El Gobierno mexicano cede ante las peticiones de los estudiantes
El secretario de Gobernación comparece ante miles de estudiantes y frena los cambios en los programas de estudios
En sólo tres días Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación de México (Interior), logró apagar una de las protestas estudiantiles más nutridas en lo que va del sexenio de Enrique Peña Nieto. El ministro se reunió la tarde del viernes con más de 10.000 estudiantes del Instituto Politécnico Nacional para leer las respuestas a las diez demandas que los politécnicos le habían entregado el pasado 30 de septiembre.
La movilización estudiantil logró frenar cambios al plan de estudios que contemplaban menos horas de clase y la reducción en la calidad de la currícula, la derogación del nuevo reglamento interno y la destitución de la directora de la institución, Yoloxóchitl Bustamante, que había antagonizado con los alumnos al señalar que las marchas estaban financiadas por grupos externos y quienes protestaban no eran estudiantes.
El recibimiento del secretario de Gobernación a los estudiantes el pasado 30 de septiembre fue celebrado y calificado como inédito por la prensa mexicana. Este viernes la escena se repitió como una calca. Osorio Chong salió de su oficina, ubicada en un palacio del Siglo XIX en el centro de la Ciudad de México, para recibir a los estudiantes en mangas de camisa.
La maniobra del secretario, el encargado de la política interna, para contener los brotes de inconformidad se dan al tiempo en que México se sume en un contexto de violencia iniciado por el asesinato de dos políticos y una jornada que dejó seis muertos y 25 heridos y unos 40 estudiantes de magisterio desaparecidos en Guerrero (al sur del país). Los organismos internacionales, la ONU y la CIDH, han ejercido presión al Estado para investigar la muerte de 22 supuestos narcos en el Estado de México y por el que ya se ha procesado a tres militares.
Una vez conocidas las respuestas, los dirigentes del movimiento de estudiantes de la segunda universidad pública más importante del país dijeron que se reunirán en asambleas durante el fin de semana para analizar el escrito entregado por el Gobierno y que rechazan la renuncia de la directora hasta que se le realice una auditoría por el manejo del presupuesto durante su gestión. La respuesta a sobre si aceptan o no los demás puntos la darán el 8 de octubre.
Antes de dejar partir a Osorio Chong, los estudiantes le recordaron sobre los normalistas desaparecidos. “Vivos se los llevaron, vivos los queremos”, demandaron. El secretario se había reunido con familiares de los desaparecidos unas horas antes.
La Asamblea General del Politécnico hizo responsable a Osorio Chong y al Gobierno Federal de cualquier daño que pudiera ocurrir a los integrantes del movimiento incluidos alumnos, profesores y trabajadores de la institución.
En la última semana el movimiento de los politécnicos había recogido muchos apoyos de otras instituciones educativas del país como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Autónoma Metropolitana.
José Daniel Ramírez Fernández, estudiante de primer semestre de la Escuela Superior de Ingeniería y Arquitectura (en donde se originó el descontento), y que ha estado con el movimiento desde el inicio, dijo que las acciones de Osorio Chong no son aplaudibles porque “es obligación del Gobierno escuchar a su pueblo, es su chamba”.
Además señaló que si no aceptaron las respuestas de inmediato fue porque algunas de ellas fueron muy ambiguas como el caso del aumento al presupuesto del Politécnico, “no dijo cuánto ni cuándo”.
A la pregunta de por qué decidió unirse al movimiento, el joven originario de Apizaco, Tlaxcala (centro del país) responde “vine por una educación de calidad, y me di cuenta que querían rebajarla”.
El Instituto Politécnico Nacional fue creado en 1936 durante el Gobierno del expresidente Lázaro Cárdenas con el objetivo de brindar otras alternativas de educación a los sectores sociales más desfavorecidos. Actualmente tiene una matrícula de más de 150.000 alumnos y es reconocida como una de las universidades más importantes de México y América Latina junto con la UNAM.
¿Cuáles eran las peticiones de los estudiantes?
1. La derogación del reglamento interno. Se cancela la aplicación del reglamento 2014 y continúa vigente el publicado en 1998 con reformas de 2004.
2. Cancelar los nuevos planes de estudio. La Secretaría de Educación Pública (SEP) acepta la propuesta y cancela los "programas que tecnifiquen la Educación superior".
3. Destitución de la directora, Yoloxóchitl Bustamante. La directora presentó su renuncia a Enrique Peña Nieto y fue aceptada. (Los estudiantes ahora piden hacer una auditoría a su gestión).
4. Sacar a la Policía Bancaria e Industrial de los planteles. Se hará vigente cuando el IPN y Gobernación diseñen una un plan que garantice la seguridad de los estudiantes.
5. Cancelar las pensiones vitalicias a exdirectores. La SEP instruirá que se prohíban las pensiones a exdirectores.
6. Una elección más democrática de las autoridades escolares. La SEP se reunirá con el Consejo General y el Consejo Técnico para determinar un nuevo procedimiento.
7. No represalias contra los integrantes del movimiento. El Gobierno Federal reconoce al movimiento y manifiesta que no habrá represalias.
8. Aumentar el presupuesto al IPN. El Gobierno comparte la propuesta pero no indica cuándo y cuánto aumentará.
9. Conocer los aspectos que el sector privado ha implementado en el desarrollo tecnológico. El Gobierno dice que no se permitirán injerencias externas, ajenas a los intereses del IPN.
10. Sacar a estudiantes radicales de la institución. El Gobierno Federal reconoce la calidad y excelencia académica de la Institución por lo que contribuirá a mantener el orden de la vida institucional.
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