Irán celebra el quinto juicio contra los presuntos responsables de los disturbios poselectorales

Irán celebró este lunes una nueva sesión del macro juicio contra los supuestos responsables de los disturbios que siguieron a las elecciones del pasado junio, un proceso que la oposición ha calificado de "farsa". En esta ocasión fueron seis los acusados, aunque los medios de comunicación oficiales (los únicos presentes en la sala) sólo revelaron la identidad de Abdolá Momení, un líder estudiantil. La principal imputación contra ellos fue "difundir informaciones falsas a través de Internet para provocar disturbios", según la televisión estatal.

"No considero que mis actividades políticas sean defendibles. Pido disculpas a los iraníes y solicito la compasión islámica del tribunal", manifestó Momení, según la agencia de noticias Irna, tras haberse declarado culpable. El líder reformista estudiantil admitió que las elecciones del 12 de junio fueron una excusa para dañar los pilares del sistema clerical gobernante, promover la idea de fraude y animar a la gente a echarse a la calle contra el Gobierno.

La de hoy es la quinta sesión del juicio que se inició el 1 de agosto y por el que han pasado cerca de 150 personas entre manifestantes, responsables reformistas, empleados de las embajadas británica y francesa, e incluso una profesora de esta última nacionalidad. Se trata además de la primera vista tras el relevo al frente del poder judicial, el 17 de agosto. El nuevo responsable, Sadegh Lariyaní, se había mostrado crítico con la difusión televisada de las deposiciones de los encausados.

Significativamente este lunes, el juez pidió a los medios de comunicación que no difundieran los nombres de los acusados. No obstante, el telediario de las 20.30 mostró imágenes de la vista igual que ocurriera cuando subieron al estrado destacados reformistas en las sesiones anteriores. Para más inri, la televisión estatal repitió esos vídeos durante las veladas de los primeros días de Ramadán, cuando en el resto de los países musulmanes se estrenan entretenidas telenovelas para todos los públicos.

Las irregularidades del proceso han sido tan criticadas que hoy la sola presencia de los abogados defensores constituía una noticia. "Lo que es importante es que hoy los abogados han podido defender a sus clientes libremente", subrayaba seyed Ali Asghar Hoseiní, uno de los defensores, citado por la agencia Fars. Hoseiní, que dijo haber sido elegido por su cliente a quien de acuerdo con la petición del juez no identificó, se deshizo en alabanzas hacia el tribunal y aseguró que había contado con todo tipo de facilidades para preparar su defensa. Asimismo precisó que se le había concedido la libertad bajo fianza a su defendido.

También bajo fianza se encuentra desde el sábado Ali Reza Beheshtí, un destacado intelectual y estrecho colaborador de Musaví detenido el pasado martes. Su salida de la cárcel no se conoció hasta el domingo cuando acudió a visitarle a su domicilio Hasan Jomeiní, uno de los nietos del fundador de la República Islámica. Ese gesto parece confirmar que su liberación ha sido fruto de la enorme presión de destacadas figuras políticas y religiosas, un nuevo signo de la profunda división del régimen ante la crisis. Behesthtí es hijo de uno de los ayatolás que trabajaron con Jomeiní y fue asesinado en un atentado en 1981. Su detención se interpretó como un mensaje de hasta dónde está dispuesto a llegar el Gobierno para silenciar a la oposición.