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Los bomberos forestales valencianos en pie de guerra por los recortes frente al fuego

Los sindicatos reclaman un convenio para todos los efectivos y más refuerzos en un escenario de grandes incendios también fuera de temporada

Cristina Vázquez
Unidad helitransportada de bomberos forestales de la Generalitat Valenciana en su base de Enguera en 2020.
Unidad helitransportada de bomberos forestales de la Generalitat Valenciana en su base de Enguera en 2020.Kike Taberner

Arde el monte valenciano de nuevo —el fuego ha consumido en Tárbena unas 600 hectáreas— y los bomberos forestales de la Generalitat se afanan por controlarlo desde hace dos días. Pero los incendios no son su único frente de batalla, los efectivos denuncian que afrontan la temporada sin las plantillas de refuerzo al completo y con una lista de reivindicaciones laborales pendientes durante años. Seis sindicatos, GCT, SPBBL, CC OO, UGT, Emap y CSIF, han convocado este martes una marcha de protesta, con el lema No a los recortes, que ha concluido ante la sede de la Generalitat, a la que exigen un convenio único para todos, la creación de un tercer turno o que los refuerzos temporales se queden todo el año.

Ferran Edo, secretario de CGT, organización mayoritaria en el colectivo, asegura que están peor que hace un año porque la Sociedad Valenciana de Gestión Integral de Servicios de Emergencias de la Generalitat (SGISE), de la que dependen, no se sienta a negociar un convenio unitario —ahora se rigen por tres diferentes—. El anterior Gobierno del Botànic firmó uno a finales de 2022 con los representantes sindicales pero ni Función Pública ni Hacienda lo validaron. 2024 ha comenzado con recortes de personal, concretamente con el despido de 22 personas de Tragsa que, aunque no estaban integrados en la sociedad, sí realizaban por encomienda labores de apoyo a las unidades de la entidad autonómica, creada en 2019, denuncia Edo. “Estamos peor que hace un año”, subraya el dirigente de CGT.

Los bomberos forestales demandan la creación de la segunda actividad, como tiene los policías autonómicos, para los efectivos más mayores y un tercer turno que permita un turno saliente que descanse y otro de relevo, además del que está operando. “Estamos indignados con la gestión porque estamos a las puertas de un verano que se prevé catastrófico porque no hay previsión de lluvias mientras tenemos un servicio de bomberos forestales bajo mínimos”, añade Edo.

El último caballo de batalla del colectivo es que los refuerzos temporales —este año se han anticipado al 1 de abril pero la duración será, como siempre, de seis meses— se consoliden los 12 meses porque, como explican los sindicatos, el cambio climático ha supuesto la desestacionalización de los grandes incendios. Se trata de añadir a los 700 efectivos fijos, los casi 300 contratados por seis meses. En cualquier caso, los sindicatos alertan de que las bolsas de trabajo para cubrir las vacantes no funcionan bien y muchas de las unidades de refuerzo no funcionan por falta de efectivos. “Hay muchas incompletas”, apostilla. Los socialistas denunciaban esta semana en las Cortes que “la mayor parte de las bases carecen del material necesario para hacer frente a una emergencia” y lamentaban que “por la falta de planificación y la improvisación del Gobierno valenciano, el 42% de las plazas de las unidades de refuerzo se encontraban sin cubrir, faltando, al menos, 70 bomberos forestales”.

Este colectivo recuerda que hay más de 300 bomberos forestales sin contratos estables, en situación de “fraude de ley”, y se necesitan 190 trabajadores más. Lamentan además el recorte, de 13 millones de euros, en los presupuestos de la SGISE para 2024, que afecta al servicio en contrataciones básicas como el avituallamiento o la gestión de las nóminas, y denuncian vehículos y material anticuado.

“Nos vemos que haya un plan o una voluntad de analizar la situación y actuar, y vale que puedan haber heredado del Botànic un berenjenal pero llevan ya un año de gestión. Necesitamos que presten el servicio como toca porque están poniendo en riesgo la seguridad de la gente: no tenemos personal y eso es básico. Y luego ya están las condiciones de trabajo: unidades de refuerzo que se han quedado sin base porque dependemos del alquileres de centros de trabajo con barracones, de vehículos que están en talleres porque no hay una renovación de flotas.... La pelota se ha ido haciendo grande y estamos en abril”, advierte Toni Aroca, secretario del Sindicato Profesional de Policías Locales y Bomberos (SPPLB).

“Los sindicatos nos debemos a los bomberos. Llevo 15 años en servicio y jamás nos hemos encontrado una situación de tal vulnerabilidad, abandono y falta de empatía acerca de nuestras necesidades”, continúa el dirigente de SPPLB, el segundo en representación. “Esto va de objetivos, no de colores. Tenemos miedo de que pase algo por falta de dotaciones, así que vamos a seguir progresivamente con las movilizaciones, inclusive una huelga en plena campaña”, concluye Aroca.

La SGISE replica que el diálogo con los sindicatos es permanente. “En las dos últimas semanas la dirección de la empresa ha mantenido hasta tres encuentros con los representantes de los trabajadores en el comité intercentros. De hecho, la consejera de Justicia e Interior, Elisa Núñez (Vox) se reunió con ellos el pasado 15 de febrero para trasladarles la situación de la empresa. Según la Consejería, “la redacción de un convenio único que dé cabida a la totalidad de los trabajadores es un objetivo prioritario de SGISE”, aunque todavía no se ha avanzado en esa dirección.

La sociedad se justifica en que la situación del servicio de Bomberos Forestales viene determinada “por una herencia del gobierno del Botànic que se ha venido denunciando desde que los actuales responsables de Consejería fueron conscientes de la gravedad”. “No se puede solucionar en siete meses lo que se hizo mal en cuatro años”, aseguran fuentes de la SGISE, que trabajan en elaborar un plan estratégico que dé respuesta a las necesidades de un servicio esencial.

El 1 de abril se activó el llamamiento al 100% del personal titular de las unidades de refuerzo. Sin embargo, la sociedad reconoce que en los próximos días se habrá incorporado el 87% del personal. “El resto lo hará progresivamente debido a que hay que cumplir unos trámites legales administrativos, entre los que se incluye la solicitud a la Consejería de Hacienda de autorización para la activación de las bolsas de urgencia”. Interior asegura que “el servicio de extinción de incendios en la ComunidadValenciana está garantizado”.

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Sobre la firma

Cristina Vázquez
Periodista del diario EL PAÍS en la Comunitat Valenciana. Se ha ocupado a lo largo de su carrera profesional de la cobertura de información económica, política y local y el grueso de su trayectoria está ligada a EL PAÍS. Antes trabajó en la Agencia Efe y ha colaborado con otros medios de comunicación como RNE o la televisión valenciana À Punt.
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