Hace un año Cataluña se situó en el mapa internacional. Hasta la Diada de 2012 nadie la localizaba en la geografía de los conflictos. Se encargaron de hacerlo, primero, la multitud del ‘millón y medio’ que ocupó las calles de Barcelona y, luego, la reacción seguidista de Artur Mas, con la disolución del parlamento y la convocatoria de unas elecciones que el presidente quiso convertir en plebiscito. La decepción del resultado electoral hizo su mella en las redacciones de los medios internacionales y en las cancillerías: no había para tanto; habían anunciado un terremoto y no ha pasado de un susto sin importancia. Vuelta a la normalidad.
¿Qué ha sucedido en un año para que Cataluña aparezca de nuevo y ahora todavía con un perfil más dibujado y preciso en los mapas internacionales? Pocas cosas. Pocas en la política catalana, donde hay un gobierno paralizado y sin capacidad para hacer ni siquiera los presupuestos. Pero menos todavía en la política española, donde la Diada de 2012 fue recibida por Rajoy con palabras despectivas --el lío y la algarabía-- y las elecciones fueron leídas como una desautorización ya no de Mas sino del independentismo.
El presidente ha hecho dos cosas, cuyo calado se ha ido dibujando justo en las vísperas de la Diada. De entrada, se ha reafirmado en su agenda y calendario, fiel al pacto establecido con ERC, en el que este partido le dio la investidura y obtuvo un cierto 'droit de regard' sobre la acción de Gobierno, a la vez que situaba a su presidente, Oriol Junqueras, como jefe de la oposición.
Está claro que Mas contempla todos los pasos, uno detrás de otro, que conducen a intentar la celebración de una consulta en 2014 e incluso intentar que Esquerra se incorpore al gobierno en algún momento, cosa que no significa su renuncia a a mantener la llave de la disolución parlamentaria ni su propósito de mantenerse en cualkuqiera de los casos dentro de la legalidad.
En segundo lugar, y en dirección contraria, ha tendido los puentes del diálogo, que significa tener un buen pulso de lo que piensa el adversario y facilitar lo mismo a la otra parte; y lo ha hecho a pesar de ERC, que solo quiere que se hable para concretar la consulta y la pregunta.
La inacción política ha sido la clave del éxito de la acción en la calle. Y también del éxito mediático. La gran sorpresa de todos los observadores extranjeros la proporciona el quietismo del Gobierno central y su contraste con la perfecta organización de una movilización de masas como la que se desplegó en la Via Catalana, que no se puede hacer sin una logística casi perfecta.
Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
En un año se ha pasado de la sorpresa por la espontaneidad a la sorpresa por la excelencia organizativa. Se supo en 2012 que había voluntad y se sabe en 2013 que está organizada. La conclusión es clara: esto va en serio, detrás hay gente que sabe lo que se trae entre manos y es una auténtica frivolidad no tomárselo como tal.
El quietismo ya no tiene más recorrido.
Rajoy se debate desconcertado entre quienes le piden mano dura con los catalanes, con suspensión de la autonomía y recurso a los tribunales, y quienes le piden una oferta sustancial que actúe como cortafuegos e introduzca un ritmo distinto, le sirva para recuperar la iniciativa y ataje el deslizamiento de la opinión pública hacia la independencia.
El éxito de una iniciativa de este tipo dependerá de dos cosas: de la rapidez con que se presente y de la capacidad para convertir esta oferta en un proyecto político y no en una propuesta apaciguadora y oportunista. Si no se hace así, de prisa y con mucha mano izquierda, puede que no sirva para nada.
Y, sin embargo, la tentación de Rajoy, lo que le dicta su carácter, seguirá siendo la de no hacer caso ni a unos ni a otros. Esperar que todo se enfríe un poco para volver al nirvana de la inacción. No meterse en líos, sobre todo. Ni castigar provocadoramente a los catalanes como le piden desde la derecha, aun a costa de alimentar la espiral de la polarización y, por tanto, el independentismo reactivo; ni cederles algo como le insinúan sus moderados, al precio de enajenarse a sus propias bases políticas en el conjunto de España sin ganar ni un solo voto en Cataluña. Justo seguir mareando la perdiz con la vana esperanza de que la economía mejore, escampe el mal tiempo político y los independentistas empiecen a cansarse.
Si se mantiene en sus trece, dentro de un año, en la tercera Diada, el movimiento, todavía más reforzado y seguro, entrará en una nueva etapa, todavía más imposible en todo, incluido el retroceso, y de respuesta desde Madrid cada vez más cara y complicada. Nada permite pensar que decline o ni siquiera que pierda su capacidad de movilización en la calle si persiste el vacío político al otro lado. Seguro que la opinión internacional, ahora todavía distraída y escéptica, empezará entonces a virar hacia una lectura mucho más negativa para el gobierno español.
Comentarios
El Sr. Mas ha realizado un órdago a la grande, puede que gane o puede que pierda. Hacer una oferta a los catalanes al hilo de las últimas Diadas es una oportunidad de ceder al enésimo chantaje, sin garantía de que este sea el último y de que cese el fomento al odio a España, así por qué y para qué ceder. El Gobierno tiene la ley de su parte, en una democracia reconocida, donde todos tenemos los mismos derechos y obligaciones y donde pagan impuestos los individuos, no los territorios. La actitud del Gobierno puede que sea la correcta, tal vez sea apropiado que los catalanes solitos se vayan. Da la sensación de que muchos españoles están cansados de este tema y les da igual lo que hagan los catalanes.Al final es posible que todos perdamos, pero seguro que algunos perderán más, y está por ver quién será.
Visca Catalunya Lliure !
Totalmente de acuerdo con su análisis.Le escribo desde Asia y cda vez me sorprende mas España por su falta de realismo . Los JJOO nadie fuera de España daba un duro por Madrid 2020 y dentro era lo contrario. Lo de Cataluña es lo mismo fuera se ve como muy factible y en España como una quimera . Por no hablar de Gibraltar y la salida de la crisis que se da como un hecho. Sin embargo desde fuera se ve como un sinsentido que un pais con . 26% de desempleo y en la ruina celebre los contractos millonarios de futbolistas.Da la sensación que gobernantes y medios de comunicación quieren mantener al pais en estado onírico. Muchas gracias
Algunos siguen sin enterarse, el señor Mas no ha lanzado nada, va a remolque de una sociedad civil que le lleva varios cuerpos de ventaja. Este es un buen momento para empezar a negociar.Segun la última encuesta de la SER (a la que creo que se pueda acusar de ser pro-independencia), 52% si, 25 % no 7% de abstencion y 16% de indecisos. Por tanto el si dobla al no y se reduce claramente el número de indecisos. Rajoy aún tiene tiempo de presentar un proyecto ilusionante para los catalanes poco convencidos del independentismo, poner fecha para una consulta e intentar ganarla. Si no se pone a ello, haremos la consulta nosotros mismo y el resultado esta cantado. Personalmente estoy a favor de la independencia, pero es un tema suficientemente serio como para ser debatido de forma rigurosa y presentado en igualdad de condiciones. Basta ya de esconder la cabeza debajo del ala, votemos ya.
Esto de los nacionalistas catalanes, perdone, pero es de chufla de barrio. ¿Qué van a hacer? Declarar la independencia unilateral? Desde el segundo uno que se anunciaran unas plebiscitarias, los depósitos de los bancos catalanes fuera de Cataluña (y dentro) volarían a velocidad de la luz, quebrarían ipso facto (por qué voy a pagar mi hipoteca a un banco de un país que no reconozco), los pensionistas se domiciliarían fuera de para seguir cobrando en euros. Los pagos entre empresas se suspenderían (va a vender algo a alguien que no tendrá euros?), los funcionarios no cobrarían en cuanto el Estado no enviara el cheque. Es todo absurdo y encima, como no tiene ni idea de nada, te lo combaten con argumentos de chiste o con amenazas del tipo, nos vendemos a los rusos, a los chinos o nos convertimos en un paraíso fiscal en veinticuatro horas. Y para hacerlo bien debería ser de terciopelo, de mutuo acuerdo (lo que no parece) y mediante un proceso que duraría años para además acabar con barreras, aranceles, trabas, boicots, y demás, es decir, el camino opuesto a Europa. No existe caso en el mundo igual. No existe un sólo precedente de ruptura de mercados integrados desarrollados. Ni uno. Pero aquí, muy español, los catalanes se dejan llevar por los pájaros de la ilusión, aunque juegan con fuego económico sin ver que ha sido el nacionalismo el que les ha birlado lo que desean, la primacía obtenida en el franquismo, digámoslo claro. Es cierto que nadie puede avanzar el futuro, pero no hace mal Rajoy en dormir la siesta. Ya le despertarán por teléfono desde alguna torre de Barcelona (o desde Bruselas) para que ponga fin al ridículo espectáculo.
Lo que está ocurriendo está por encima del Sr. Mas, del Sr Junqueras y del Sr. Rajoy. Es la sociedad civil catalana la que se ha puesto en marcha y adelanta a la política. El Sr Mas es un oportunista que se dio cuenta de la realidad el año pasado, tras la Diada, y que quiso subirse al carro. El problema es de ideología. CIU está dividida. Ha quedado hoy de manifiesto por las declaraciones de uno de los políticos más impresentables del país: el Sr. Durán Lleida. Unió tendría serias dificultades de obtener 5 diputados en el Parlament si hoy no fueran camuflados tras CDC, Durán es uno de los problemas qu deben despejarse de cara a futuro. Va por sus intereses políticos, más cercano al PP que a CDC y sobre todo por los intereses económicos que representa. Pero el problema es insoluble. Rajoy no puede ceder ni un milímetro pues si lo hace es su haraquiri. La sociedad catalana no aceptará medias tintas. El movimiento es transversal y representado por ERC, CDC, CUP's, gran parte de Unió, buena parte también de PSC y lo mismo con ICV. Asistí a la via y puedo constatar que había votantes de todos los partidos mencionados.No hay salida. Se puede intentar todo lo que se quiera pero esto está bendecido. Elecciones generales plebiscitarias 2014, con beneplácito de la comunidad internacional que no entenderá este inmovilismo ante una gente pacífica y organizada que reivindica su libertad ante un estado español desorganizado, impresentable, corrupto e imperialista. A continuación declaración unilateral de independencia bendecida por la UE. Un problema para España y para Catalunya, por no querer entender unas justas reivindicaciones que ha sido contestadas con provocaciones como la recogida de firmas contra el estatut y con leyes de educación como la de Wert.De estos polvos vienen ciertos lodos.
Ola, soy brasilero y opino que Catalunha tene que ser uma nacon indiependente de Espanha. Teno muitos amigos de Barcelona. Paraben pola cadena humana. Bjos
Si el Gobierno enviara una carta a la comisión europea el Catalán sería idioma oficial en la UE....... una carta......Decís que nos queréis pero no sois capaces de hacer nada por nosotros..... da que pensar verdad?Yo amo Castilla, amo Andalucía y amo al resto de de Espanya y el resto de españoles, pero yo soy Catalán, hijo de catalanes, nieto de catalanes. Aprendí el Castellano a los 4 años en una escuela con inmersión en Catalán de las que tanto os quejáis y no he votado vuestra constitución. Antes del Estatut, iluso yo, creía que se podía encontrar una solución para que los Catalanes nos sintiéramos relativamente cómodos en España... 10 individuos politizados tumbaron la voluntad de una mayoría de Catalanes que sí votaron un estatuto....No odio Espanya, ni los espanyoles, me encanta leer libros en Castellano... pero quiero poder construir un estado para mi nación puesto que el estado español ha demostrado de forma reiterada y continuada que no nos sirve a los Catalanes.... Si queréis hacer cosas para evitar la independencia se pueden hacer muchas, pero debéis aplicarlas y no solo prometerlas, porque ya no nos fiamos de quien incumple los presupuestos que él mismo ha aprobado y promete cosas que nunca llegan, como las disposiciones adicionales del estatuto,etc. Aquí un listado de acciones ejemplo que podría tomar el gobierno:-Hacer el Catalán oficial en toda España.-Dejar de llamarle Español al Castellano(el catalán también es un idioma español)- Enseñar 2 horas a la semana de Catalán, Vasco o Gallego en todos los colegios públicos de España (De profesores tendréis más que de inglés, y todos nativos)- Dar un trato fiscal justo.- Compartimentar los impuestos (IRPF y Sociedades para las CCAA, IVA para el estado) cada cual con su poder normativo y recaudatorio.- Listado de competencias del estado y de las CCAA sin injerencias de unos sobre los otros: si la generalitat es competente en comercio, no puede salir el estado aprobando normas de horarios comerciales)-Descentralizar el estado(de verdad, no haciendo un paripé como con la CMT)- Descentralizar los aeropuertos para que todas las regiones puedan competir con igualdad de condiciones, no entre ellas, sino con el mundo......Pero como nada de esto va a pasar.... me temo que va a tocar cambiar el pasaporte.... Pero que no os engañen... nadie en Catalunya odia al resto de españoles( diferente es si hablamos del gobierno de España) y nadie aquí dejará de comprar jamón, ni rivera del Duero, ni dejará de visitar Sevilla ni Madrid, y vosotros.... tampoco dejaréis de visitarnos, porque bien avenidos o no, seguiremos siendo hermanos.Un abrazo de un Catalán que cree que la independencia es la peor solución, pero que la apoya ya que en estos momentos ya es la única posible. Que impotencia!
En la tercera Diada, justo el 11 de septiembre de 2014, la ANC pondrá urnas, como hicieron en su día algunos ayuntamientos. Como no lo convoca el Govern, se tolerará como manifestación autorizada sin valor jurídico. Para que sirva como presión real, y que nadie vote cuatro veces, como se ha hecho en la Diada 2013, los participantes deberán dar sus datos. Habrá una lista de catalanes que se pronuncia, con nombres y apellidos, por la independencia. ¿También por la secesión?¿Tolerará Francia una cuña independentista justo bajo su trasero que abre la caja de los truenos en el estado más centralista y con más lenguas de Europa?¿Alguien puede explicar cómo es que la ANC se empecinó, y consiguió, llevar la Vía Catalana a Valencia y ni siquiera intentó aproximarse a Perpinyà, capital de la Catalunya Nord?
No habrá tercera diada. Antes habrá una declaración unilateral (DUI)
Vale votamos, pero todos. Primero en Cataluña y luego en España, a ver que sale. Y donde ganen los españoles en Cataluña se quedan con nosotros. Dos identidades dos estados, a ver si vamos a ser demócratas a medias.
Martín Larrea: la via catalana penetró en Valencia y en territorio francés, hasta Le Perthus.
Lo único que me parece cierto es que nadie sabe que hacer. Unos, diciendo que en la Constitución no viene nada sobre soberanismos, se dan por satisfechos; otros echando la culpa de todo a España, han acabado su jornada. Inepto Rajoy, inepto Rubalcaba, inepto Mas, inepto Jonqueras
La inacción de Rajoy va a costar muy caro a todos.felicidades Xavier por su carta...somos muchos que pensamos igual ,cada día más ...esto es imparable.Lamentablmente casa vez más y a pesar de las amenazas de muchos ,el ADEU a España ya esta latente y no va a parar.El PP y mucho PSOE no entienden nada y el tribunal Constitucional esta más que manipulado...Hoy la Biblia de la economía THE Economic dice que la única cosa que puede perder Catalunya con la independencia son sus cadenas...más claro el agua,váyanse a amenazar con el dinero ,las pensiones etc a otra parte...nos tienen ahogados ya y no nos vamos a dejar ahogar más.Adeu España y lo lamento muchoRajoy no esta preparado para ser no un secretario de un secretario...lamentable
Lo que moviliza la quietud. Lo que no sé es si paralizaría algo el no parar quieto. No confío en que Rajoy quiera demostrar lo segundo.
El problema con cierto independentismo es su absoluta carencia de sentido de la realidad. Tomo por ejemplo la nota de Xavier, publicada a las 23.50, y las medidas que enumera para que España haga algo. Y, para que no influyan las posiciones de cada uno, trasladémoslas a Italia, un país no muy distinto de éste, con varios idiomas locales y un separatismo activo. Según él, habría que -Hacer el friulano (o el véneto, o el siciliano, etcétera) oficial en toda Italia (que fuera de sus regiones respectivas no tengan prácticamente hablantes, por lo que se ve, no importa); -Dejar de llamarle italiano al toscano (los mencionados, y otros más, también son idiomas italianos. El que llamar "italiano" al toscano signifique sólo que es el idioma en que uno puede entenderse en cualquier parte de Italia, cosa que no ocurre con el véneto o los demás citados, tampoco importa). -Enseñar 2 horas a la semana... ¿sigo? Pasemos a lo otro. -Dar un trato fiscal justo (aquí estaría de acuerdo la Lega Nord; según ellos, "Roma nos roba"; el cuento es el mismo. Y no dudo de que lo será también entre los independentistas araneses, convencidos de que "Cataluña les roba"). -Descentralización verdadera (el hecho de que España sea probablemente el país más descentralizado de Europa, y desde luego el que más de los no federales y con diferencia, tampoco vale). En fin, ni tengo espacio, ni supongo que nadie ganas de que le maree más. El problema es que la ceguera de Xavier la padece, me temo, cada vez más gente en Cataluña. Mala cosa. Y no por España, sino porque estar ciego es malo en sí mismo, y puede conducir a darse más de un golpe.
El problema de la DUI (Declaración unilateral de independencia) es que no dejará de ser una declaración teórica. Pues al día y al mes siguiente para comprar, vender y alquilar casas seguirá siendo necesario el DNI. La Generalitat seguira necesitando al Estado para pagar sus facturas. Las pensiones las seguirá pagando la Tesorería Nacional de la Seguridad Social. La mayoría de vías de tren, los aeropuertos, los puertos, etc. seguirán siendo de titularidad del Estado español. Todo eso sin contar con los problemas de pasaportes, DNI etc. que genera el que el Estado central no acepte esa independencia... En fin, que el problema es que las banderas, los himnos, las DUI son solo parafernalia...Una independencia si llega, es una cosa mucho más complicada y el caos en Catalunya, a quien más perjudica es a los catalanes (de hecho, el Estado central no necesita ni tanques ni nada, le bastaría con un obstruccionismo pasivo y la judicialización de todo lo que puede judicializarse). Por lo demás, hay algo que no entiendo, el PP no va a tener siempre mayoría y una consulta es muy probable que si fuese admitida por el gobierno central con otras mayorías en el Parlamento (eso sí, entonces igual una de las alternativas a la hora de votar sería una España confederal y eso es lo que quizas preocupe al independentismo radical, pues entonces podría perder por goleada la votación, como en en Escocia, de ahí que tenga que ser ya y da igual que sea a la brava). De verdad, no lo entiendo, si están tan seguros, no es una cuestión de 2, 3 o 4 años. Y ya digo, en la práctica, quitando los cuatro militantes y el aparato nacionalista que recibiría prebendas y puestos en un EStado independiente (y cuanto más descontroladamente se haga más puede pillar), a quíen más perjudica un proceso independentista caótico y a la brava es al catalán medio, que debería ser el más interesado en que la independencia (si es que se hace) se haga de la manera más clara y ordenada posible. Vamos, que el voluntarismo es muy mal consejero político y que en las negociaciones quien más tiene que perder y quien más riesgos corres es quien más prudente tiene que ser.
Nada nuevo, mismos comentarios mismos anti y favor,mismos miedos,mismas tonterías sobre Catalunya sin vivirla..¡Visca Catalunya lliure y republicana!!
No lo tendría tan difícil. Si desde España se ofreciera una confederación seguramente sería aceptada por muchísima gente en Catalunya. Y es un término medio. Lo otro a largo plazo será intervenir la autonomía con la consiguiente respuesta popular, algo que nos llevaría a un caos que ahora ni imaginamos.
Respecto a lo que decía Xavier, y a lo que le contesta Frank N., sobre "dejar de llamarle español al castellano (el catalán también es una lengua española)", como dice Xavier:Cualquiera puede ver, si lo desea, en la wikipedia lo que se dice acerca del nombre de la lengua oficial en los distintos países hispanoamericanos. Yo acabo de hacerlo con Argentina, Chile, Cuba y México. En todos los casos figura que la lengua oficial es el ESPAÑOL. (También en todos, en la wikipedia en inglés, se lee que es el "spanish language"; ninguno habla de "castilian"). El hecho es que, en España como en América, se utilizan a veces los dos nombres, pero siempre dando preferencia al de ESPAÑOL. No sé si Xavier pretenderá que España obligue también a esos países a cambiar el nombre que ellos dan a su lengua; el problema que yo veo es que ellos, muy lógicamente, dirán que nadie tiene autoridad para imponerles a ellos el nombre que prefieran dar a la lengua que hablan. Por lo demás, dice Xavier que, repito, "el catalán también es una lengua española", en lo que naturalmente tiene toda la razón. Pero le citaba Frank, de pasada, a los independentistas araneses. Según la lógica de Xavier, éstos podrían exigir a Cataluña que cambiase el nombre de su propia lengua, ya que "el aranés también es una lengua catalana". Yo no diría lo que dice Frank respecto a la ceguera; creo que hay que tratar de entenderse, no de pelearse. Pero no veo la lógica en lo que dice Xavier sobre el nombre de la lengua; creo que se equivoca, y que se equivocan con él los independentistas que defienden lo mismo.Por lo demás, y respecto a lo que Xavier dice de que hay que dar "un trato fiscal justo", le copio aquí enlace a un artículo publicado en El País sobre ese tema, y por el que verá que (como mínimo) es un tema sujeto a discusión; no, como él y otros independentistas creen, un tema ya resuelto, en el sentido de que hay un "expoli", y no hay más que hablar: http://economia.elpais.com/economia/2012/10/05/actualidad/1349467455_178571.htmlY por fin, respecto al tema del Estatut, otro artículo, también de El País: http://elpais.com/diario/2010/07/04/domingo/1278214236_850215.htmlSobre todos estos temas, como sobre otros, se puede, y hasta se debe, discutir. Pero a mí me parece que los independentistas, o algunos por lo menos, están completamente seguros de que tienen razón, de que el nombre de la lengua debe cambiarse (aunque los hispanoamericanos no quieran, supongo), de que España les roba y no hay más que hablar, etcétera. Y así, pienso yo, es difícil entenderse. Yo quisiera que se hablara de verdad, con ambas partes dispuestas a escuchar las razones del otro y a dejarse convencer por ellas, si les parecen mejores que las propias. ¿Es así como ve Xavier las cosas? Tal como se expresa, a mí (y pido perdón si me equivoco en eso) no me lo parece.
No lo sé, Sr. Bassets. En mi opinión son los catalanes los que tienen. primero, que negociar consigo mismos qué es lo que quieren. Lo que quiere el Sr. Navarro no es lo mismo que el Sr. Duran, ni lo que quiere el Sr. Junqueras lo mismo que el Sr. Mas, ni lo que quiere el Sr. Ribera lo mismo que la Sra. Camacho. Además, usted piensa que todo va evolucionando a favor de alejarse de España, pero en la primera Diada estaba el Sr. Duran, el PSC e ICV y en la Vía Catalana ya no estaban. En la tercera tal vez ya no esté ni el Sr. Mas. Usted parece opinar que Rajoy debe escuchar a los participantes en la Diada, yo creo que debe escuchar a sus votantes y, llegado el caso, a la mayoría de los españoles que están radicalmente en contra de la independencia de Cataluña. Si los catalanes, la mayoría de los catalanes, si es que llega a existir tal mayoría clara, quieren realmente la independencia deben hacerse a la idea de que deberán intentar obtenerla de forma unilateral y cuanto antes.A medida que pase el tiempo será más y más dificil, pues en el resto de España los ánimos empiezan a exaltarse y el número de dificultades aumentarán. El tiempo, en mi opinión, no corre en favor de las reivindicaciones catalanas, sino en contra. Por otra parte felicito a Paradojas de ayeryhoy por su comentario.
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Escribe en EL PAÍS columnas y análisis sobre política, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ‘El año de la Revolución' (Taurus), sobre las revueltas árabes, ‘La gran vergüenza. Ascenso y caída del mito de Jordi Pujol’ (Península) y un dietario pandémico y confinado con el título de ‘Les ciutats interiors’ (Galaxia Gutemberg).
