_
_
_
_
_

Homenaje en Notre Dame a los pasajeros del vuelo 447 desaparecido en el Atlántico

El presidente Nicolas Sarkozy encabeza un servicio ecunémico organizado para las familias de los ocupantes del fatídico Airbus 330 de Air France

La catedral de Notre Dame de París ha sido el escenario este miércoles de una ceremonia religiosa organizada para las familias de las víctimas del Airbus 330 de Air France que se precipitó al Atlántico el pasado domingo con 228 personas a bordo. El presidente francés, Nicolas Sarkozy, encabezó junto con su esposa, Carla Bruni, la fila de personalidades del mundo político que han asistido al servicio ecuménico organizado por la aerolínea, tras confirmarse este miércoles que restos hallados flotando cerca de la zona desde donde se recibió por última vez información de la aeronave son efectivamente del fatídico vuelo AF-447.

También han participado compañeros pilotos y tripulantes de la aerolínea en el acto celebrado en la catedral de Notre Dame, en el centro de París.

Más información
La desesperada búsqueda de la 'caja negra'
Francia reconoce que será muy difícil encontrar la caja negra del avión
Incógnitas del accidente
Brasil no descarta la hipótesis del atentado en el avión de Air France

El recuerdo a los desaparecidos, en una celebración interconfesional, comenzó con un mensaje del papa Benedicto XVI, quien expresó sus condolencias por lo sucedido y antes de que el cardenal de París, André Vingt-Trois, evocara al escritor y aviador Antoine de Saint-Éxupery, desaparecido también cuando volaba sobre el mar. La ceremonia se desarrolló en francés, portugués y latín.

Un total de 228 velas fueron encendidas en el acto, en recuerdo de los desaparecidos, la mayor parte de ellos franceses, brasileños y alemanes y de hasta un total de más de treinta nacionalidades, entre ellos dos españoles.

Se trata de la primera ocasión en la que se manifiesta el duelo del país por la desaparición del pasaje y la tripulación que, en un suceso cuyas circunstancias aún no están aclaradas, viajaban a bordo del vuelo AF-447 entre Río de Janeiro y París.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Organizada a iniciativa de Air France, el coro de la aerolínea interpretó los extractos de los Requiem de Duruflé y Verdi, el Da nobis pacem de Mendelssohn y una coral de Bach. Pilotos de Air France vestidos de uniforme leyeron un fragmento del Libro de las Lamentaciones de Jeremías y un emotivo poema del brasileño Ademar de Barros titulado Pasos en la arena.

El Elíseo y los edificios oficiales tenían este miércoles la bandera a media asta y el presidente Sarkozy recibirá a las familias en los próximos días, probablemente el lunes 9 de junio. Mientras, el jefe de la diplomacia francesa, Bernard Kouchner, viajará a Brasil para representar al Gobierno galo en las ceremonias de homenaje de las víctimas brasileñas del Airbus 330.

Poco antes, a las 14.00 horas, la Gran Mezquita de París organizó una oración llamada del ausente para rendir honores a quienes perdieron su vida en el accidente, y está prevista una ceremonia similar en la sinagoga de París a las 19.30 horas. El arzobispo de París anunció, por otra parte, que se celebrará una misa internacional el domingo 7 de junio.

Francia recordó hoy, en una ceremonia celebrada en la catedral de Notre Dame de París, a las 228 personas que viajaban en el vuelo de Air France, en una celebración de carácter interconfesional.El presidente francés, Nicolas Sarkozy, acompañado de su esposa, Carla Bruni, miembros del Gobierno, compañeros de la tripulación de la aerolínea y familiares de los pasajeros participaron, entre otros, en el acto.Un total de 228 velas fueron encendidas en el acto, en recuerdo de los desaparecidos, la mayor parte de ellos franceses, brasileños y alemanes y de hasta un total de más de treinta nacionalidades, entre ellos dos españoles.Vídeo: AGENCIA ATLAS

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_