Aznar dice que no puede exigir a las empresas españolas mantenerse en Argentina

El presidente del Gobierno, José María Aznar, ha dicho hoy que no puede pedir a las empresas españolas que mantengan sus inversiones en Suramérica más allá de sus posibilidades. En un desayuno sin micrófonos con periodistas en Washington, Aznar se refería así a las declaraciones del consejero delegado del banco Santander Central Hispano (SCH), Alfredo Sáenz, quien aseguró hace días que el Banco de Río de la Plata, filial argentina de la entidad española, sólo tiene liquidez para tres meses.

Las inversiones españolas en el continente americano no tienen un carácter especulativo, sino vocación de permanencia, ha añadido.

El presidente del Gobierno ha dicho sobre este asunto, horas después, en una nueva reunión con los periodistas españoles que cubren su viaje que "una cosa es la apuesta estratégica y otra los problemas puntuales".

En su opinión, la salida a la crisis argentina pasa por cumplir "lo antes posible" con los acuerdos establecidos con el Fondo Monetario Internacional. "No hay solución que esté fuera de los organismos internacionales", ha añadido.

Más tarde el presidente del Gobierno ha pronunciado una conferencia en la universidad John Hopkins, en la capital estadounidense. En su intervención, ante una nutrida representación de empresarios y políticos estadounidenses, Aznar ha dicho que si España ha invertido en Suramérica 50.000 millones de euros en los últimos cuatro años, no ha sido por "retórica". "España, en base a los lazos de cultura común, invierte en el futuro de Iberoamérica e invierte a largo plazo; no especula", ha asegurado.

Criticas del ministro Lavagna

Mientras, el ministro argentino de Economía, Roberto Lavagna, ha criticado a los inversores extranjeros y, en especial a los españoles, por haber defendido un esquema de política económica que ha fracasado en su país.

"En principio las empresas extranjeras ponían toda la responsabilidad en las autoridades argentinas. Ahora empiezan a comprender que la situación no es culpa de un Gobierno, o de un funcionario, sino que tiene que ver con el fracaso de un esquema de política económica que en muchos casos ellos mismos defendieron", ha indicado en una rueda de prensa con corresponsales extranjeros.

También arremetió contra el FMI. En su opinión, este organismo ha "cometido muchos errores en el manejo de la crisis". Por último, aludió a las declaraciones de Alfredo Sáenz referentes a la escasa liquidez de la filial argentina del SCH: "Cuando llamé al embajador español [Manuel Alabart] hice un comentario claramente negativo sobre la irresponsabilidad de un funcionario de un banco español".

Estas declaraciones se han producido un día después de los nuevos cambios anunciados en el Gabinete del presidente Eduardo Duhalde. El actual ministro de Trabajo, Alfredo Atanasof, será designado jefe de Gabinete, en lugar de Jorge Capitanich, la diputada Graciela Camaño ocupará la vacante en el área Laboral y el diputado Jorge Matzkin será el próximo ministro del Interior.

Por último, Duhalde ha designado a Abel Ernesto Parentini Posse, actual representante de Argentina ante la Unesco, nuevo embajador argentino en España.