
Habas con butifarra
Desgranar habas o guisantes no es un trabajo complicado, y la recompensa supera con creces el esfuerzo. Este plato es una buena muestra de lo que pasa cuando juntas legumbres de temporada y embutido fresco.

Desgranar habas o guisantes no es un trabajo complicado, y la recompensa supera con creces el esfuerzo. Este plato es una buena muestra de lo que pasa cuando juntas legumbres de temporada y embutido fresco.

Sí, sabemos que las coliflores no tienen alitas, pero nos referimos a esta receta así porque le vamos a dar el mismo tratamiento que a unas de pollo. Y lo mejor: el adobo admite mil variantes igual de deliciosas.

Clásicas con salsa de chocolate, muy fáciles, veganas, saladas con espinacas y salmón, guarrindongas o sanotas de avena y plátano: en este artículo hay tortitas para todos los gustos.

Cocinamos la sémola de trigo con un sofrito que admite prácticamente cualquier verdura que tengamos a mano y la proteína que más nos guste. Se prepara en 15 minutos y puede servir como receta de aprovechamiento.

Las navajas son un molusco asequible con el que puedes preparar casi de todo. Hoy nos decantamos por un aperitivo de aire asiático, que podemos convertir en ensalada añadiendo un poco más de verdura y fideos de arroz.

Un sabroso bocado a base de arroz aliñado como para sushi, que acepta muchísimos rellenos diferentes y se ha convertido en un personaje más de dibujos animados y cómics de estética manga.

¿Organizar el menú semanal te quita el sueño y de lunes a viernes no tienes tiempo? Aquí tienes un montón de ideas de platos sencillos y sabrosos para cuatro personas que se preparan en una sola tarde.

El arroz a la cazuela queda meloso y con el grano cubierto de sabroso caldo reducido. Juntarlo con setas y rematarlo con queso fundido le aporta un extra de cremosidad y enjundia.

¿Organizar el menú semanal te quita el sueño y de lunes a viernes no tienes tiempo? Aquí tienes un montón de ideas de platos sencillos y sabrosos para cuatro personas que se preparan en una sola tarde.

Una preparación que admite casi cualquier tipo de pescado o marisco con patatas guisadas, regadas por un caldo espeso y sabroso y rematadas con una picada de ajo y frutos secos: un lujo marinero sin dejarse el sueldo.

El tomate en verano alcanza su máximo esplendor. Es en esta estación cuando se puede disfrutar de su punto ideal y aprovecharlo en elaboraciones tan sencillas y ricas como la que hoy traemos.

Estamos en plena temporada de este delicioso, saludable, económico y sostenible pescado azul. Lo celebramos repasando sus infinitas posibilidades gastronómicas y damos algunos consejos para elegirlos bien.

Las sardinas marinadas están muy buenas en el aperitivo, pero también podemos integrarlas en platos como esta ensalada de escarola y burrata, el queso italiano más sexy.

Se prepara con leche en lugar de huevo, tiene menos cantidad de aceite y también se puede tunear con cítricos, especias, picante, ajo u otras salsas: con esta mayonesa todo son ventajas.

Sea por su olor o por las consecuencias de su sobrecocción, las coles no gozan de buena fama. Aquí te proponemos un entrante muy sencillo de preparar para que les des esa segunda oportunidad que merecen.

En pleno enclaustramiento, inauguramos sección diaria para disfrutar de la cocina en casa. Una técnica sencilla pero poco conocida, sus aplicaciones en recetas concretas, y un menú completo de comida y cena.

En pleno enclaustramiento, ofrecemos una sección diaria para disfrutar de la cocina en casa. Una técnica sencilla pero poco conocida, sus aplicaciones en recetas concretas, y un menú completo de comida y cena.

Con una base de pechuga de ave picada, alguna verdura y aderezos al gusto puedes preparar un fiambre casero infinitamente más sano que cualquiera del supermercado, con la mejor relación esfuerzo/resultado del mundo.

Los espaguetis y los macarrones italianos están muy bien, pero si te das una vuelta por las cocinas del mundo descubrirás otras pastas como los fideos 'udon', los pasteles de arroz o los 'spätzle' alemanes.

Una sedosísima crema con la coliflor como protagonista, con una textura imbatible gracias a la nata, la mantequilla y la yema de huevo y el delicado sabor que se consigue cocinando la col al vapor.