Los buceadores franceses localizan una de las cajas negras del avión siniestrado en Egipto
El Gobierno francés trata de atajar la polémica sobre la seguridad de los aparatos de Flash Airlines
Los buceadores franceses han conseguido localizar una de las dos cajas negras del avión de Flash Airlines que cayó el sábado pasado al mar Rojo con 148 ocupantes, en su mayoría franceses que habían celebrado el Año Nuevo en Egipto. Según fuentes francesas, el grupo de buceadores ha empleado un sofisticado sistema de sónar y han detectado las señales de una de las dos cajas negras del aparato, cuya recuperación es imprescindible para aclarar las causas del siniestro.
La agencia egipcia de noticias, Mena, ha confirmado la noticia y ha subrayado que se ha podido localizar con exactitud el lugar donde yace el fuselaje del Boeing 737 que se precipitó al mar en el estrecho de Tiran, en la península del Sinaí. De acuerdo con fuentes próximas a los equipos de rescate, los restos del aparato se hallan a unos 400 metros de profundidad en la zona del Golfo de Nema, a unos 12 kilómetros del balneario de Sharm el Sheij.
Francia envió a la zona un robot submarino equipado con una cámara y un brazo mecánico para recoger objetos pequeños, así como un avión de patrulla con radares, una fragata con un sistema de sonar y un grupo de submarinistas para participar en las tareas de rescate. El avión de Flash Airlines desapareció de las pantallas del radar y cayó al mar Rojo unos tres minutos después de su despegue, alrededor de las 4.00 hora peninsular española del sábado, del aeropuerto de Sharm el Sheij con rumbo a París, vía El Cairo.
Por una directiva europea
Las autoridades egipcias y francesas han excluido hasta el momento la hipótesis de un acto de sabotaje, pero esperan recuperar las cajas negras para esclarecer las causas de la tragedia. Pero la tesis del accidente ha puesto en el ojo de la tormenta a Flash Airlines pero también a las autoridades francesas de Aviación Civil. En un intento de atajar las críticas, el Gobierno francés ha defendido esta mañana su actuación en el control de los aviones de esta compañía egipcia de vuelos charter. Sin embargo, es un hecho que las autoridades francesas de Aviación Civil esperaron un año para controlar los dos Boeing de la compañía egipcia después de que Suiza decidiera en octubre de 2002 prohibirle su espacio aéreo a causa de "graves" disfunciones, incluido el mantenimiento de los mandos y motores, que fueron detectadas en inspecciones por sorpresa.
En este sentido, el secretario francés de Transportes, Dominique Bussereau, ha insistido hoy en que las tres inspecciones efectuadas en Francia en octubre y noviembre de 2003 fueron "tan detallados" como los realizados por Suiza, al tiempo que ha subrayado que el personal galo tiene la "misma capacidad y nivel técnico" que sus colegas helvéticos. Pero hoy se han conocido que también Polonia prohibió su espacio a Flash Airlines durante un tiempo, lo que asesta otro golpe a la defensa, por parte de los directivos de la compañía aérea, de la seguridad de sus operaciones.
En el resto de Europa, la tragedia de Sharm el Sheij ha relanzado las presiones para la adopción de una directiva europea, preparada en 1997, que permitiría prohibir el espacio aéreo europeo a aviones deficientes de terceros países. La propuesta de la Comisión Europea, que desde entonces duerme en los cajones del olvido debido en parte a desacuerdos entre el Parlamento europeo y los ministros, permitiría establecer una lista negra de aviones defectuosos, como ya existe para los "barcos basura". Francia "siempre ha estado de acuerdo en que esta directiva fuera adoptada", ha indicado Bussereau, que achaca que el retraso a "un pequeño problema entre España y Gran Bretaña en torno a Gibraltar", y ha expresado su esperanza de que sea adoptada "la próxima primavera".
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