Sopa de alubias blancas con tomate y albahaca
Sopa de alubias blancas con tomate y albahaca.
Sopa de alubias blancas con tomate y albahaca.
Creada por un chef italiano afincado en EEUU, esta receta se popularizó tanto que el 'New York Times' la calificó como “el plato del que más se habla en Manhattan”. ¿En qué consiste? En espaguetis con verduras de temporada.
Si cuando encendemos el horno para cocinar cualquier cosa añadimos unas cabezas de ajos, conseguiremos una versión suave y confitada de los mismos. Los podemos usar en platos como esta sabrosa crema.
Estrenamos la temporada de sopas frías con una que combina la frescura de la manzana ácida con el dulzor de la cebolla y la textura del calabacín. La cremosidad corre a cuenta del yogur.
Carne con alubias a la mexicana
Un artículo lleno de delicias listas para comer –o casi–, pensado para satisfacer a vagos, inoperantes gastronómicos y gente que trabaja hasta el 24 a las 20:00 (y a pesar de eso tiene que alimentar a 8 personas).
Un plato italiano tradicional que tiende un puente hacia Oriente gracias a uno de sus ingredientes más refrescantes: el jengibre.
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Crema de aguacate y calabacín.
Solomillo de cerdo con pasas y nueces.
Integrismo paellero clásico, alcachofas de aspecto extraterrestre y personas que están a punto de meter la mozzarella en la lavadora: el consultorio de abril no defrauda.
Si eres generoso con las verduras, justo con los hidratos y comedido con las proteínas de orígen animal puedes preparar un plato único campeón con el que apañar una comida o cena.
Arroz que se convierte en croquetas, buñuelos de verdura y un sofrito para lentejas o salmón con miso que termina en una ensalada; todas estas cenas vienen con un plato extra de regalo.
Bacalao con alcachofas y patata nueva.
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Mezclamos este queso griego curado en salmuera con pera, albaricoque y sandía en tres recetas diferentes. El resultado te lo puedes imaginar: dan ganas de ir al Peloponeso a comprar 10 kilos de feta.
Las lentejas cuentan con una ventaja importante sobre las demás legumbres secas: no exigen remojo previo y se cocinan rápido. Además aceptan todo tipo de acompañantes, por lo que sirven como perfecto 'vacianeveras'.