El Ejército israelí ataca con helicópteros un puesto de policía palestino en Gaza
Mueren en una explosión seis miembros del brazo armado de Al Fatah
Un corresponsal de Reuters ha informado de que tres o cuatro misiles disparados desde helicópteros han impactado contra el cuartel.
Testigos presenciales han confirmado que dos helicópteros israelíes han lanzado, a primera hora de esta tarde, cinco cohetes contra una comisaria en las afueras de la ciudad de Gaza y contra una academia de policía que se encuentra en el mismo recinto.
Fuentes de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) han informado de que varios edificios han sido destruidos pero que no ha habido que lamentar víctimas porque habían sido evacuados hace ya varios meses, desde que Israel bombardeó ese lugar con cazabombarderos F-16 el pasado 23 de mayo.
Sin embargo, fuentes sanitarias han dicho que varias personas sufrieron crisis nerviosas como consecuencia del bombardeo israelí.
Un portavoz militar israelí ha confirmado el ataque y ha dicho que era la respuesta de Israel a un bombardeo con morteros dirigido la pasada madrugada, contra el asentamiento judío de Kfar Darom, también en la franja de Gaza, en el que resultó herida una niña de siete años.
Este es el segundo bombardeo israelí desde el aire contra dicha zona autónoma palestina desde mayo, después de que la semana pasada helicópteros destruyeran allí un fábrica clandestina de proyectiles de mortero.
Atentado contra Al Fatah
Entretanto, seis palestinos han muerto y otro ha resultado herido en una explosión que se ha producido esta madrugada en el campo de refugiados de Farah, al norte de Cisjordania. Todos ellos son activistas de las Brigadas Al Aqsa, el brazo armado de Al Fatah, el movimiento político del líder palestino, Yasir Arafat. Además, tres ejercían funciones en su aparato de seguridad.
"Una rápida, dura y dolorosa respuesta"
Fuentes de seguridad de Israel han añadido que los seis palestinos muertos estuvieron implicados en una serie de atentados antiisraelíes: un atentado en un autobús de Tel Aviv hace nueve meses y la colocación de una carga explosiva en la localidad de Másade, en los altos del Golán.
Por su parte, el comandante de Al Fatah en Cisjordania, Husein al Sheij, ha ignorado el desmentido y ha acusado esta mañana a Israel de haber matado a los seis miembros de esa organización, y ha amenazado con "una rápida, dura y dolorosa respuesta" para vengar la muerte de seis de seis palestinos.
Por otro lado, una niña de siete años, hija de colonos israelíes, ha resultado herida tras la explosión de dos obuses de mortero disparados por palestinos contra la implantación de Kfar Darom, situada al sur de Gaza.
Además, los dos obuses disparados han causado daños en dos casas. Cuatro obuses más han estallado en la colonia de Netzer Hazani, centro de la franja de Gaza, y han dañado un hangar pero no causaron víctimas.
Y la aviación israelí ha sobrevolado durante la madrugada la
antigua zona ocupada por Israel en el sur de Líbano hasta la ciudad portuaria de Tiro (a 80 kilómetros al sur de Beirut), donde han caído varios obuses de artillería israelíes.
El ataque se ha producido no lejos del controvertido sector de las granjas de Chebaa, sin causar heridos, según han indicado fuentes policiales israelí.
Recrudecimiento de la violencia
Estos ataques se producen después de un domingo marcado por los enfrentamientos que se han saldado con 20 palestinos y 15 policías israelíes heridos.
Este nuevo estallido de la violencia se ha producido tras la ceremonia de los ultraortodoxos judíos para colocar la primera piedra del Tercer Templo de Jerusalén en la Explanada de las Mezquitas.
En Jerusalén, tras los disturbios de la víspera en la explanada de las mezquita Al Aqsa y de Omar en la colina de Haram es-Sharif, el Monte del Templo para los judíos, la policía está desde esta mañana en estado de alerta máxima debido a informaciones sobre la posibilidad de ataques palestinos en la ciudad.
Artificieros policiales desactivaron anoche, después de varias horas de labor, un coche bomba introducido en el aparcamiento subterráneo de un edificio de apartamentos del asentamiento de Pisgat Zeev, situado en el norte del distrito de Jerusalén.
Parte de los explosivos en el coche estallaron ayer y causaron heridas leves a dos vecinos. La bomba, de gran poder, contenía bombonas de gas natural entre otros materiales.
