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El líder del Congreso brasileño revoca su propia decisión y da vía libre al ‘impeachment’

Waldir Maranhaõ había sido amenazado con la expulsión de su partido

Waldir Maranhaõ da vía libre al ‘impeachment’Foto: reuters_live
Antonio Jiménez Barca

Waldir Maranhaõ, el mismo presidente interino del Congreso que había suspendido el impeachment el lunes por la mañana, dio marcha atrás horas después y, por medio de un escueto comunicado de cuatro líneas, revocaba el lunes por la noche su propia e histórica decisión. Así, el juicio político de la presidenta Dilma Rousseff, programado para el miércoles, sigue su curso en el horario previsto. Todo apunta a que Rousseff será apartada del cargo, por lo menos 180 dias, mientras se la juzga en el Senado.

Maranhão, un político segundón que el jueves pasado se encabalgó a la presidencia del Congreso brasileño para sustituir al depuesto Eduardo Cunha, acusado de corrupción, dio la campanada el lunes, al, amparado en su nuevo cargo, anular las sesiones parlamentarias de mediados de abril en las cuales el Congreso dio inicio al impeachment y pasó la decisión al Senado, para su aprobación. Maranhão, del Partido Progresista (centro derecha), justificó su impactante medida en un recurso remitido por la Abogacía General del Estado, en el que se señalaban varias irregularidades en el proceso de votación. El paso de Maranhão repercutió como una bomba mediática por todo el país. La misma Dilma Rousseff se enteró por sorpresa en un acto oficial de que había posibilidades de que el juicio político quedase estancado y que volviese al Congreso.

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A juicio de muchos, Wladir Maranhão había actuado influido por Flávio Dino, el Gobernador de su Estado, Maranhão, al norte del país. Dino, del Partido Comunista de Brasil, es contrario a la destitución de Rousseff y se reunió con el presidente interino varias veces el fin de semana.

La presión desde todos lados se hizo sentir contra Maranhão. Su partido amenazó con expulsarle, la prensa favorable al impeachment comenzó a demonizarle y el presidente del Senado ignoró la decisión del presidente del Congreso, calificando su decisión de “tontería antidemocrática”. Por la tarde, el mismo Maranhão, muy nervioso y amedrentado, compareció ante la prensa para justificar su medida.

Horas después, remitía un comunicado minúsculo: “Revoco la decisión por mí instruida el 9 de mayo por medio de la cual anulaba las sesiones parlamentarias de la Cámara de Diputados de los días 15, 16 y 17”.

La prensa brasileña achaca su renuncia al temor de ser expulsado de su partido. De cualquier modo, el comportamiento de Maranhão, sumado al impredecible rumbo de este proceso de impeachment, sometido a bandadas constantes, da cuenta de la fragilidad de la clase política brasileña.

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Sobre la firma

Antonio Jiménez Barca
Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.

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