¿Estás a la altura de un ‘ciber’ James Bond?

“Error del servidor. HTTP 404”. En estos tiempos de ciberparanoia, resulta inquietante comprobar que la página web del GCHQ, uno de los tres servicios de inteligencia británicos, está caída. Sucedió durante algunas horas del jueves. ¿La agencia dedicada a espiar las comunicaciones en Internet, la hermana tecnófila del MI5 y el MI6, estaba siendo hackeada? Negativo. Lo que ocurrió es que la web no soportó la avalancha de internautas que acudieron en masa a descargar… su felicitación navideña.

No se trataba de una felicitación cualquiera. En el tarjetón que envía a sus contactos, descargable también en su web, el GCHQ ha decidido estas Navidades proponer un juego de encriptación. Un cuadro de 25 por 25 casillas, con una serie de números junto a cada fila y cada columna. El reto es, en función de esas series de números, rellenar de negro algunas de las casillas del puzle. Un nonograma, para los que estén familiarizados con este tipo de juegos.

Pero eso es solo el principio. El nonograma resuelto forma un código QR que, escaneado con un smartphone, da paso a la siguiente prueba. Y así hasta un total de cinco. Secuencias de letras, de palabras, preguntas… un paraíso para los amantes de los juegos mentales. Por ejemplo (cuidado, spoiler), una pregunta: “Si Samuel dice que agonía es lo contrario que negación y que ingenioso es lo contrario de tibio, ¿cuál es el contrario de inteligente?”. La respuesta es: “A menudo”. Resulta que Samuel es Samuel Morse, y el contrario de cada palabra se obtiene intercambiando en código morse (en inglés) los puntos por las rayas.

A cambio del entretenimiento, el GCHQ invita a los participantes a realizar una donación voluntaria a una obra benéfica. Aquellos que lleguen al final del juego pueden mandar la solución a una dirección de correo electrónico que facilita la agencia, antes del final de enero, y se sorteará un premio (aún no revelado) entre los ganadores.

Muchos han apuntado que tiene toda la pinta de tratarse de una manera de reclutar futuros agentes desencriptadores. El GCHQ tiene un largo historial de utilizar retos de este tipo para localizar a candidatos con el talento y las habilidades necesarios para trabajar al servicio de su Majestad delante de un ordenador. Algunos de los heroicos criptoanalistas de Bletchley Park, embrión del GCHQ que ayudó a ganar las Segunda Guerra Mundial descifrando el código Enigma de los nazis, fueron reclutados con un complicado crucigrama introducido en las páginas del Daily Telegraph.

El problema es que la iniciativa puede acabar sacando los colores a los eminentes espías informáticos. Su director, Robert Hannigan, en un mensaje en la web de la agencia, confiaba en que el juego sirva para “ejercitar la materia gris durante todo el periodo de vacaciones”. Subestimó Hannigan a los internautas británicos.

Quedan aún dos semanas para las vacaciones y, en menos de 24 horas, decenas de personas estaban a punto de resolverlo. Incluso algunos decían haberlo hecho ya, aunque el GCHQ aseguraba el viernes que aún nadie había enviado la respuesta. En un hilo de Reddit y en los comentarios a la publicación de la noticia en la prensa, decenas de aficionados tardaron horas en empezar a compartir las fases dos, tres, cuatro y hasta cinco del juego, demostrando que habían llegado. Pregunta: ¿Los encriptadores no están a la altura o hay mucho talento ahí fuera? Respuesta: ninguna se las dos opciones anteriores es muy tranquilizadora para la ciberseguridad nacional.