España propugna que la ONU imponga un alto el fuego en Gaza

El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha apoyado esta mañana en el Congreso la aprobación de una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que imponga a las partes un inmediato alto el fuego en Gaza, ante el fracaso de los mediadores para lograr un acuerdo. La propuesta contaría con el visto bueno de Israel, que se ha mostrado dispuesto a poner fin a su ofensiva sobre la franja, pero debe vencer la resistencia de Hamás, que condiciona el cese de las hostilidades al levantamiento del bloqueo.

Ante la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso, Margallo ha calificado el actual conflicto de “desastre humanitario de una magnitud sin precedentes en el siglo XXI” y ha desgranado las “estremecedoras cifras” del balance provisional de víctimas: 1.360 muertos, 7.200 heridos y 200.000 desplazados del lado palestino; frente a 59 muertos, la mayoría militares, del israelí.

La resolución de la ONU, inspirada en el plan egipcio, debe contemplar un alto el fuego inmediato, que permita la apertura de negociaciones para avanzar hacia una solución definitiva del contencioso basada en la fórmula de los dos Estados: “un Israel segura y una Palestina viable”.

El jefe de la diplomacia española, que visitó El Cairo el pasado fin de semana, ha calificado de “extraoerdinariamente grave” la situación y ha advertido del riesgo de contagio a toda la región, “que está a punto de estallar e incendiarse”.

España ha comprometido 2,2 millones de euros en ayuda humanitaria a Gaza y otro millón para la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), una cantidad que el propio ministro ha calificado de “insuficiente”, ante la destrucción masiva de infraestructuras en la franja, cuya reconstrucción “llevará muchos años”.

Para permitir la llegada de ayuda humanitaria, España apoya la reapertura del paso de Rafah —reactivando la misión de aduaneros de la UE— y la apertura de un base de contenedores en Chipre con inspectores internacionales, incluidos israelíes. que revisen los buques con destino a Gaza.

España evacúa a sus diplomáticos de Libia y deja al frente de la Embajada al responsable del archivo

Margallo rechazó la demanda de Izquierda Unida para que se expulse al embajador israelí en Madrid, Alon Bar, si Tel Aviv no detiene sus ataques, alegando que “no es un paso en la buena dirección y así lo cree toda la Unión Europea”.

Por otra parte, Margallo ha defendido la evacuación del personal diplomático español de Libia ante la falta de interlocuotres, la salida de la mayor parte de la colonia española --sólo quedan el país quienes tienen doble nacionalidad o han rechazado la repatriación, según Exteriores-- y el riesgo de que la situación se deteriore "hasta extremos extraordinariamente importantes", en palabras del ministro. Un avión Hércules ha atrrizado este jueves en la base de Torrejón de Ardoz (Madrid) con 28 personas, de las que 16 son españoles. 15 empleados de la Embajada, incluido el propio embajador, José Antonio Bordallo. Con todo, "la Embajada no se cierra", según Margallo, pues queda a cargo del responsable del archivo, y las legaciones diplomáticas de Italia y Malta prestarán tención consular a los españoles que quedan en el país.