La oposición pide juicio político para la acusada del escándalo electoral de México
Robles, secretaria de Desarrollo Social, niega ante el Senado el uso de ayudas sociales para ganar votos: “Yo no tengo que renunciar, no he hecho nada indebido” Peña Nieto advierte de que no tolerará el uso electoral de los programas sociales
En una ríspida comparecencia ante el Senado, la secretaria de Desarrollo Social de México, Rosario Robles, fue desconocida por el opositor Partido Acción Nacional (PAN) como interlocutora válida y enfrentó severos cuestionamientos del Partido de la Revolución Democrática (PRD), que descalificó la ambiciosa Cruzada Nacional contra el Hambre del presidente mexicano Enrique Peña Nieto.
La comparecencia de Robles es el siguiente capítulo de la crisis derivada de la denuncia realizada por el PAN la semana pasada por el supuesto uso de programas sociales por parte del PRI para conseguir réditos electorales en Veracruz (este del país).
"Yo no tengo que renunciar porque no he hecho nada indebido", ha asegurado ante el Senado la responsable de Desarrollo Social de México, Rosario Robles, una de las protagonistas del escándalo.
Al principio serena, a ratos incluso muy sonriente, Robles afrontó durante más de cuatro horas ante los senadores el coste político de las acusaciones de la oposición en contra de su oficina y la del gobernador veracruzano Javier Duarte. La polémica ha causado que sea suspendido el Pacto por México, una ambiciosa alianza de los principales partidos y el Gobierno de Peña Nieto. El escándalo ha provocado también que los partidos opositores, incluido el antiguo partido de Robles (el izquierdista PRD) hayan pedido de manera conjunta un juicio político contra ella y contra el gobernador Duarte.
La serenidad inicial de Robles —que se fue convirtiendo en un gesto adusto a medida que pasaba la tarde— parecía sustentarse en el apoyo del presidente Peña Nieto, que el viernes pasado pronunció la frase más repetida en los corrillos políticos desde que el viernes el mandatario le dijera en un acto público: "Rosario, no te preocupes". El Gobierno de la República, dijo el mandatario priista este martes, no permitirá "que nadie lucre con las carencias de la gente, ni tolerará el uso electoral de los programas sociales”. Ya en la comparecencia, los senadores del PRI arroparon y aplaudieron diversas intervenciones de la secretaria.
Robles ha asegurado ante el Senado que tiene la conciencia tranquila. Aunque en su comparecencia ha tenido que encajar duros ataques. "Debe sentirse orgullosa, secretaria, el presidente la escogió a usted ante el Pacto por México", afirmó Roberto Gil, senador de Partido Acción Nacional (PAN). "Usted no tiene autoridad moral para dirigir la política social de este país", remachó Adriana Dávila, del mismo partido. Su excompañero de partido Manuel Camacho Solís pidió que renunciara, o que dijera al menos al presidente Peña Nieto que estaba en un error al no atender los cuestionamientos de la oposición, y concluyó: "Tampoco usted es el objeto principal de esta disputa, hasta hoy usted recibió órdenes [...]. Lo que se discute aquí es la posición política del presidente". "O corrige o el Pacto por México quedará como una anécdota", advirtió Camacho.
El escándalo que ha paralizado el Pacto por México arrancó cuando el líder del PAN, Gustavo Madero, acusó el miércoles pasado a Robles y al gobernador de Veracruz de dirigir la entrega de ayudas con el objetivo de favorecer a los candidatos del PRI en las elecciones regionales del próximo 7 de julio. Madero difundió también una grabación de 30 minutos que mostraba reuniones entre funcionarios del Gobierno de Duarte y de Sedesol para definir esta estrategia. Robles destituyó por ello al delegado de su ministerio en Veracruz, Ranulfo Márquez, y a otros seis funcionarios. La secretaria ha insistido este martes en la transparencia de sus políticas y se ha felicitado por las medidas que ha tomado hasta ahora: "Nunca en la historia de las denuncias, nunca, se había despedido a trabajadores involucrados". También ha precisado que Boca del Río, uno de los municipios supuestamente parte de la estrategia electoral, no participa en el programa de la Cruzada contra el Hambre, la política más cuestionada por la oposición, que ha señalado que más que una estrategia para ayudar a los más pobres se trata de una fachada para operación política-electoral. En esa línea, senadores acusaron a la Secretaría de Desarrollo Social de elegir a las localidades beneficiarias de programas sociales en función de los intereses electorales.
En México, 51,9 millones de personas (un 45,6% de la población del país) viven por debajo de la línea de la pobreza. La Sedesol es la institución gubernamental encargada de gestionar los programas sociales destinados a los más pobres. Antes de dirigirla Robles fue la única mujer al frente del Distrito Federal (el Gobierno de la capital), puesto que ocupó entre 1999 y 2000. Su entrada en el equipo de Enrique Peña Nieto en diciembre de 2012 le valió críticas entre sus excompañeros de partido.
Después de la tormenta política desatada en la Sedesol, Peña Nieto anunció este martes su intención de suspender temporalmente las actividades públicas relacionadas con el Pacto por México "con el fin de abrir un espacio para el diálogo franco que permita superar los desencuentros y así fortalecer al Pacto”. Por ello, fue pospuesta la presentación en Palacio Nacional de una reforma bancaria programada para este martes. Ahora, el Ejecutivo debe intentar salvar su plan más ambicioso, el que ha puesto de acuerdo a los partidos políticos para tramitar reformas como la bancaria, congelada desde este martes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.