Valls rechaza el reparto de refugiados por cuotas en la Unión Europea

El primer ministro de Francia, Manuel Valls, asestó este sábado un duro golpe al plan de la Comisión Europea para repartir por cuotas entre los países de la UE a los emigrantes irregulares. Valls ha declarado que está en contra de esa fórmula. “Los refugiados deben ser repartidos entre los Estados miembros de forma más equitativa”, ha señalado el jefe del Gobierno francés.

“Estoy en contra de la instauración de cuotas”, ha sentenciado Valls. Y lo ha hecho en un lugar altamente significativo. En la frontera franco-italiana, a la que llegan a diario centenares de inmigrantes que alcanzan las costas del sur de Italia desde Libia tras cruzar el Mediterráneo poniendo en riesgo sus vidas.

Acompañado de su ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, Manuel Valls ha visitado la estación de Menton, la más utilizada por los inmigrantes para acceder a Francia en trenes procedentes de Roma. Los otros dos puntos de llegada habitual de refugiados son la estación de Brenner y el acceso por autopista en la zona de La Tourbie.

El jefe del Gobierno y Cazeneuve han observado cómo hacen los policías de fronteras franceses los controles para localizar a los inmigrantes irregulares. A muchos de ellos se les impide el acceso a Francia o son devueltos a Italia, pero vuelven a intentarlo en los días posteriores.

Según datos de la Prefectura de Alpes Marítimos, la región fronteriza con Italia, de lunes a jueves de esta semana han sido rechazados 944 emigrantes. En lo que va de año, la policía francesa ha detenido a 54 “pasadores” de emigrantes que se prestan a llevar a los refugiados a Niza o Cannes, y en muchos casos también a Calais, donde ahora unos 2.000 esperan su oportunidad para llegar a Reino Unido, uno de los destinos preferidos de los emigrantes. Como lo es Alemania. La gran mayoría no se quedan en Francia.

La mayoría de los emigrantes que entran por la frontera con Italia no se quedan en Francia, sino que se dirigen a Alemania y Reino Unido

El rechazo de Valls pone en grave riesgo el proyecto presentado el pasado día 13 por la Comisión Europea, que planteó el reparto por cuotas de 20.000 refugiados. Reino Unido, que no está en el espacio Schengen, lo rechazó de inmediato. La oposición de París deja prácticamente en papel mojado el plan, según opinan fuentes policiales francesas. La UMP de Nicolas Sarkozy y el ultraderechista Frente Nacional también se oponen a las cuotas.

Según el plan de Bruselas, Alemania tendría que asentar a 3.086 de esos 20.000 emigrantes. Francia, a 2.375. Italia, a 1989. Y España, a 1.549.

Valls ha precisado que, pese a su rechazo al plan, Francia está dispuesta a asumir su responsabilidad. En su opinión, hay que crear un cuerpo de “guardias de fronteras europeo”. París ha aportado un barco y un avión para controlar el paso de barcazas de emigrantes entre Libia e Italia.