Calista Flockhart habla del aislamiento al que se sometió tras la fama de ‘Ally McBeal’: “Dejé de salir de mi casa”
La actriz se hizo mundialmente conocida gracias a su papel protagonista en la exitosa serie de los noventa. Ahora reconoce que el precio fue una excesiva persecución mediática que le causó problemas de salud mental: “Fue todo un reto”
Calista Flockhart (Illinois, Estados Unidos, 59 años) estaba trabajando en una obra de teatro en Nueva York cuando decidió presentarse a las audiciones de Ally McBeal. Voló a Los Ángeles en el mismo avión que Jane Krakowski, quien se acabaría convirtiendo en su compañera de reparto al obtener el papel de Elaine Vassal en la exitosa comedia de los noventa. Flockhart, que por entonces tenía 33 años, se hizo con el personaje protagonista, el de Ally McBeal, una joven abogada de 27 años que se une a un prestigioso bufete donde también trabaja su exnovio. “Siempre recuerdo que era una sala entera de gente con trajes y no había cámara, no había maquillaje... Parecía una audición de teatro. De repente me sentí como si estuviera en una obra de teatro”, ha reconocido sobre ese proceso de selección en Awards Chatter, el podcast de The Hollywood Reporter.
El anonimato del teatro poco tenía que ver con la arrolladora fama que le llegó entonces a Flockhart. “Me di cuenta de que esto era realmente genial, que la gente lo estaba viendo y hablando de ello, y luego la gente comenzó a debatir al respecto. Quiero decir, fue increíble. Ese es el objetivo, ¿verdad?”, se pregunta en la entrevista. Sin embargo, la actriz que recientemente ha dado vida a Lee Radziwill en la serie Feud: Capote vs. The Swans también reconoce que empezó a notar desagradables consecuencias en su vida personal asociadas a su creciente popularidad. Perdió el anonimato y la privacidad, y de repente tuvo que empezar a lidiar con la constante compañía de paparazis, según recuerda en el podcast. “A riesgo de sonar como si estuviera lloriqueando, los paparazis realmente me seguían a todas partes”, explica la intérprete. “Sinceramente, creo que nunca me he adaptado realmente a ellos”.
Flockhart relata que comenzó a asociar ver a los fotógrafos con la idea preconcebida de que luego se escribiría un artículo dañino sobre ella. Y toda esta situación, dice, afectó negativamente a su salud mental. “Decidí que lo único que podía hacer era quedarme adentro, así que dejé de salir de mi apartamento”, confiesa. “Dejé de salir de mi casa. Dejé de salir y me aislaron. No quiero ir tan lejos como para decir que estaba deprimida, pero fue difícil. Fue todo un reto”, continúa detallando.
Su interpretación como Ally McBeal le valió tres nominaciones al Emmy y cinco a los Globo de Oro, premio con el que se alzó en 1998. Que se montara en ese avión a Los Ángeles para hacer la audición sin duda marcó un antes y un después en su carrera, pero también le cambió completamente la vida, según cuenta. Según reconoce, al principio, cuando se enteró del proyecto, este no le interesaba. ¿Qué habría sido de su vida si no hubiera aceptado el papel? “Probablemente, me habría quedado en Nueva York haciendo mucho teatro, y con suerte habría formado una familia, y con suerte eventualmente habría encontrado un programa de televisión o una película o algo así”, se sincera. “Quiero decir, creo que habría seguido actuando”.
Probablemente, en ese caso nunca hubiera conocido a su actual marido, el actor Harrison Ford (Illinois, Estados Unidos, 81 años), con quien se dio el “sí, quiero” en 2010. Se conocieron en la gala de los Globos de Oro de 2002, donde el protagonista de las sagas de Indiana Jones o Star Wars fue galardonado con el premio Cecil B. DeMille por su trayectoria. Muchos medios cuestionaron entonces esa relación por la diferencia de edad que había entre ellos. “No me molesta. A veces, incluso digo: ‘Vaya, sigo olvidando que es 22 años mayor que yo’. No influye para nada en nuestra relación. Me gusta su aspecto a primera hora de la mañana. No es guapo, es más bien mono. Parece un niño pequeño”, declaró ella a Hello! Magazine en 2003.
También tiene un hijo, Liam, de 23 años, al que adoptó en 2001, cuando todavía trabajaba en la conocida comedia. “Siempre quise adoptar un niño y estoy encantada de haber sido bendecida con un hijo hermoso y saludable. Estoy feliz y asombrada”, anunció a través de un comunicado.
En lo personal ha mantenido todos estos años esa discreción que anheló desde que su nombre se hizo conocido mundialmente. Algo que también ha hecho en su faceta profesional. La serie Ally McBeal emitió su último capítulo en mayo de 2002. Y lo que está claro es que no reniega de ese éxito ni de ese pasado: en la última edición de los premios Emmy apareció con sus compañeros de reparto sobre el escenario bailando el tema de la cabecera. Eso sí, desde el fin de esa serie, los trabajos de Flockhart en la pantalla han sido mucho menos mediáticos. Aparte de su reciente trabajo en Feud, destacan sus papeles como Kitty Walker en Cinco hermanos (2006-2011), y como Cat Grant durante la primera temporada de Supergirl (2015-2016).
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