El Ejército de EE UU detiene a tres altos responsables iraquíes de la 'lista negra'

Las fuerzas de la coalición tienen bajo su custodia a tres ex responsables iraquíes que figuraban en la lista de los 55 hombres más buscados del antiguo régimen de Sadam Husein, según ha informado esta mañana el Comando Central estadounidense (Centcom) en un escueto comunicado.

Dos de los detenidos son Abd al Tawab Mullah Huwaysh, director de la Oficina de Industrialización Militar y antiguo viceprimer ministro -que ocupaba el número 16 de la baraja- y Taha Muhyi al Din Maruf, vicepresidente del país desde 1979 y miembro del Consejo de Mando de la Revolución, número 42 de la lista.

Además, Mizban Khadr Hadi, un alto mando del Consejo de la Revolución al que fue encargado el control militar de la zona central de Irak y el Eufrates antes de la guerra, también ha caído en manos estadounidenses. Khadr Hadi, que ocupaba el número 41, es poco conocido pero bajo su mano estuvo la defensa de Kerbala y Najaf durante la guerra.

Un total de 18 detenidos

El Centcom no aportado ningún detalle sobre dónde han sido detenidos o si se han entregado a las fuerzas aliadas. Con estas tres nuevas capturas, ascienden a 18 el número de dignatarios del antiguo régimen caídos. Entre los destacados figuran dos hermanastros de Sadam Husein, Barzan y Watban, el ex viceprimer ministro Tarek Aziz, los antiguos ministros de Comercio y Petróleo, Mohamed Mahdi Saleh y Amer Mohamed Rahsih, respectivamente y el ex asesor en la Presidencia iraquí, Amer Al Sadi.

Mientras tanto, la situación sigue siendo muy tensa en Faluga, donde esta semana han muerto 17 personas en las manifestaciones de rechazo a la invasión estadounidense. La población de esta conservadora ciudad suní ha exigido a las fuerzas de EE UU que abandonen de inmediato la localidad, al tiempo que acusan a los soldados de observar a sus mujeres con sus prismáticos de infrarrojos.

Los líderes locales, que han amenazado con derramar su sangre, han reconocido que quedan bolsas de resistencia armada. Sin embargo, los imanes de la ciudad, a unos 70 kilómetros al noroeste de Bagdad y de unos 40.000 habitantes, han pedido en la oración del viernes a los asistentes, muchos armados con metralletas y puñales, que mantengan la calma y no usen sus armas contra las tropas de EE UU. Según el jeque Yamal Shaker Al Nazal, los líderes religiosos y tribales mantienen negociaciones con las tropas.