Peres manifiesta ante la ONU un tibio apoyo a un futuro Estado palestino
La ANP exige al Gobierno israelí las fronteras anteriores al 4 de junio de 1967
El ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Simon Peres, ha dado hoy un tibio apoyo a la creación de un Estado palestino, pero ha exigido a cambio a la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que preside Yasir Arafat, que controle a sus grupos armados. Este discurso ante la ONU había despertado un gran interés, ya que es la primera vez en la historia que un ministro de un gobierno israelí respalda las pretensiones palestinas.
"Ayer apenas había apoyo a un Estado palestino. Y, aunque todavía no es una política formal del Gobierno de Israel, hay un respaldo a la independencia palestina, un apoyo a un Estado palestino", ha señalado Peres ante la Asamblea General de las Naciones Unidas.
En ese punto, el canciller israelí ha variado su discurso respecto a la versión escrita entregada a los periodistas, que indicaba que "la mejor apuesta para la paz es un Estado palestino independiente, no beligerante y económicamente exitoso viable".
Pero sí ha señalado que "la Autoridad Palestina, que es un Estado en ciernes, debe establecer la autoridad sobre todas sus fuerzas armadas y todo uso de armas."
Peres, que ha dedicado una parte mínima de su discurso al conflicto palestino-israelí para centrarse en la lucha antiterrorista, ha manifestado que "las democracias tienen que tener una institución no democrática para defenderse, porque los ejércitos no son democráticos, pero sin ellos la democracia no prevalecerá".
El control de las armas
El ministro de Exteriores ha ahondado en la cuestión al afirmar que "puede haber muchos puntos de vista en una democracia, pero sólo una autoridad que controle a los militares y a sus armas. Las armas deben estar subordinadas a un cuerpo político elegido. Pero si se tiene una autoridad política y varios grupos armados, no se tendrán democracia ni seguridad".
Precisamente en este momento, Peres pedía a la ANP el control de los grupos armados que operan en su territorio. "Ese control no por el bien de Israel, pero por el bien de la paz y de su propio destino, para que las balas no nieguen a los votos", ha señalado Peres.
Peres se ha referido después a la lucha antiterrorista de Estados Unidos, que es la "guerra de todos nosotros." El político laborista ha añadido que Osama Bin Laden, principal sospechoso de los atentados del 11 de septiembre pasado en EE UU, "vive en un mundo que no existe" cuando afirma que su lucha es contra los cruzados.
"Bin Laden dice que lucha por los palestinos, pero es un obstáculo para los palestinos", ha argumentado Peres, quien ha indicado que en la cumbre de Camp David en julio de 2000, Israel "ofreció prácticamente toda la tierra a los palestinos", en alusión a los territorios de Gaza y Cisjordania bajo ocupación israelí desde 1967.
Para Peres, "incluso si hay una diferencia de un 1 o un 2% [en los porcentajes de reparto de esos territorios], eso no justifica el asesinato de miles de hombres y mujeres en EE UU".
"Las diferencias políticas no justifican el asesinato de un sólo niño", ha recalcado el ministro de Israel, país cuyas tropas han matado a más de 800 palestinos, en su inmensa mayoría civiles, desde que en septiembre de 2000 estalló una revuelta popular para exigir el cumplimiento de la resolución de la ONU de 1947 que ofrecía a ese pueblo un Estado independiente.
La ANP, decepcionada por el discurso
Por su parte, desde Gaza el ministro palestino de Gobernación Local, Saeb Erekat, ha contestado a Peres que el Gobierno israelí tiene que reconocer un Estado palestino independiente en las fronteras anteriores al 4 de junio de 1967, con capital en Jerusalén Este y como el resultado de un acuerdo definitivo de paz.
El ministro Erekat ha añadido que "Peres tiene que declarar ante la Asamblea General de la ONU que Israel está comprometido con la aplicación inmediata de las resoluciones 242 y 338 (de ese organismo internacional) y con la retirada inmediata de su Ejército a las fronteras anteriores a la guerra de 1967".
En esa conflagración, Guerra de los Seis Días que comenzó el 5 de junio de 1967, Israel conquistó -entre otros territorios- Cisjordania, Gaza y Jerusalén Este, en cuya totalidad los palestinos aspiran a establecer su futuro Estado independiente.
La resolución 242 del Consejo de Seguridad de la ONU fue aprobada poco después de esa conflagración de 1967, y la 338 tras la llamada Guerra de Yom Kipur de 1973. En ambas, la ONU insta a Israel a retirarse de los territorios que conquistó en la guerra de 1967, y que ese país tiene derecho a contar con fronteras seguras y reconocidas.
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