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MÁXIMA TENSIÓN EN COLOMBIA

La guerrilla colombiana confirma la ruptura de las negociaciones de paz

Las FARC anuncian el abandono de la zona neutral y lamentan que "los intereses mezquinos de una minoría se hayan puesto por encima de los intereses de 40 millones de colombianos"

El proceso de paz iniciado en Colombia en 1999 se ha quebrado de forma irreversible. Tras la negativa del presidente Pastrana a las últimas exigencias de las FARC, la guerrilla ha oficializado la ruptura y ha anunciado el abandono de la zona neutral que ocupaba al sur del país.

La guerrilla más antigua y numerosa de toda América Latina ha respondido así al ultimátum del presidente Andrés Pastrana. Los portavoces guerrilleros han oficializado la ruptura del proceso reconciliador en un comunicado leído en San Vicente del Caguán, el principal de los cinco municipios de la zona neutral de 42.139 kilómetros cuadrados, que las FARC ocupan desde 1998.

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El anuncio guerrillero llega después de que el Ejecutivo de Pastrana rechazase ayer un paquete de propuestas de los rebeldes, que se resumían en 14 puntos, y buscaban impedir la entrada del Ejército a la zona.

El comunicado insurgente ha pedido al Gobierno que, conocida la decisión del gobernante, "a pesar de los esfuerzos realizados con la presencia del asesor especial del secretario general de la ONU, Kofi Annan, el estadounidense James Lemoyne, le proponemos al Presidente realizar la entrega formal de los cascos urbanos de los cinco municipios en un acto público, tal como los recibimos".

Los alzados en armas también dejan en manos de Pastrana la responsabilidad "por la vida y la seguridad de los habitantes de la zona" del enclave, quienes horas antes expresaron su temor por un eventual recrudecimiento del fuego en ese territorio y el posible ingreso de fuerzas paramilitares de la ultraderecha.

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La más antigua y numerosa guerrilla colombiana, con casi cuatro décadas de lucha y unos 20.000 hombres, ha dicho que se acoge al ultimátum dado por el presidente, de 48 horas, que concluye mañana, lunes, para abandonar los cascos urbanos de ese territorio.

"Intereses mezquinos de una minoría"

Según las FARC "una vez más los intereses mezquinos de una minoría privilegiada y rica se ponen por encima de los intereses de 40 millones de colombianos".

Por el momento, agrega el documento, "los guerreristas de siempre han terminado por imponerse para obstaculizar las posibilidades de paz con justicia social".

Y han advertido "al país y al mundo" su entera "disposición de seguir utilizando todas las formas de lucha por los cambios que necesita Colombia para lograr la reconciliación y la reconstrucción" nacional.

Compás de espera

Mientras, unos 13.000 hombres del Ejército colombiano, apoyados por infantes de la Marina y aviones de la Fuerza Aérea, se encuentran acuartelados y en estado de máxima alerta en guarniciones de la periferia del área neutral en los departamentos del Meta y Caquetá a la espera de que lleguen las 21.30 hora local del lunes (02.30 GMT del martes).

A esa hora los altos mandos esperan dar la orden para retomar los territorios del Meta y Caquetá, en los que han estado ausentes en los últimos 39 meses.

Tras conocer el comunicado en el que se oficializa la entrega de la zona de distensión (desmilitarizada), en Bogotá el presidente Pastrana, varios de sus ministros y el alto comisionado para la Paz, así como los mandos castrenses, se han reunido para analizar el documento.

Algunas fuentes oficiales han admitido que es posible que el gobernante se dirija en las próximas horas al país, por radio y televisión, como lo ha hecho en los últimos días.

El control militar de la zona neutral

Aparentemente, el documento entregado por los rebeldes y rechazado por Pastrana resolvía el problema que provocó la actual crisis: las garantías dentro de la zona desmilitarizada. Los guerrilleros, opuestos a los controles militares en los límites de la zona, planteaban la creación de una comisión mixta que verificaría las garantías.

La insistencia de las FARC de que se suspendieran esos controles militares provocó que el jueves Pastrana anunciara un ultimátum, que tuvo un paréntesis de dos días en los que ha medidado la ONU sin resultados.

Pastrana, durante su breve discurso a la nación.
Pastrana, durante su breve discurso a la nación.AFP
El delegado de la ONU James Lemoyne, durante el encuentro con representantes de las FARC.
El delegado de la ONU James Lemoyne, durante el encuentro con representantes de las FARC.AFP
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