Sin protocolo sanitario a 11 días de las oposiciones de 30.000 profesores en Madrid
La Consejería de Educación asegura que se conocerán los detalles cuando tenga el visto bueno de Salud Pública y CC OO critica la “improvisación” para poner en marcha unas medidas que requieren tiempo
Comienza la cuenta atrás para las oposiciones del profesorado de Educación Secundaria, Formación Profesional o Enseñanzas Artísticas. En 11 días, más de 30.000 aspirantes se disputarán 3.700 plazas y se presentarán a unas pruebas que el año pasado tuvieron que cancelarse por el estado de alarma. Ahora, con la pandemia aun presente, saben el temario que se deben preparar pero no el protocolo de seguridad que se pondrá en marcha. Si existe. Todo es una incógnita y la rumorología se ha extendido entre los grupos de WhatsApp de los candidatos, que arden ante los interrogantes de cómo se van a organizar una de las pruebas más concurridas que organiza la Comunidad de Madrid.
Carlos Cuevas, profesor de Biología de un instituto público de Loeches, se presenta por segunda vez a estas oposiciones y para él conocer el protocolo es clave para su supervivencia. Cuenta por teléfono que tiene una discapacidad porque le trasplantaron la médula hace años y lleva uno entero siguiendo las normas a rajatabla. “No me la he jugado ni media e ir a estas oposiciones es lo más arriesgado que voy a hacer en todo este tiempo”, explica.
Dice que ya corre el rumor de que no se va a tomar la temperatura a la entrada de las 109 sedes de la Comunidad de Madrid en las que se distribuirán los 2.500 docentes que compondrán 525 tribunales, aunque no sabe si es cierto. De la misma manera que le gustaría saber si habrá ventilación cruzada, si será obligatorio llevar mascarilla, cuántas personas habrá en un aula o si esperarán en los pasillos, como suelen hacer, a que les llamen uno a uno. Todo eso lo debe desentrañar el protocolo sanitario que se elabore para realizar unas pruebas con las garantías sanitarias adecuadas y, por no saber, no saben ni si existe ese protocolo.
“Los detalles se darán a conocer una vez se tenga el visto bueno de las autoridades sanitarias, es decir, de la Dirección General de Salud Pública”, asegura un portavoz de la Consejería de Educación. Por lo tanto, habrá que esperar. Algo que los docentes no entienden. “El año pasado se realizaron las pruebas de selectividad, este año se ha hecho el MIR [el examen para los médicos residentes tras el que eligen una especialidad], se han organizado otras oposiciones... Creo que pueden compartir los datos, no es tan complicado, se trata de copiar y pegar”, dice Cuevas, que apunta, además, que muchos de los aspirantes no están todavía vacunados porque no están trabajando y porque no les ha tocado el turno por edad. “Hay mucha gente joven, como es normal. Eso puede ser una bomba vírica”, lamenta.
Isabel Galvín, portavoz de Educación en CC OO, asegura que el sindicato ha recibido un aluvión de consultas de docentes preocupados y, por tanto, se ha visto en la obligación de exigir a la Administración que publique inmediatamente la regulación. “¿A qué esperan? ¿Al día de antes?”, pregunta Galvín, que recuerda que “poner en marcha un protocolo sanitario para un proceso tan masivo necesita tiempo, criterios claros, coordinación y apoyo material”.
“No conocemos la regulación para personas que hayan dado positivo o estén confinadas durante la realización las pruebas. Ni cómo se va a ventilar o limpiar los espacios o qué medidas específicas se han pensado”, lamenta la portavoz de CC OO, que propuso al Gobierno que eliminara la obligatoriedad de presentarse a las oposiciones para continuar en las listas de interinidad. Por ahora nada se sabe. “La Consejería sigue abonada a la improvisación”.
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