El presidente de Ruanda renueva su mandato tras las primeras elecciones desde el genocidio

El presidente saliente de Ruanda, el tutsi Paul Kagame, ha anunciado ante sus partidarios reunidos en un estadio de Kigali que ha ganado las elecciones presidenciales del lunes, los comicios más importantes que se celebran en el país desde el genocidio que mató a unas 800.000 personas en 1994.

"Les agradezco esta victoria", ha declarado Kagame ante miles de seguidores. El presidente saliente cuenta con el 95,05% de los votos tras el recuento de los 106 distritos del país. Cuando se había escrutado el 51% de los votos, el principal candidato de la oposición, Faustin Twagiramunyu, había logrado el 3,5% y un candidato independiente, el 1,19%, según ha dicho por la radio nacional el presidente de la comisión electoral, Chryslogue Karangwa.

Faustin Twagiramungu ha rechazado "categóricamente" los resultados que dan una victoria aplastante a Kagame y ha pedido la celebración de nuevos comicios, según informaron fuentes de su entorno.

Los colegios electorales ruandeses habían cerrado sus puertas a las 15.00 horas de ayer sin que se registrara ningún incidente, según las autoridades locales y observadores internacionales. Unos cuatro millones de ruandeses estaban llamados a las urnas para elegir presidente por primera vez en unas elecciones multipartitas desde que el país logró la independencia en 1962.

Las largas colas formadas ante los centros de votación desde las 6.00 horas reflejaban el interés que ha despertado el acontecimiento entre la población de este pequeño país centroafricano, marcado por el genocidio de 1994. "Esta elección supone un gran paso adelante para mi país", dijo Kagame tras depositar su voto. "El etnocentrismo se convertirá en algo del pasado", añadió.

Protestas de la oposición

El clima era de una cierta tensión entre los partidarios del actual presidente y la oposición. El candidato opositor y antiguo primer ministro, Faustin Twagiramungu, acusa al presidente de monopolizar el poder y denunció tras depositar su voto que se habían registrado casos de fraude electoral. Un portavoz de su partido aseguró que había militares desplegados en los colegios electorales "incluso en la sala de votación" y que obligaban a la gente a votar por Kagame.

El Frente Patriótico Ruandés de Paul Kagame, un tutsi de 45 años, llegó al poder en 1994, poniendo fin a la guerra civil que durante 100 días se cobró las vidas de 800.000 tutsis y hutus moderados a manos del régimen extremista hutu precedente. En la época de Kagame el país ha mejorado en muchos terrenos, como el económico y el de seguridad interna, aunque algunas ONG han denunciado un aumento de la presión política y de la prensa. Kagame era el claro favorito para ganar las elecciones, sobre todo después de que la única candidata mujer, Alivera Mukabaramba, se retirara el domingo pidiera el voto para Kagame, para evitar que Twangiramungu llegara al poder.

Twangiramungu es un hutu moderado de 58 años que escapó con vida del genocidio. Fue primer ministro durante un año tras la guerra civil, pero dimitió por diferencias con Kagame. Su partido fue disuelto recientemente y ha tenido que presentarse como independiente y sin respaldo financiero a las elecciones.