Los taxistas salen por tercera vez a las calles para frenar la liberalización de su sector

Los taxistas madrileños han salido a la calle por tercera vez este año para protestar contra el reglamento que la Comunidad de Madrid pretende implantar para liberalizar el sector. El Gobierno de Ayuso pretende que los taxistas puedan trabajar todos los días del año y puedan adquirir hasta 50 licencias, propuesta que los taxistas sostienen favorece al sector de los vehículos con conductor (VTC). La manifestación reunió a cerca de 6.000 taxistas, según fuentes de los organizadores, unos 1.100 taxis, según la Delegación de Gobierno, vehículos que colapsaron toda la Castellana desde la Plaza de Castilla y calles aledañas. Los taxistas salen a la calle como medida de presión ante el nulo avance en las negociaciones con la Consejería madrileña de Transportes e Infraestructuras.

“Cualquier miércoles (día en el que se celebra el Consejo de Gobierno) pueden imponernos un reglamento que ni hace falta ni lo hemos pedido”, ha incidido Julio Sanz; presidente de la Federación de Profesionales del Taxi de Madrid, en declaraciones a este periódico. Se refiere al proyecto de decreto de la Comunidad de Madrid que establece que los taxistas podrán trabajar los 365 días del año, sin límite de horario y podrán pasar de adquirir tres a 50 licencias por persona física o jurídica, a pesar de que es un sector en el que el 95% de los trabajadores son autónomos. La última reunión que tuvieron con el consejero de Transportes, David Pérez, y el director general de la Consejería de Transportes, José Luis Rodríguez, no dio buenos frutos. “Nos ofrecieron mantener los días de libranza entre semana, pero eso no soluciona nada”, ha comunicado Sanz.

La movilización ha sido convocada por la Federación Profesional del Taxi de Madrid, Élite Taxi y otros colectivos del sector. La última protesta que realizaron, hace 22 días, tuvo una afluencia de 3.000 taxis según la Delegación del Gobierno y de 6.000 conductores según los convocantes. El presidente de la FPTM ha afirmado que los taxistas están abiertos al diálogo cuando la Consejería de Transportes les llame para hablar: “Pero la liberalización del sector no es negociable”. La federación ya ha solicitado a la Delegación del Gobierno un permiso para volver a manifestarse el próximo 23 de febrero. “Seguiremos repitiendo las protestas hasta conseguir que no cambien lo que lleva funcionando años”, ha remarcado Sanz. El sector también reclama que se cree un reglamento para los Vehículos de Transporte con Conductor (VTC) y un sistema sancionador para no permitir su intromisión en el sector del taxi.

En Madrid hay cerca de 15.000 licencias de taxi y un 95% de los casi 9.000 titulares que participaron en un referéndum que realizó el sector el pasado octubre se mostró en contra de este nuevo reglamento. En el debate sobre el estado de la región, la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, anunció que el Gobierno madrileño estaba ultimando los desarrollos reglamentarios del taxi y de los VTC, que supondrán “importantes mejoras tanto para los titulares de las licencias como para los usuarios”, con las que podrán ver multiplicada la facturación y mejorar el servicio.

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