Los Agnelli amplían su imperio del lujo e invierten en Louboutin, los estiletos de la suela roja

Los Agnelli, los reyes no coronados de la república italiana y una de las familias más ricas y poderosas del país, continúan ampliando su imperio. Sus últimos frentes para extender las fronteras de sus negocios han sido la moda y el lujo. Este lunes informaron de que el clan, que ya posee Fiat, Ferrari y el equipo de fútbol la Juventus de Turín, entre otras compañías, ha adquirido también un 24% de las acciones del fabricante francés de zapatos Christian Louboutin, el diseñador de los icónicos estiletos de suela roja y uno de los nombres clave de la industria mundial del lujo.

La familia, a través de su principal conglomerado, Exor, invertirá más de 500 millones de euros en este nuevo proyecto con el que pretenden extender aún por más regiones, sobre todo en China, los míticos zapatos adorados por millones de hombres y mujeres y por las celebridades de medio mundo. El éxito y la enorme influencia sobre el resto de zapateros del fabricante, que solo en su tienda neoyorquina factura más de cuatro millones de euros al año, son algunos de los principales encantos que han atraído a los Agnelli. La familia, emblema de la opulencia por sus negocios y su estilo de vida, ha apostado en los últimos meses por el sector de la moda. El pasado diciembre, el clan se estrenó en esta industria con una jugosa participación de Shang Xia, empresa impulsada por Hermès, quintaesencia del lujo más elitista.

Los Agnelli son también sinónimo de estilo y elegancia y conocidos como representantes autorizados de esa forma de vivir conocida como dolce vita, personajes que forman parte de la alta sociedad internacional y se mueven en ella como pez en el agua, ya sea rodeados de figuras de renombre del mundo de la política y del espectáculo o en fiestas en Nueva York, la Costa Azul o en el casino de Montecarlo. Las mejores estampas del glamur que exudaba el clan proceden sobre todo de la época de Gianni Agnelli, el patriarca de esa estirpe italiana que sin trono ni corona forman parte de la aristocracia que vende el país transalpino. “Todas las mujeres lo amaban y todos los hombres querían ser como él”, lo definía su sobrina, la diseñadora Diane von Fürstenberg. Los nuevos Agnelli, con John Elkann a la cabeza, se han centrado más en los negocios y menos en los focos, a excepción de Lapo Elkann, el verso suelto de la familia y dicen que el más parecido al espíritu que emanaba su abuelo.

Algunos medios hablan del trato con Louboutin como de un “regalo” de la dinastía con motivo del centenario de Gianni Agnelli, que se celebra estos días. Para la conmemoración, sus nietos, John Elkann, el heredero oficial a los mandos financieros del imperio familiar y el príncipe rebelde, Lapo Elkann, de quien dicen era su descendiente predilecto, lo han recordado en varias entrevistas en los medios locales en las que han repasado su trayectoria y alabado su “intuición” para los negocios. “Estoy convencido de que no habría tenido miedo del covid. Habría tenido el máximo cuidado, sí, con el virus y sus consecuencias. Por encima de todo, habría intentado ayudar a los necesitados, y habría animado a la gente a utilizar su ingenio para encontrar soluciones. Se habría alegrado de recibir esta vacuna fabricada en un tiempo récord”, ha dicho John Elkann del que fuera símbolo del capitalismo italiano y que falleció en 2003. Y también ha destacado la pasión de su abuelo por el medioambiente y por los jóvenes. “Hubiera tenido mucha curiosidad por Greta Thunberg y seguramente hubiera querido reunirse con ella”.

El diario La Repubblica, propiedad de la familia, publicará los próximos días una entrevista con Lapo Elkann en la que revelará facetas aún desconocidas del Avvocato, como se conoce en Italia a Gianni Agnelli. “Eres y serás para siempre un abuelo inolvidable y un ejemplo para mí y para muchas personas en Italia y en el mundo”, escribió en una ocasión en sus redes sociales. De su abuelo ha heredado su encanto, su carácter indomable, su personalidad estridente, su elocuencia y su capacidad para la oratoria.