La Generalitat acuerda con los ganaderos el sacrificio de 30.000 cerdos sanos en el foco de infección de peste porcina

Una reunión de urgencia cerrada este mismo viernes ha servido para que la Generalitat y el sector ganadero de Cataluña haya acordado el inicio del sacrificio de 30.000 cerdos sanos que se encuentran cerca del foco de infección de peste porcina africana detectada en Barcelona. De esta forma, se empezarán a llevar al matadero esos animales que se encuentran en el perímetro de vigilancia. Su carne se utilizará para el consumo interno, según ha explicado la Asociación de Jóvenes Agricultores y Ganaderos de Cataluña (JARC) a Europa Press.

La Asociación de Jóvenes Agrarios (Asaja) defiende que la medida, entre otras cuestiones, persigue tranquiliza a un sector clave para la economía, por su fuerte impacto en facturación. Al ser los cerdos sanos, ha señalado, la carne es apta para el consumo. El acuerdo sellado este viernes era una de las medidas que reclamaba Mercolleida, lonja de referencia para la fijación del precio de la carne de cerdo.

A la reunión han asistido, además de los representantes del sector ganadero, el consejero catalán de Presidencia, Albert Dalmau, el titular de Agricultura, Òscar Ordeig, y la de Investigación, Núria Montserrat.

La decisión llega cuando han sido detectados 15 animales infectados desde que saltó la alarma por la presencia de peste porcina en Cataluña, impacto que ha supuesto el cierre de algunos mercados y la caída de 10 céntimos del precio del kilo de carne de cerdo, hasta los 1,20 euros. El Gobierno catalán intenta calmar al sector, destacando que la gran mayoría de los cerdos hallados muertos están libres de la peste porcina, que se investiga si salió de un laboratorio científico ubicado en el límite de Collserola. La Comisión Europea ha señalado 91 municipios como los afectados por el brote.