Castigo y perdón para un músico cubano

“Libre acceso a la información / para tener yo / mi propia opinión”. “Elegir al presidente / por voto directo / y no por otra vía”. “Que se acabe el bloqueo / y el auto bloqueo / por favor”. “Ni militantes ni disidentes / todos cubanos /con los mismos derechos”. Esos fueron los versos que el jueves por la noche improvisó el cantante y pianista cubano Robertico Carcassés durante un concierto organizado por el Gobierno de Cuba en la tribuna antiimperialista de La Habana, mientras las coristas y la banda respondían en clave de salsa con este estribillo: “Quiero / acuérdate que siempre quiero”.

Al siguiente día de la presentación, Carcassés fue citado a las oficinas del Ministerio de Cultura de Cuba, donde le informaron que sus versos no eran compatibles con la revolución y que por tanto, había sido “sancionado” con una “separación indefinida de su función social”. Esto es: que en conciertos públicos organizados por el Gobierno y sus agencias de música, no volvería a tocar.

El castigo convirtió en viral el episodio, del que apenas se había percatado la audiencia que bailaba en la plaza ubicada frente de la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana, para reclamar “la liberación de los cinco”: los infiltrados cubanos detenidos en Estados Unidos en 1998, de los cuales cuatro aún cumplen penas por espionaje de entre 15 y 30 años de prisión.

Carcassés relató su encuentro con el funcionario que le impuso la sanción en la cuenta de Facebook de Interactivo, la banda que lidera. “Me dijo con mucho respeto que esas declaraciones no se avenían con la línea de la revolución cubana, que ese no era el lugar para eso, que había sido oportunista y que por tanto se me aplicaría una sanción por tiempo indefinido, consistente en ser vetado en todas las instituciones regidas por ese organismo”, escribió el músico. De acuerdo a su relato, las autoridades también le acusaban de haber “traicionado a los familiares que fueron a llorar a sus hijos y padres que están en el encierro” y de beneficiar con sus palabras “al enemigo” imperial.

“Por más que veo el video y releo lo que dije no veo por qué no se avienen mis ideas a la línea de la revolución cubana, si estamos tratando de mejorar nuestro sistema y se necesita coraje para perjudicarse uno mismo diciendo lo que se piensa”, ha argumentado el músico a través de su carta pública. “Quizás me equivoqué al esperar que mis palabras dieran una imagen de tolerancia y evolución del actual gobierno cubano”, agregó. Carcassés criticó también que los cubanos de la isla y de la diáspora deban sufrir “el desarraigo y la intolerancia del gobierno revolucionario” y a la vez, “la manipulación del poder cubanoamericano”. Y abogó nuevamente por la convocatoria a elecciones libres: “No creo que elegir al presidente por voto directo afecte nuestro sistema, más bien le daría al pueblo la posibilidad real de sentirse representado al más alto nivel”.

Silvio Rodríguez, trovador de la revolución cubana, salió en defensa de Roberto Carcassés y criticó la severidad de la sanción, aún a pesar de no compartir las declaraciones públicas de su colega. “Lamentablemente, a la torpeza de mi compañero siguió otra por parte de la institución que rige el trabajo de los profesionales de la música en Cuba”, escribió Rodríguez en su blog, Segunda cita.

“Por repudio a prácticas de este tipo en otros tiempos, por rechazo a la idea de que volvieran a instaurarse, tomé la decisión de invitar a mis próximos conciertos al músico sancionado, porque un error no debe conducir a otro, pero sobre todo porque me parece espantoso que la causa de Los Cinco pueda usarse como pretexto para un acto de represión”, argumentó el cantante, autor de las letras de la Canción del elegido, Playa Girón y El necio, entre una amplísima lista de temas.

Fue también Rodríguez quien, horas más tarde, difundió la noticia del perdón concedido a Carcassés a través de una breve nota que ahora acompaña la más reciente publicación de su blog. “NOTICIA: La Habana, martes 17 de septiembre de 2013, 17:45 hs. Autoridades del Ministerio de Cultura se reunieron hoy con Robertico Carcassés y las conversaciones fueron tan positivas que han decidido dejar sin efecto la sanción. Dicen que la gente hablando se entiende. Ojalá así sea siempre”, dice el mensaje de Silvio Rodríguez, con el cual se zanjó la polémica sobre lo que es lícito cantar en La Habana, y lo que no.