Las FARC rechazan recibir a una misión médica para tratar a rehenes enfermos
La guerrilla insiste en que el único camino para el intercambio humanitario es la desmilitarización de dos municipios
La rabia y la desilusión de los familiares de los rehenes canjeables en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) es grande: esta guerrilla, nacida hace más de 40 años como una autodefensa campesina, ha rechazado recibir a la misión médica que propuso Uribe en las cárceles de la selva donde están los secuestrados.
"Para nuestra organización, prima la seguridad de los secuestrados canjeables sobre las condiciones carentes de realismo como las que pretende el presidente [de Colombia] Álvaro Uribe". Así respondió Raúl Reyes, portavoz guerrillero, a un cuestionario enviado por el noticiero de televisión Noticias Uno.
La idea de una misión médica, lanzada por el presidente Uribe días después de conocerse las dramáticas condiciones de salud en las que viven ocho de los 43 canjeables, había recibido el aplauso unánime.
José Luis, un joven universitario hijo del coronel Luis Mendieta, secuestrado hace más de nueve años, expresó su angustia con palabras prestadas de la carta enviada por su padre a través de la recién liberada Consuelo González: "No entiendo la irracionalidad de todo esto". El coronel está muy enfermo; sus piernas, tras soportar las largas caminatas a través de la selva en los seis primeros años de secuestro, han perdido toda la fuerza. "No se respeta la dignidad del ser humano", dijo el joven a EL PAÍS. Su preocupación es inmensa, explica, porque en las cartas de su padre percibe a un ser distinto al que conoció: "Ronda la desilusión en todas sus palabras".
En la entrevista, realizada vía Internet, Raúl Reyes, uno de los siete integrantes del secretariado de las FARC, insiste: el único camino para el intercambio humanitario es la desmilitarización de dos municipios. Y, con un optimismo desbordado, asegura que la reciente libertad de las dos rehenes canjeables Clara Rojas y Consuelo González "fortalece el ambiente político" para la desmilitarización de los municipios cercanos a Cali, la tercera ciudad del país.
Reyes niega, además, que la Iglesia, autorizada por Uribe para mediar en el intercambio humanitario, haya entrado en contacto con la guerrilla. "Alguien pretende generar falsas expectativas", aseguró. Este fin de semana el presidente Uribe, antes de viajar a Europa, activó de nuevo la mediación de los llamados países amigos (Francia, España y Suiza) para que ayuden a la Iglesia en las labores de mediación. Con todo, algunos familiares abrigan la esperanza de que de nuevo las gestiones de Chávez logren abrir la puerta a la misión médica.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.