Puerta abierta al diálogo con el ELN colombiano

"Hay decisión del Gobierno colombiano] de abrir una mesa de exploración con el ELN Ejército de Liberación Nacional] y, a la vez, el Coce Comando Central Eleno] está decidido a hablar con un Gobierno con el que se había negado a hacerlo". Éste es el resumen de León Valencia, que hasta 1994 perteneció al ELN y fue miembro de su comando central; hoy es analista y escritor. Valencia destaca la importancia del anuncio efectuado por esta guerrilla, que creció bajo la sombra de la revolución cubana y fue dirigida durante años por el cura español Manuel Pérez, de iniciar un contacto directo con el actual Gobierno de Álvaro Uribe.

El primer paso será una reunión entre el alto comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, y Francisco Galán, comandante eleno que salió de la prisión —cumple condena por rebelión— con un permiso especial para analizar los caminos hacia un posible diálogo.

En la Casa de Paz, como se llama al lugar itinerante donde Galán pasa los tres meses de licencia carcelaria, el guerrillero, de larga barba y apariencia y modales de cura, anunció el lunes pasado la autorización que le dieron sus jefes para reunirse con el comisionado e iniciar la "construcción de borradores de lo que podría ser un esquema de procedimientos y contenidos para un encuentro exploratorio formal entre el Coce y el Gobierno" .

Para algunos analistas, este comunicado no es muy esperanzador, ya que muestra un lenguaje poco comprometido, el que siempre ha utilizado esta guerrilla cuando habla de posibilidades de paz. La historia de encuentros fallidos en pasado Gobiernos es larga.

Aunque no se atreve a ser del todo optimista, Valencia cree que hay motivos para mirar con esperanza la posibilidad de un encuentro entre Antonio García, jefe militar eleno y uno de los cinco miembros del Coce, y el Alto Comisionado para la Paz.

Aunque el Gobierno no ha respondido, se da por sentado que la primera reunión se celebrará antes del l2 de diciembre —día en que vence el permiso de Galán— en San Cristóbal, zona rural de la ciudad de Medellín, donde funciona hoy la Casa de Paz . El comisionado y el guerrillero definirán la fecha y el lugar, en el exterior, donde se realizaría el encuentro. Siempre se ha visto a García como representante de la línea dura del ELN, pero al mismo tiempo como el personaje al que hay que convencer para que su organización deje el camino de las armas.

Está claro que Uribe, empeñado en presentarse a la reelección, ha cedido como nunca se había hecho antes en materia de paz. Esta semana también anunció una comisión internacional para buscar un acuerdo humanitario que defina la situación de 59 secuestrados canjeables en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colomia (FARC); algunos llevan más de siete años en cárceles en medio de la selva.

Según Valencia, tres factores impulsan esta flexibilidad del Gobierno: "El presidente se ha dado cuenta de que el proceso con los paramilitares no es fácil, que la derrota militar de la guerrilla no cuaja y que las encuestas cada vez son más favorables al diálogo y al acuerdo humanitario".

Para el ex guerrillero, la posibilidad de que un diálogo con el ELN se ventile en plena campaña electoral, con Álvaro Uribe como presidente y a la vez candidato, tiene algo positivo: "Si todos los candidatos se comprometen a apoyar esta negociación y se genera un consenso nacional, el tema se desuribiza".