Madrid multa ya con 200 euros a los coches sin etiqueta ambiental que no cumplan los requisitos de la Zona de Bajas Emisiones

El periodo de aviso en la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de Madrid, que aplica a toda la ciudad, ha terminado este domingo 30 de junio y, a partir de este 1 de julio, comenzarán a aplicarse las multas a los propietarios de coches que no cumplan con los requisitos para entrar a la ciudad. A partir de ahora, los turismo con clasificación A que no estén empadronados en Madrid o que no estén dados de alta en el IVTM en la capital antes del 1 de enero de 2022 y que accedan al exterior de la M-30 serán sancionados con 200 euros. Estos coches solo podrán atravesar Madrid utilizando las vías M-40, M-45 y M-50, así como las autovías radiales hasta el límite de M-40. Las autoridades vigilarán que se cumpla la norma a través de 500 cámaras que hacen parte del sistema de vigilancia de Madrid ZBE.

La restricción solo aplica para los vehículos turismo con clasificación ambiental A, es decir, los coches diésel matriculados antes de 2006 o de gasolina de antes del 2000. Los vehículos de transporte de mercancías y las motocicletas A o sin etiqueta no tendrán ningún problema y podrán seguir entrando a la ciudad, excepto a las Zonas de Especial Protección: Distrito Centro y Plaza Elíptica. Por su parte, los vehículos con etiqueta B y C podrán seguir circulando como lo han hecho hasta ahora.

El programa de Madrid ZBE se ha activado por fases y zonas. En enero de este año, se activó el nivel de restricción en todo Madrid; sin embargo, los vehículos que no cumplían con la norma solo recibieron un aviso sin multa, como estrategia pedagógica, entre el 1 de enero y el 30 de junio. En ese periodo, el Ayuntamiento envió 358.661 cartas informativas a los ciudadanos –unas 1.400 diarias de media– que podrían haber sido sancionados para explicarles cómo funcionaría el sistema a partir de ahora.

La ZBE de Madrid hace parte de la estrategia de sostenibilidad Madrid 360, que busca reducir las emisiones contaminantes en la ciudad y cumplir con las directivas europeas de calidad del aire. El Ayuntamiento de Madrid, recientemente, ha destacado que mayo cerró con un “descenso histórico de los niveles de dióxido de nitrógeno (NO2)” en toda la ciudad. Ese mes, ninguna de las estaciones de control detectó niveles de NO2 superiores a los 30 microgramos por metro cúbico (siendo de 40 el límite anual obligatorio). Sin embargo, para 2030, Europa pondrá nuevos topes: a partir de ese año, el máximo anual de emisiones de NO2 permitidos será de 20 microgramos por metro cúbico.

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