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Ejecutado el 'asesino del ferrocarril' en el Estado de Tejas

Tennessee aplica la pena capital al segundo preso desde 1960

Las autoridades del Estado de Tejas han ejecutado la pasada madrugada con una inyección letal al mexicano Ángel Maturino Reséndiz, condenado por el asesinato de una doctora cometido hace casi ocho años. Por su parte, el Estado de Tennessee ha ejecutado a su segundo preso desde 1960. Se trata de Sedley Alley, condenado a la pena capital por el asesinato en 1985 de la marine de 19 años Suzanne Collin.

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Maturino Reséndiz, de 46 años y apodado el Asesino del ferrocarril, recibió una inyección letal una hora después de que el Tribunal Supremo de EE UU rechazara los recursos presentados a última hora en su favor. "La ejecución ha tenido lugar", ha señalado una portavoz del Departamento de Justicia Criminal de Tejas. En su declaración final, Maturino Reséndiz pidió perdón a los familiares de sus víctimas, según ha informado una portavoz del penal de Huntsville. El condenado murió cinco minutos después de que se le aplicara una inyección letal, informaron fuentes judiciales.

Además del asesinato de la doctora Claudia Benton, de 39 años, a quien violó antes de matar a golpes, las autoridades atribuyeron a Maturino Reséndiz más de una decena de homicidios en varios estados del país entre 1998 y 1999. La mayoría de esos crímenes fueron perpetrados en las proximidades de vías férreas y estaciones de trenes, lo que le valió el apodo del Asesino del ferrocarril. Ésta es la decimotercera ejecución este año en Texas, el Estado que aplica con mayor rigor la pena de muerte en los Estados Unidos.

Más de diez homicidios

La aplicación del castigo se llevó a cabo pese a que los abogados del reo habían dicho que el condenado estaba loco y aseguraba que resucitaría tres días después de morir. Además, no tenía conciencia de lo que le esperaba y era incapaz de establecer una relación entre los crímenes que había cometido y el castigo, según han manifestado psiquiatras presentados por la defensa durante el juicio. "No ejecutamos a gente mentalmente desequilibrada; no ejecutamos a gente que no sabe que se le va a ejecutar", ha manifestado el abogado Jack Zimmermann. Además, el Consulado General de México en Houston había presentado una apelación ante el Tribunal Supremo en la que también se ponía en tela de juicio el carácter constitucional de la inyección letal, por considerarlo cruel y desusado.

Por su parte, Sedley Alley, condenado a la pena capital por el asesinato en 1985 de la marine de 19 años Suzanne Collin, ha sido ejecutado en la prisión de máxima seguridad de Riverband, al oeste de Nashville, en la segunda pena capital llevada a cabo en el Estado de Tennessee desde 1960. Según el diario digital Tennessean.com, la portavoz del centro penitenciario Dorinda Carter ha indicado que el recluso murió a las 9.12 del miércoles hora de Madrid. A pesar de que un juez había otorgado un aplazamiento de última hora, el tribunal local de apelaciones lo ha levantado.

La última instancia judicial para el reo ha desestimado así los intentos de los abogados defensores de evitar la pena capital para el recluso, que había reconocido inicialmente, -aunque en 2004 se desdijo-, el asesinato de la joven cuando practicaba deporte en los alrededores de la base de la Armada en Memphis.

Miembros del Movimiento por la Abolición de la pena de muerte en Tejas antes de la ejecución de Ángel Maturino Reséndiz.
Miembros del Movimiento por la Abolición de la pena de muerte en Tejas antes de la ejecución de Ángel Maturino Reséndiz.AP

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