Las peticiones del Departamento de Transportes de EE UU para recuperar el antiguo civismo en los aviones: no volar en pijama ni pantuflas
La gran cantidad de desplazamientos que se prevén por Acción de Gracias en el país ha motivado una campaña protagonizada por el secretario de Transportes, Sean Duffy, que compara los buenos modales de los pasajeros de antaño con el auge de comportamientos irrespetuosos de viajeros en la actualidad


Este jueves 27 de noviembre miles de familias en Estados Unidos se reunirán para disfrutar juntos del Día de Acción de Gracias. Aproximadamente, el 91% de los estadounidenses lo celebran, según los últimos datos del centro de investigación Pew Research Center. Muchos de ellos tendrán que coger un avión para reencontrarse con sus seres queridos y el Departamento de Transporte del país lo sabe —solo el pasado martes ya hubo casi el doble de vuelos (52.000), según sus datos—. Por eso, este año ha compartido una campaña especialmente centrada en estas fechas con un mensaje claro: recuperar el civismo y las buenas maneras no solo cuando todos estén sentados alrededor de la mesa antes de hincarle el diente al pavo, sino también en los aeropuertos.
Sean Duffy, designado secretario de Transportes por el presidente Donald Trump el pasado julio, se ha prestado a protagonizar esta campaña cuyo objetivo final es reinstaurar lo que llaman “la época dorada de los viajes”. La semana pasada, Duffy compartió un vídeo en su perfil de Instagram —donde tiene 91.600 seguidores— que comienza con imágenes antiguas de aquella época dorada: respetuosos viajeros con vestidos, trajes, sombreros y maletines que suben ordenadamente al avión, pasajeros que sonríen al trabajador que revisa su billete o aviones de hélice plateada tomando vuelo tranquilamente. Todo con la canción Come Fly With Me, de Frank Sinatra, de fondo para darle más elegancia y solemnidad. “Respetábamos la dignidad de viajar en avión y a los hombres y mujeres que hicieron posible este sueño”, dice una grave voz en off. “Volar era un baluarte de la buena educación”, comenta.
Pero esa armonía idílica del pasado se rompe para dar paso a imágenes del presente que muestran justo lo contrario. El vídeo se convierte en un encadenamiento de pies descalzos que navegan por la pantalla táctil del asiento o se posan en el reposacabezas de la persona de delante, viajeros que se pelean en la terminal usando carteles de “Suelo mojado” como arma y ejemplos de pasajeros que se pegan a gritos, puñetazos y tirones de pelo con otros pasajeros —o incluso trabajadores— a bordo del avión. “No es tu imaginación, ¡viajar se ha vuelto más incivilizado!”, destaca Duffy en el texto que acompaña la publicación. Y da tres datos —de EE UU— para demostrarlo: “Aumento del 400% en arrebatos violentos en aviones desde 2019, uno de cada cinco auxiliares de vuelo dice experimentar incidentes físicos y se duplican los casos de pasajeros indisciplinados desde 2019”.
El vídeo pasa a continuación a proyectar en una televisión antigua al propio Duffy, que antes de secretario de Transportes fue presentador y colaborador de televisión —además de participante en un reality show en el que conoció a su actual mujer, Rachel Campos—. “Recuperemos la educación y los buenos modales”, plantea dirigiéndose directamente a los espectadores. “¿Cómo podemos hacerlo mejor?”, se pregunta. “Quizás deberíamos decir por favor y gracias a nuestros pilotos”, propone como comienzo. “Intentemos no usar pantuflas ni pijamas al llegar al aeropuerto”, advierte a los viajeros que apuestan por la máxima comodidad.
Este lunes 25 de noviembre, el propio Duffy ha querido dar ejemplo personándose en el Aeropuerto Internacional Newark Liberty, en Nueva Jersey, para presenciar en primera persona la que define como “la temporada de viajes de Acción de Gracias más grande de la historia”. Apareció vestido con un traje azul, camisa blanca y corbata granate. “Casi me puse unos vaqueros, pero pensé que mejor no hacerlo si el objetivo era hablar de arreglarse”, bromeó con los periodistas. Aun así, el secretario de Transportes sugirió que unos vaqueros y una camiseta decente son un atuendo estupendo para viajar en avión. “No puedo obligar a la gente a ser civilizada, pero no obtendrás un resultado mejor a menos que lo pidas. Así que, simplemente, lo pido”, aseguró.
Para continuar con la campaña, este miércoles Duffy ha subido otro vídeo en sus redes en el que presenta a Lily, una mujer que lleva 19 años trabajando como azafata —precisamente, ya publicó otro vídeo estos días elogiando este trabajo, con imágenes de azafatas acunando bebés, repartiendo pizzas gratis tras un retraso o felicitando a novias a punto de casarse—. Duffy le pregunta cómo pueden ayudar los pasajeros para volver a esa época dorada de los viajes y ella no les exige demasiado. Con que digan “hola”, “por favor” y “gracias”, y tengan un poco de paciencia al despegar y aterrizar, para Lily los viajes serían mucho más agradables.
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