesito esa mascotita’, el niño merece mamá y papá”, dice Martínez.

El núcleo ideológico del movimiento es la oposición a la teoría o, como ellos la llaman, “ideología” de género, que establece que los roles entre hombres y mujeres se construyen socialmente. Las organizaciones tradicionalistas consideran que las diferencias son biológicas, es decir, sin contemplar ninguna diferencia entre sexo y género. “En los libros de texto actuales hay un adoctrinamiento desde las edades más tempranas, hay una diferencia entre promover el respeto hacia todas las personas y adoctrinar a los niños para que de alguna manera abracen la homosexualidad”, manifiesta Romo y defiende que los primeros contactos con la educación sexual se hagan en edades más maduras de la mano de los padres.

“La indefinición que genera en los niños este tema de ‘puedes ser lo que se te antoje ser’, esto finalmente termina siendo una patología y lo tenemos claramente previsto en el manual de trastornos mentales: un niño que se siente niña, ahí está previsto en el manual. Hay un lobby gay muy fuerte tratando de imponer su ideología desde dependencias de la ONU, se han ido infiltrando. Desde los medios de comunicación por supuesto también”, dice la diputada del Partido Encuentro Social.

El rol de la Iglesia y los partidos

Los miembros del Frente Nacional por la Familia dicen representar a más de un millón de familias en México y sostienen que obtienen recursos de sus propios integrantes para su funcionamiento. Uno de los puntos más controvertidos es la participación de la Iglesia Católica en este movimiento político, dado que México es un Estado laico. Romo admite que varios obispos han sido clave en la difusión de las ideas del frente, pero niega que el clero haya otorgado financiamiento ni tenga control sobre las decisiones de la agrupación, al igual que otras organizaciones de otros cultos religiosos. “Tenemos un buen diálogo con la Iglesia, pero no hemos recibido ninguna consigna, ninguna instrucción ni ninguna orden”, comenta. “Lo único que nos han dicho es que se sienten privilegiados de poder acompañar a muchos ciudadanos que levantan la mano y que a este país le hacen falta”, agrega.

A los ojos de un segmento de la opinión pública existe la percepción de que la Iglesia participó activamente en los primeros pasos del movimiento, pero su involucramiento ha disminuido en los últimos meses. “No lo tomamos así, al contrario. Cada vez más segmentos católicos se suman con entusiasmo”, señala Romo, quien también niega que algún partido político esté detrás de sus acciones. “Somos un movimiento político y las iglesias pueden motivar a sus fieles a que participen cívicamente, eso no es violentar el Estado laico, lo que sí va en contra de él es que el Estado intente imponer la ideología de género”, añade.

La participación de personajes como Norma Edith Martínez Guzmán, diputada federal por el Partido Encuentro Social, muestra que existe una intervención de políticos en la organización del Frente. El Partido Encuentro Social tiene entre sus principios “proteger a la familia” y aunque sus representantes negaron hacer propaganda a favor de la marcha, varios de sus miembros suscriben los principios del Frente.

“No te metas con mis hijos” y “Si es mi hijo, yo lo educo”, son dos de los lemas del Frente Nacional por la Familia que más han sonado en redes sociales. Los conceptos de familia, matrimonio y vida, toman un cariz arcaico cuando son explicados por los miembros del movimiento que se niegan a los cambios de significado: el matrimonio es entre hombre y mujer, el fin del matrimonio es la reproducción, una familia que no proviene de este concepto de matrimonio, no es familia.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_