Junts celebra que Sánchez admita sus incumplimientos pero desconfía de que quiera restablecer relaciones

La relación entre Junts per Catalunya y el Gobierno va a seguir congelada, pese al intento de Pedro Sánchez por revivir los rescoldos. El partido que lidera Carles Puigdemont reconoce que la admisión de culpas hecha por el presidente del Gobierno, asumiendo incumplimientos en los acuerdos cerrados entre las dos partes, es un gesto que casa con la voluntad de que el PSOE cargue públicamente con la culpa del fracaso de la relación. Sin embargo, esos “incumplimientos” asumidos por el propio Sánchez no bastan para que Junts contemple un volver a empezar. Puigdemont y la dirección de Junts no ven “creíble” el súbito cambio de actitud mostrado por Sánchez, según han avanzado fuentes cercanas a la dirección de la formación. El partido independentista evita hacer ninguna reacción oficial hasta que este miércoles por la mañana Míriam Nogueras haga una comparecencia en Barcelona.

Salvador Vergès se estrenaba este martes como portavoz de Junts en el Parlament y ha ofrecido una comparecencia ante la prensa donde se centró en atacar al Govern de la Generalitat por la gestión que hace del brote de peste porcina africana. Vergès ha criticado a Salvador Illa porque sigue de viaje en México en lugar de atender la crisis sanitaria presencialmente desde Cataluña. “Conectarse telemáticamente a las reuniones de gobierno es inadecuado”, ha dicho Vergès, quien tiene entre sus funciones atender las directrices que le manda vía telemática Carles Puigdemont desde Waterloo (Bélgica).

El nuevo portavoz parlamentario ha evitado, en cambio, hacer ninguna valoración de las manifestaciones hechas por Pedro Sánchez y ha derivado esa responsabilidad en Míriam Nogueras, portavoz en el Congreso de los Diputados. Nogueras hablará el miércoles, 24 horas después de las manifestaciones de Sánchez en sendas entrevistas a Rac1 y al canal catalán de RTVE, donde ha reconocido “incumplimientos” por su parte relacionados con los acuerdos que tiene con el partido de Carles Puigdemont y ha anunciado una voluntad de enmienda, así como un paquete de medidas económicas para tratar de reconstruir puentes con Junts como socio clave de legislatura.

“Asumo los incumplimientos. No niego la gravedad de la crisis que tenemos con Junts”, ha manifestado Sánchez. “El acuerdo de Bruselas supuso una gran oportunidad para resolver un conflicto político que viene de largo”, ha insistido en otro gesto al líder del Junts. “La normalización completa no se producirá hasta que Puigdemont no pueda volver a Cataluña, yo me veré con él, ese encuentro se producirá”, ha vaticinado también. Todo estaba pensado para reconectar con Junts, y reconocerle su peso en la legislatura.

No todo queda en palabras, porque el Gobierno cuenta con un paquete de anuncios para tratar de congraciarse con Junts. Sánchez ha señalado que un real decreto ley que se aprueba hoy en Consejo de Ministros tendrá tres cuestiones que exigía Junts: “Facilitaremos a los ayuntamientos las inversiones financieramente sostenibles, van a tener más facilidad para invertir en proyectos que no conlleven gasto corriente, construcción de vivienda, eso es algo que se lo debemos a Junts. Para facilitar el cumplimiento de obligaciones fiscales a empresas, vamos a ampliar el plazo para facilitar la digitalización, como pedía Junts. Además, habrá un real decreto para ayudar a propietarios en caso de impago. Y estamos en el buen camino para reformar la multirreincidencia. Ya estamos desclasificando documentos de operación Cataluña. Y se está debatiendo técnicamente para publicar las balanzas fiscales”.

La propuesta, de momento, no ha servido para que Junts acepte la invitación para retomar relaciones.