Explota un coche bomba de las FARC en el sur de Colombia
El Gobierno admite víctimas aunque no precisará datos hasta que no se identifiquen los restos
El ministro de Defensa de Colombia, Rodrigo Rivera, ha reconocido que hay una cifra "no precisada" de víctimas mortales por la explosión de un coche bomba activado por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) frente a la estación de policía de Vegalarga, en la zona del Huila, al sur del país.
"La gravedad de la explosión ha hecho que solamente queden restos humanos irreconocibles en la zona y por eso no podemos precisar aún el número de víctimas civiles de esta acción terrorista de las FARC", ha señalado el ministro Rivera. La explosión ha dejado ocho policías heridos, entre ellos "cuatro de suma gravedad" que fueron trasladados al hospital de Neiva.
RCN Radio ha indicado que, según las primeras investigaciones, un grupo de hombres, presuntos guerrilleros, abordaron el vehículo cuando circulaba por el centro de la población y, tras hacer bajar a los ocupantes, procedieron a instalar los explosivos. La misma cadena ha señalado que la detonación produjo, además, daños materiales en viviendas y comercios de la localidad.
Rivera ha señalado que el Gobierno colombiano "hace responsable única y exclusivamente" a las FARC y a sus comandantes por este acto de cobardía. Para el ministro, el acto terrorista "viola todas las normas del Derecho Internacional", al condenar que, para llevarlo a cabo, se ha utilizado un vehículo de transporte público.
Por otro lado, la secretaria de Gobierno de Neiva, Constanza Sastoque, ha confirmado a radios locales que un civil ha muerto y al parecer era el conductor del vehículo. Ha explicado que inicialmente se había informado de cuatro muertos, tres de ellos policías, y 16 heridos, pero que todo se debió al caos generado tras la explosión.
Hace dos semanas, una información publicada por la Agencia de Noticias Nueva Colombia (Anncol), afín a las FARC, advirtió que ese grupo presagiaba "un fin de año intenso" en el que los rebeldes "se alistan para golpear con contundencia a las Fuerzas Militares".
El presidente Colombiano, Juan Manuel Santos, reveló la semana pasada que, según una información de inteligencia, las FARC estarían preparando ataques para este fin de año para vengar la muerte del Mono Jojoy, alias Víctor Julio Suárez, jefe militar de la guerrilla , muerto en un bombardeo a su campamento en septiembre.
La semana pasada diferentes acciones de las FARC se cobraron la vida de al menos 20 policías y militares, por lo que analistas consideran que los rebeldes han vuelto a la estrategia de la "guerra de guerrillas" de antaño.
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