El Gobierno del DF responde con más policía en la crisis por los 11 desaparecidos

Siete días después de la desaparición de 11 jóvenes a la salida de una discoteca a plena luz del día en la céntrica Zona Rosa de la capital, el Gobierno del Distrito Federal ha respondido incrementando la presencia de policías en el barrio. Un total de 100 agentes velan desde este domingo por la seguridad en la zona.

La petición expresa la ha hecho el jefe del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, quien fuera el máximo responsable de la Procuraduría de Justicia del DF durante buena parte del sexenio anterior.

Hasta el momento las autoridades siguen con las investigaciones para tratar de ubicar a los desaparecidos, así como al dueño del local, Ernesto Espinosa Lobo. Una semana después del extraño suceso –que sería el primero de su tipo en la capital--, no hay confirmación sobre el rapto ni una hipótesis sólida sobre lo que pudo haber ocurrido. La versión no oficial, construida por las declaraciones de los familiares, basadas en el supuesto testimonio de un joven que, asegura, logró huir del secuestro, es que el grupo de desaparecidos –jóvenes de entre 16 y 30 años del popular barrio de Tepito- fue sacado de la discoteca a toda prisa por el dueño del local –con la excusa de que iba a haber una redada policial- y que afuera los esperaba un comando de personas con el rostro cubierto que se los llevó en tres furgonetas.

Durante una conferencia de prensa celebrada este sábado, el procurador de Justicia del DF, Rodolfo Ríos, dio a conocer imágenes de los videos que están analizando. El fiscal agregó que a partir de la revisión de las imágenes detectaron entre ocho y diez vehículos sospechosos, camionetas y camiones de mudanzas de los que no revelaron mayores detalles, en los que presumen pudieron haberse llevado a las víctimas. En todo caso, la dependencia comenzó a investigar el caso el miércoles pasado, cuatro días después de que los jóvenes desaparecieran. Un informe reciente de Human Rights Watch concluye que en el caso de las desapariciones, las primeras 24 horas son fundamentales para el éxito de las pesquisas. Este domingo la Procuraduría señaló al diario EL PAÍS que no haría nuevas declaraciones sobre el caso, pues “todo lo que se tenía que comunicar, ya estaba dicho”.

En su cuenta de Twitter, el especialista en estudios sobre seguridad Ernesto López Portillo , criticó el silencio oficial sobre este caso. “Cada mensaje oficial que baja la gravedad del caso Heavens (el nombre del after del que supuestamente desaparecieron los jóvenes), la incrementa en la percepción del público”, escribió este domingo el también director fundador del Instituto para la Seguridad y la Democracia (Insyde). Agregó dos mensajes más: “La comunicación política en torno a escándalos de violencia requiere altísimas dosis de especialidad y sensibilidad”. “Hace tiempo se sabe que los escándalos de violencia mal comunicados por la autoridad incrementan desconfianza e inseguridad”.

Mientras, el ambiente se enrarece en la capital, considerada en los últimos años un remanso de paz en comparación con lo que pasaba dentro de la República. El sábado por la tarde elementos del cuerpo de granaderos de la Secretaría de Seguridad Pública del DF se enfrentaron contra 100 manifestantes que realizaban pintadas dentro de la estación de metro Tacubaya, provocando un enorme barullo. El Sistema de Transportes Colectivo aclaró después que la acción se llevó a cabo para impedir actos vandálicos dentro de las instalaciones que pusieran en riesgo la integridad de los usuarios.

En este caso no hubo detenidos ni personas heridas, pero el incidente no pasó desapercibido, ni siquiera para los políticos de la izquierda. La senadora suplente de Movimiento Ciudadano, Martha Tagle, utilizó su cuenta en la red social Twitter para lanzar un dardo envenenado a Mancera “Desaparecidos en zona rosa, granaderos en el metro, aumento de tarifas, que está pasando en el DF? @ManceraMiguelMX”. La teoría sobre la supuesta tranquilidad de la Ciudad de México y de su Gobierno, empieza a tambalearse.