La nueva portavoz de Vox en el Congreso, una negacionista de la covid: “Si apagas la televisión, ya no hay pandemia”

Santiago Abascal dio este miércoles la sorpresa. Cuando muchos medios apostaban a que Ignacio de Hoces, vicesecretario institucional del partido, sería el nuevo portavoz del Grupo Parlamentario, tras la dimisión de Iván Espinosa de los Monteros, el líder de Vox se descolgó con el nombre de una mujer joven: la cordobesa María José Rodríguez de Millán Parro, más conocida como Pepa Millán. Según fuentes de Vox, De Hoces, que sustituyó como cabeza de lista por Badajoz al defenestrado Víctor Sánchez del Real —miembro significado del sector que encabezaba Espinosa—, tenía dos graves inconvenientes para ser portavoz: su falta de experiencia parlamentaria (su bagaje se limita a haber sido asesor del grupo en el Congreso); y su identificación con el vicepresidente político del partido, Jorge Buxadé. Nombrar a De Hoces era poner a Buxadé por vía interpuesta y escenificar su triunfo aplastante en la pugna interna.

Descartada esta opción, la mejor alternativa era una mujer. Así se contrarresta la imagen de partido machista, que Vox considera un freno a su crecimiento; y se hace olvidar a Macarena Olona, en su día la cara más popular de la formación tras el propio Abascal, cuya traumática salida abrió una crisis que no se ha podido cerrar todavía.

Abascal, según las fuentes consultadas, barajó dos nombres: María Ruiz, vicesecretaria de organización de Vox, y Pepa Millán, a la que hizo un hueco en la codiciada lista por Madrid. Ambas jugaron un papel, aunque fuera de reparto, en la reciente campaña electoral; e intervinieron, como teloneras, en el mitin final de la Plaza Colón de la capital. Abascal se ha decantado por la segunda, una graduada en Derecho por la Universidad de Sevilla de 28 años, que se incorporó como asesora al grupo de Vox en el Parlamento andaluz en 2020 y en julio del año pasado fue elegida senadora autonómica por dicha comunidad de carambola, ya que el partido ultra quería designar a un hombre pero, por cupo, le correspondía una mujer.

Como columnista, Millán colaboró con el diario La Razón y con La Iberia, una web ultracatólica. En un artículo publicado en marzo de 2022 en esta última, en la que abonaba las teorías negacionistas de la Covid, aseguró que la gestión de la enfermedad fue “un experimento para la verificación del grado de sumisión alcanzado por la sociedad”; que los medios de comunicación infundieron un “miedo infundado” y los telediarios practicaron el “terrorismo informativo”; que “ninguna de las medidas que se tomaron [para combatirla] siguieron un criterio sanitario sino político”; y que “en realidad, si apagas la televisión ya no hay pandemia”.

Pero su salto a la fama en las filas ultras llegó cuando se convirtió en la cara de Vox en la Cámara alta, donde tuvo oportunidad de interpelar directamente al presidente Pedro Sánchez y sus intervenciones fueron aplaudidas por el propio Abascal.

Fuentes de Vox advierten, sin embargo, que el nombramiento de Millán solo despeja en parte las dudas sobre quién mandará en el grupo parlamentario. Cuando se fue Olona, los dos cargos que acumulaba se dividieron: Inés Cañizares fue nombrada portavoz adjunta y José María Figaredo, secretario general. Está por ver si ambos puestos vuelven a unirse y quién los ocupa, pues Cañizares no revalidó su escaño por Toledo.

“Lo más sorprendente”, subrayan las mismas fuentes, “es que nadie haya hablado de Javier Ortega como posible portavoz, aunque es el que tiene más experiencia y su papel en el Ayuntamiento de Madrid, con mayoría absoluta del PP, resulte irrelevante”. Eso avalaría que, como dice Abascal, las diferencias en Vox no son ideológicas: Espinosa es ultraliberal y Ortega falangista, pero ambos han sido laminados.