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El Gobierno danés rechaza pedir disculpas por las viñetas de Mahoma

Irán pide una reunión de la Conferencia Islámica para tratar el "ataque al mundo musulmán"

El primer ministro danés, Anders Fogh Rasmussen, ha rechazado hoy pedir disculpas en nombre de su Gobierno por la publicación de caricaturas de Mahoma en el diario Jyllands-Posten el pasado 30 de septiembre. Los países musulmanes habían exigido disculpas oficiales a los Gobiernos europeos cuyos medios habían reproducido las viñetas para poner fin a las protestas que desde hace días se suceden en el mundo islámico, que considera una ofensa reproducir a su profeta al prohibirlo expresamente el Islam.

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Rasmussen no ha querido dar su brazo a torcer y ha transmitido a los embajadores extranjeros en Dinamarca la postura de su país en la crisis por las caricaturas de Mahoma, al tiempo que les ha pedido colaboración para rebajar la tensión. El jefe del Ejectivo danés ha insistido en su defensa de la libertad de expresión, así como de la tolerancia y el respeto por todas las religiones. "El Gobierno no controla a los medios de comunicación, son libres, por eso no puede pedir perdón en su nombre. Tengo que recalcar que el Gobierno danés ha hecho las declaraciones que podía hacer, ahora buscamos una solución por vías diplomáticas", ha afirmado Rasmussen tras la reunión celebrada en el Ministerio de Exteriores.

En la cita a puerta cerrada, el jefe de Gobierno danés, acompañado por su ministro de Exteriores, ha explicado a los embajadores de los 71 países con representación diplomática en Dinamarca los pasos que había dado el Ejecutivo. Semanas después de la publicación de las caricaturas, embajadores de once países islámicos solicitaron una entrevista con Rasmussen y le pidieron que actuara, pero éste se negó a recibirlos apelando a la libertad de expresión, en un gesto muy criticado por la comunidad musulmana y parte de la clase política danesa.

Según el texto facilitado por la oficina del primer ministro, Rasmussen ha recordado en su discurso a los embajadores que el Gobierno "no puede interferir en la labor de los medios ni adoptar medidas legales contra ellos", a la vez que ha condenado "cualquier expresión que demonice a grupos de personas por su religión o raza". Rasmussen ha vuelto a resaltar la importancia de la libertad de prensa en Dinamarca y la tradición de la sátira, aunque ha lamentado que millones de musulmanes pudieran haberse ofendido y ha confesado que él "personalmente" nunca haría caricaturas de ninguna figura religiosa. Al término de la reunión, los once embajadores islámicos mantuvieron otra por separado para analizar la situación.

Intransigencia de Irán

En el otro lado de la polémica, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Manucher Mottaki, ha pedido la celebración de una reunión extraordinaria de los 56 países miembros de la Conferencia Islámica para tratar "el ataque organizado contra el mundo musulmán". Mientras, se siguen repitiendo las protestas por los dibujos de Mahoma. Un grupo de exaltados ha irrumpido hoy en la embajada de Dinamarca en Yakarta y ha quemado una bandera. Además, un artefacto explosivo ha sido lanzado contra el Centro Cultural francés en Gaza.

Según ha informado hoy el Ministerio iraní de Asuntos Exteriores a través de un comunicado, Mottaki ha planteado su petición en una conversación telefónica con Akmaleddin Ihsan Oglu, secretario general de la Conferencia Islámica, que agrupa a 56 países. El ministro iraní ha señalado que el "insulto" de medios de comunicación en algunos países europeos contra el profeta del Islam requiere de una reacción de la Conferencia Islámica contra esas naciones.

Por su parte, Oglu ha dicho que los países islámicos no tolerarán esos insultos y se ha felicitado por la propuesta del responsable iraní, que ha manifestado que sería discutida en breve con los Estados miembros de la organización, según la agencia oficial IRNA.

El presidente de Irán, Akbar Hashemi Rafsanjani, protesta contra las caricaturas hoy durante la oración del viernes.
El presidente de Irán, Akbar Hashemi Rafsanjani, protesta contra las caricaturas hoy durante la oración del viernes.EFE

Una bomba en el turbante

Varios países musulmanes han protestado en las últimas fechas por los dibujos del profeta Mahoma, cuya representación está prohibida en el Islám. Las doce caricaturas publicadas por Jyllands-Posten fueron reproducidas por el noruego Magazinet el pasado día diez de enero.

En uno de los dibujos aparece Mahoma vistiendo un turbante con forma de bomba con una mecha encendida. Una vez desatada la polémica, varios medios europeos han decidido hacer públicas las imágenes asegurando que las creencias religiosas no deben interponerse en la libertad de expresión.

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