Un fuerte terremoto sacude al sudeste de Turquía
El seísmo, de magnitud 7,3, se ceba con la localidad de Van.- El Gobierno turco cifra en al menos 264 las víctimas mortales
“Hay muchos muertos, varios edificios se han derrumbado. Hay mucha destrucción”, fueron las primeras palabras del alcalde de la ciudad de Ercis a la televisión turca tras el terremoto que el domingo a mediodía sacudió el sudeste de Turquía. La ciudad, situada a pocos kilómetros del epicentro fue una de las más castigadas por el temblor de 7,2 en la escala de Ritcher. A medida que avanzan las horas, el número de víctimas aumenta. El último balance, ofrecido en rueda de prensa por el ministro del Interior del país, Idris Naim Sahin, cifra en al menos 264 los fallecidos y más de 1.300 los heridos. Una cifra que podría aumentar con las horas, ya que fuentes oficiales han informado a la agencia Reuters que cientos de personas continúan aún desaparecidas.
En una rueda de prensa, el ministro ha explicado que el total de víctimas han sido halladas en la provincia de Van. El centro de emergencias ha calculado en al menos 400 los desaparecidos entre los escombros que ha dejado el seísmo. Se han derrumbado cerca de 25 edificios, uno de ellos una residencia universitaria.
El epicentro del temblor se localiza en Tabanli, un pueblo a 30 kilómetros de Van, capital del la provincia y muy cercana a la frontera con Irán. Pero también se han visto afectadas las provincias de Bitlis, Batman, Diyarbakir, Mus y Hakkari, aunque en menor medida.
La tragedia se ceba con Van
En Van, donde viven casi medio millón de personas, se han derrumbado varios edificios, uno de ellos de siete plantas, según informa el diario Today's Zaman. En las primeras imágenes de televisión se podían ver calles destrozadas, edificios derrumbados y cientos de voluntarios utilizando las manos como palas para rescatar a las personas atrapadas entre los escombros. El agua y la electricidad no funciona y las líneas telefónicas están saturadas.
Según la Dirección General de Emergencias (AFAD), 500 profesionales ha acudido a la zona. La oficina del gobernador provincial ha informado de que dos aviones militares están en camino además de camiones con mantas, comida, tiendas de campaña y estufas. Israel, por su parte, ha ofrecido ayuda a Turquía, según informa el diario turco Hürriyet. Además se ha creado un comité de emergencia para evaluar los daños y coordinar las tareas de rescate desde Van.
Temblor muy cerca de la superficie
Según el centro Sismológico Kandili de la Universidad del Bósforo de Estambul, el “temblor se produjo muy cerca de la superficie”, a unos cinco kilómetros de profundidad, por lo que “en el epicentro se sintió como un seísmo de entre 8 a 9 de magnitud”. Tras el temblor inicial se han registrado varias réplicas de magnitudes entre 3 y 5,5, por lo que las autoridades han recomendado no volver a los edificios todavía, informa EFE.
La zona afectada por el temblor está regada de pequeños pueblos de difícil acceso y casas de adobe o madera donde los movimientos telúricos suelen causar importantes daños. Las autoridades todavía no han evaluado los daños en estas localidades, pero han pedido a la población que mantenga la “sangre fría”, ya que el pánico que ha provocado el terremoto ha hecho que las calles se colapsaran por los que tratan de huir de la zona y dificultando la llegada de las ambulancias.
Turquía es un país que descansa entre dos placas tectónicas. Los temblores son muy habituales, sin embargo, sus construcciones no están preparadas para resistirlos. En 1999 un temblor de 6,8 en la escala de Ritcher mató a más de 18.000 personas en el oeste de Turquía. En mayo de este año otro temblor en el noreste del país mató a dos personas y causó 79 heridos.
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