Las autoridades de Pensilvania temen que un tren descarrilado cargado de etanol pueda explotar

Varios vagones de un tren que descarriló el viernes por la noche en el suroeste del Estado de Pensilvania (Estados Unidos) continúan en llamas y se teme que se produzca una explosión. El incidente no ha causado víctimas, pero las autoridades de New Brighton, en el condado de Beaver, creen posible una explosión ya que el tren iba cargado con etanol, un combustible de origen vegetal.

El tren, de 80 vagones de Norfolk Southern Railroad transportaba etanol, una sustancia altamente combustible, y las autoridades temen el riesgo de explosión, según ha explicado Terry Erickson, funcionario de la Agencia de Emergencias del condado de Beaver.

La policía asegura que no ha habido ninguna filtración, algo que preocupaba a los vecinos de la zona, ya que el tren descarriló sobre el río Beaver. Aún así, los usuarios de agua río abajo han recibido notificación del accidente como medida de precaución, ha dicho Betsy Mallison, portavoz del Departamento de Protección Ambiental del estado.

"Hay más peligro de una explosión que de una situación de derrame tóxico", ha dicho Erickson en este sentido. Al menos ocho de los 24 vagones del tren están en llamas, aunque las autoridades no temen que el fuego afecte a las casas o negocios de las inmediaciones.

El tren descarriló al cruzar un puente sobre el río Beaver, y se desconocen por el momento los motivos del hecho. Al menos 50 personas tuvieron que ser evacuadas y la policía no prevé que puedan regresar a sus domicilios hasta esta noche.