Mazón, noqueado por Feijóo

“En este partido, esos aplausos son de despedida”. En el PP valenciano no ha calado la idea de que el presidente de la Generalitat y del PP autonómico, Carlos Mazón, haya empezado a gozar, de repente, del favor y el elogio de su jefe de filas, Alberto Núñez Feijóo. El largo aplauso que el propio Feijóo propició en el cónclave de barones celebrado hace una semana en Asturias, no ha hecho sino confirmar lo que ya se barruntaba: Mazón está políticamente acabado y es solo cuestión de tiempo.

Dos son los motivos de ese lapso temporal, tal como admiten fuentes del PP. De momento, no hay relevo. Además, el barullo de recriminaciones da a los populares un arma más de crítica al Gobierno de Pedro Sánchez, al que le cuesta gestionar la respuesta a las críticas.

En cualquier caso, las señales son claras. Por si el valenciano se venía arriba, Feijóo no quiso ocultar, apenas unas horas después de los aplausos, lo que opina del jefe del Gobierno valenciano: “¿Carlos Mazón es el mejor gobernante que el Partido Popular le puede ofrecer a los valencianos hoy?”, le preguntó Carlos Alsina en Onda Cero. Una cuestión con tan “fácil” respuesta como sí o no, que incluso se podía haber aliñado con algún calificativo, obligó a Feijóo a desplegar una serie de presuntos argumentos para no responderla.

La tesis fue que Mazón ganó las elecciones, que es trabajador, que ha hecho autocrítica (tanto en el caso del líder nacional como en el del propio Mazón y su equipo hablan de autocrítica y reconocen errores, pero nunca se especifica en qué), que ha comparecido en las Cortes (como si hubiera sido posible no hacerlo), que ha planteado una comisión de investigación (que está paralizada), que ha hecho una remodelación de Gobierno (la que le exigió el propio Feijóo), y que “ha unido su futuro al éxito de la reconstrucción”, tal como dijo el presidente del PP, como si no hubiera sido él mismo quien le hubiera reclamado esa condición que Mazón había descartado.

El jefe del PP dijo otras muchas cosas, en esa cantinela que los populares repiten para tratar de nublar el hecho de que las emergencias son una competencia de la Generalitat. “¿O sea, que es la mejor opción que el PP puede ofrecer a los valencianos?”, repreguntó Alsina. La respuesta comenzó con un “mire usted, hemos tomado buena nota de lo ocurrido”. Después de esta entrevista, la semana ha estado plagada de contradicciones. El por qué Mazón dijo lo que dijo sobre sus errores nada tiene que ver con el motivo por el que, según el Gobierno valenciano, Mazón dijo lo que dijo.

En ese escenario, lo que ha permanecido es la idea de Feijóo de que Mazón estaba “noqueado”, en un intento de explicar lo que hizo y, sobre todo, lo que no hizo el presidente valenciano los días siguientes a la dana, que ha acabado con la vida de 224 personas.

“Noqueado no, estaba roto emocionalmente”, quiso precisarle a su jefe de filas Carlos Mazón, quien ha tratado, con poco acierto y escasos resultados, aparecer ahora, casi tres meses después de las lluvias torrenciales, como una víctima. “La gente me decía que no me veía sonreír. ¿Cómo iba a sonreír con lo que estaba sucediendo?”, expuso a modo de prueba quien aún no ha aclarado los detalles de la comida y la larga sobremesa que hicieron que no se incorporara al comité de coordinación de emergencias hasta las siete y media de la tarde el día de la dana.

El hecho es que el presidente valenciano seguirá siéndolo mientras Feijóo lo permita. En el equipo del líder popular reconocen el “desgaste” político que supone Mazón para el PP en la Comunidad Valenciana, pero admiten también que la gestión de la dana sirve a los populares para cargar desde otro flanco contra La Moncloa. “Preferimos un presidente como Mazón a Sánchez. Estamos en un punto en el que reivindicamos y reconocemos su valentía. Vinculamos su continuidad a la recuperación”, insisten fuentes de Génova.

Eso sí, en el gabinete del líder del PP se resisten a otorgar un respaldo expreso a Mazón y subrayan que la visita a la zona afectada por la dana que hizo la semana pasada fue en solitario, sin la compañía del president, informa Virginia Martínez.

Las mismas fuentes restan importancia en estos momentos al relevo del jefe del Consell considerando que aún quedan “30 meses” para las próximas elecciones autonómicas. Y en Valencia, fuentes del partido insisten en un razonamiento clave: “La única que podría relevarle ahora sería María José Catalá [alcaldesa de Valencia]” y esta no quiere, en este momento, acceder a un puesto frágil y cuestionado que le consuma incluso hasta hacer peligrar la próxima cita electoral.

Treinta meses es el plazo que el PP tiene marcado a fuego y que considera excesivo como para exponer las diferencias entre Alberto Núñez Feijóo y Carlos Mazón explícitamente. Nadie oculta ya que existe una relación áspera entre ambos, incluso previa a la gota fría y motivada en el acuerdo al que el valenciano llegó con Vox para acceder al Gobierno autonómico sin esperar a la celebración de las elecciones generales y no perjudicar así a la candidatura nacional de Feijóo.

“Hay una relación exigente entre ambos”, indican fuentes del Partido Popular. En cualquier caso, nadie entra a valorar que, más allá del tacticismo electoral, la continuidad de Carlos Mazón sea lo mejor para la Comunidad Valenciana en este momento, o, como preguntó Alsina, si Mazón es el mejor gobernante que el Partido Popular puede ofrecer a los valencianos. “Es política”, señalan en el PP.