_
_
_
_

Los islamistas de Túnez quieren impregnar de religión la Constitución

En Nahda se enfrenta a los laicos sobre el peso de la 'sharia' en la Carta Magna y el sistema políticio

Tres meses después de que iniciara sus trabajos afloran las grandes divergencias en la Asamblea Constituyente de Túnez entre laicos e islamistas de En Nahda que también se pelean en las calles.

Hasta ahora había consenso entre ellos sobre los derechos sociales básicos o la independencia del Tribunal de Cuentas, pero el papel de la religión en la Carta Magna les ha enfrentado resquebrajando, acaso solo por unos días, la coalición gubernamental que reagrupa a islamistas, nacionalistas árabes del Congreso para la República y a los socialistas de Ettakatol.

Más información
Los islamistas dominan el primer Gobierno democrático de Túnez
Todo sobre Túnez

De todos los países árabes Túnez era hasta ahora, con la excepción de Líbano que cuenta con una poderosa minoría cristiana, el más laico.

“Túnez es un Estado libre, independiente y soberano: su religión es el Islam, su lengua el árabe y su régimen republicano”, estipulaba el primer artículo de la Constitución aprobada tras el acceso a la independencia y parcialmente derogada tras la revolución de 2011.

Para los laicos “la fórmula actual es suficiente”, repite Mouldi Riahi, portavoz del grupo socialista en la Asamblea. “Garantiza la referencia arabo-musulmana del país, pero evita fomentar disensiones inútiles”, añade.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Los islamistas, que disponen en la Asamblea de una mayoría relativa —89 de los 217 escaños—, dieron también, en un principio, la impresión de conformarse con esa breve mención.

“La religión estará ausente de la nueva Constitución tunecina”, declaró a principios de noviembre, tras ganar las elecciones, Rachid Ghanouchi, líder histórico de En Nahda. “Estamos todos de acuerdo en conservar el primer artículo de la actual Ley fundamental (...)”, añadió.

Los islamistas están de acuerdo en conservar ese artículo pero quieren añadir unos cuantos más. “La nueva Constitución debe estar fundamentada en los principios del Islam”, declaró Sahbi Atig, jefe del grupo parlamentario islamista, la semana pasada durante un debate en el hemiciclo

“Todos aquellos que quieren separar la política del islam atacan los fundamentos del pensamiento islámico”, añadió Atig. “El islam es un elemento esencial de la personalidad del tunecino”. “La Constitución debe reforzar esta identidad islámica”, concluyó.

“Tras meses de comedia, las máscaras caen”, escribe la web informativa tunecina Nawaat. “En Nahda desvela su verdadera esencia y se quita el traje de partido político civil, con una referencia islámica, para sacar adelante su proyecto teocrático”.

Las filtraciones publicadas en la prensa tunecina señalan que En Nahda quiere que en el preámbulo de la Constitución ya se subraye que la sharia (ley islmámica) sea la principal fuente del derecho, una idea que sería desarrollada en el artículo 10.

El artículo 126 redactado por el grupo islamista prevé además la creación de un consejo supremo islámico que emitiría fatúas (edictos islámicos) y se encargaría de velar porque nada en la legislación contradiga los preceptos del islam.

Al margen del papel de la religión laicos e islamistas se enfrentan, con menos vehemencia, sobre el sistema político que debe instaurarse: presidencialista o parlamentario.

Los laicos son proclives al presidencialismo mientras que los islamistas prefieren el parlamentarismo. Alegan que un jefe de Estado fuerte recuerda a los tiempos de la dictadura, pero sobre todo temen que el presidente elegido por sufragio universal, con un sistema a la francesa de dos vueltas, no sea uno de los suyos.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_