Los niños olvidan meses de restricciones visitando a los SuperThings en Ifema
Una exposición recrea a gran escala Kaboom City, el universo de los últimos muñecos de moda entre los más pequeños
Carlota, de 7 años, no ha podido dormir por lo nerviosa que estaba al pensar que iba a ver una exposición de sus muñecos favoritos, los SuperThings -antes llamados Superzings- en el Espacio 5.1 de Ifema. Ella lo ha pasado mal al estar tanto tiempo encerrada en su casa en el último año por la crisis del coronavirus. Sin embargo, a pesar de que las restricciones son más laxas en los últimos meses, sigue sin poder llevar sus juguetes al colegio. Por eso, su madre, Gema Zabala, ha ido con ella a visitar esta muestra en la que los niños puedan correr y jugar por Kaboom City, la ciudad en la que viven estos personajes. “Es una maravilla, ya que ellos están como locos. No paran quietos y necesitan este tipo de actividades”, cuenta la madre. Siete de cada 10 niños y adolescentes españoles sufren episodios de ansiedad por el confinamiento, según una investigación conjunta de Universidad de Málaga y la Universidad de Alicante publicado en la revista Frontiers in Psychology.
Los SuperThings son unos muñecos de goma coleccionables que no superan los cinco centímetros de altura, aunque en Ifema el más pequeño mide 40 centímetros. Su peculiaridad es que tienen forma de objetos cotidianos, como puede ser una patata, un brócoli o un exprimidor de zumos. Carlota dice que tiene unos 300 de ellos, algo que su madre corrobora. Se venden en quioscos, papelerías, jugueterías o supermercados a un precio de 70 céntimos el sobre, por lo que son fáciles de coleccionar. En Europa llevan vendidos unas 150 millones de unidades, de las cuales 45 son solo en España, destaca Juanan Moral, director de Sold Out, uno de los productores de la exposición. Debido al gran tirón que tiene entre el público infantil, han creado este espacio de más de 1.000 metros cuadrados, donde se recrean escenas de este fenómeno y se ha convertido para muchos de sus visitantes en el primer gran evento familiar después de tantos meses de restricciones que han sufrido los niños. “Todos los padres con niños pequeños lo conocen. Es el típico muñeco que pisas en el salón cuando vas descalzo, menos mal que estos son de goma”, indica Moral.
Desde su lanzamiento en 2018, los SuperThings han incrementado su éxito gracias al impacto que tiene su serie en YouTube. Sin embargo, hay algunos que no conocen la versión audiovisual, como Agustín, de 7 años, que prefiere jugar con los muñecos. Así se ha creado su nombre artístico, Kike Jackson y es productor y director de sus propias historias. La muestra le ha servido de inspiración para nuevas ideas: ”Me parece la bomba este lugar porque veo a los muñecos con los que juego en casa y ahora quiero ir a juntar a todos”.
Alonso y Andrés, ambos de 7 años, son dos compañeros de colegio que han visto la muestra juntos. En el colegio no pueden jugar con los más de 300 muñecos que tienen entre los dos. Andrés tiene hasta una estantería donde están una parte de ellos expuestos que nadie puede tocar. “Este mundo genera enganche con los intercambios. Muchos se hacen ahora por eBay porque es más fácil buscar a uno en particular, aunque al final pierde la gracia de intercambiarlo en persona” señala el director de Sold Out, que le recuerda a su niñez cuando intentaba reunir cowboys e indios y los cromos de La Liga de fútbol. Superthings también tiene una aplicación que aparte de contenido de los muñecos tiene un espacio que permite quedar con otras personas y cambiar los repetidos.
La exposición, a la que se podrá acudir los fines de semana y festivos hasta el 1 de agosto por un precio de 11.5 euros por visitante mayor de tres años o un pack familiar de 41 euros para cuatro visitantes, recorre las siete temporadas de la serie, aunque no están ordenadas de orden cronológico. El recorrido se hace bajo estrictas medidas de seguridad y una reducción del aforo que se controla desde la primera sala. “En el transbordador caben un máximo de 40 personas. Está observado que una vez que ellos acaban de esa sala ya no hay nadie en la siguiente. Y así sucesivamente. Al final son niños y cuando lo han visto, tocado y jugado se cansan y quieren ir al siguiente espacio”, afirma Moral. Además, entre las salas hay gel para que los niños puedan desinfectarse si han tocado alguno de los personajes.
Todos cuentan con un pasaporte durante el recorrido y en la última sala los visitantes pueden descubrir si han sido elegidos como héroes o villanos. Los niños se pelean porque a veces no les gusta lo que les ha tocado e intentan cambiarlo, mientras que otros están encantados como Daniel que le ha tocado ser héroe. Con solo 5 años, va vestido con una camiseta de la serie y asegura que es muy fanático de los muñecos. Su madre, Paloma Girón, lo corrobora al señalar que tiene mascarilla, mochila, la funda de almohadas de sus personajes favoritos. Además, tiene a partir de la serie 3 completa. “La verdad es que es una ruina porque no solo son los sobres, sino los complementos y otros accesorios”, afirma Girón.
La última parada de la exposición SuperThings, que se convierte en una pesadilla para muchos padres ante la avalancha de sus hijos con decenas de sobres y cajas para llevarse. Los hermanos Eric y Eizan, de 5 y 7 años respectivamente, se han llevado tres revistas, diez sobres y una caja con un robot. Su gran ilusión es que les toque su personaje favorito, Dr volt, que es capaz de iluminarse en la oscuridad para seguir desarrollando su creatividad.
Exposición Superthings:
Cuándo: Fines de semana y festivos hasta el 1 de agosto.
Dónde: Espacio 5.1 de Ifema: Av. del Partenón, 5, 28042 Madrid.
Precio: 11.5 € entrada general, 10.25 € la familiar.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.