_
_
_
_

Miles de estudiantes de Hong Kong desafían a Pekín con una huelga

La protesta se suma al movimiento contra las restricciones al derecho de voto

La Universidad China de Hong Kong, el 22 de septiembre Foto: AFP | Vídeo: ReutersFoto: reuters_live

Miles de estudiantes de Hong Kong iniciaron ayer una huelga contra la reforma propuesta por Pekín al sistema electoral de la excolonia británica. Bajo el lema “Desobediencia civil: nuestro destino en nuestras manos”, 13.000 personas según los organizadores, miembros de una veintena de asociaciones universitarias, se reunieron en la plaza central de la Universidad China de Hong Kong para lanzar la protesta.

Unos 400 docentes y administrativos apoyan la huelga estudiantil. Durante las protestas se impartirán cerca de 80 clases públicas sobre temas tan variados como “Gandhi: desobediencia civil y democracia participativa”, “El sector financiero y la desigualdad económica en Hong Kong” y “Relación entre espacio público y política”.

Más información
El portazo de Pekín a Hong Kong desalienta a los democrátas
La policía de Hong Kong disuelve con gases una protesta contra China
China le niega a Hong Kong las garantías de una democracia
Entrevista al fundador del movimiento Occupy Central

“No es simplemente faltar a clase”, dijo Alex Chow, secretario general de la Federación de Estudiantes de Hong Kong, “aprenderemos fuera de las aulas al tiempo que llamaremos la atención de la sociedad para encarar la dura realidad”.

La huelga se convoca en respuesta al anuncio de Pekín, el pasado 31 de agosto, de una reforma electoral para los comicios hongkoneses de 2017 que impedirá la libre presentación de candidatos a jefe del Gobierno local. Pekín quiere que los aspirantes sean designados por un colegio electoral de 1.200 miembros, provenientes de grupos empresariales y profesionales. Un referéndum no vinculante celebrado en junio en el que participaron 800.000 de los siete millones de habitantes de la excolonia —regida desde 1997 bajo el principio de Un país, dos sistemas— arrojó un contundente apoyo a la nominación libre.

China quiere que los candidatos los designe un colegio electoral de notables

En un emotivo discurso inaugural de la huelga, Chow criticó el sistema político: “¿Por qué 170 personas nombradas por Pekín en la Asamblea Nacional pueden decidir el destino de Hong Kong? ¿Por qué no somos nosotros, los siete millones de ciudadanos de Hong Kong los que decidamos?”.

Chow enfatizó que los universitarios han reaccionado porque no ven esperanzas de lograr elecciones libres. Aunque la batalla se plantee dura y larga, apuntó, el legado del movimiento de desobediencia civil será importante, con o sin frutos inmediatos, porque de lo contrario se perpetuará un sistema oligárquico. “Hoy los estudiantes toman la delantera con una huelga, el preludio de la desobediencia civil, una llamada a la sociedad”, dijo Chow conectando la iniciativa estudiantil con el movimiento Occupy Central, que pretende convocar una sentada de protesta en Hong Kong y cuya demanda de sufragio universal y presentación libre coincide con la de los estudiantes.

Al tiempo que comenzaba la huelga, una delegación de líderes empresariales de Hong Kong se reunió en Pekín con el presidente chino, Xi Jinping. El grupo, liderado por Tung Chee-wah, ex jefe del Ejecutivo de Hong Kong y actual vicepresidente de la Conferencia Consultiva Política de China, está compuesto por 60 representantes de los sectores inmobiliario, bancario e industrial. Además de intercambiar opiniones sobre la economía y los negocios, se da por sentado que los empresarios han dialogado con el presidente Xi sobre la situación política.

Grandes empresarios visitan al presidente Xi para debatir la crisis política

Este grupo de empresarios representa no solo una dominante fuerza económica en Hong Kong con importantes intereses dentro de China, sino que también cuenta con representación en el colegio electoral que se encargaría de designar a los candidatos a jefe de Gobierno local. Se trata de la mayor delegación de empresarios de Hong Kong recibida en Pekín desde 2003, cuando una protesta de medio millón de personas contra una ley antisubversión provocó la renuncia del entonces jefe del Ejecutivo Tung Chee-wha y la postergación indefinida de dicha legislación. Pekín considera al sector empresarial como un importante factor estabilizador en Hong Kong, una ciudad no acostumbrada a las protestas políticas.

Mientras tanto, el movimiento Occupy Central se haya sumido en la incertidumbre tras el revés que supuso el anuncio de Pekín el 31 de agosto. El empujón de la huelga estudiantil puede decidir a sus militantes a convocar finalmente la ocupación callejera con la que amenaza desde hace más de un año, coincidiendo con el 65 aniversario de la fundación de la República Popular China, el próximo 1 de octubre.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_