Falsas promociones en Cataluña por el Black Friday: Consumo cuadriplica el número de productos vigilados

En los escaparates de los comercios ya se observan carteles anunciando descuentos y promociones a dos semanas del Black Friday. Un año más, la Generalitat estrecha el cerco a las empresas para evitar fraudes en las ofertas. Si en 2024 la Agencia Catalana de Consumo y la Dirección General de Comercio de la Generalitat inspeccionaron 79 empresas -en 2023 fueron 49-, y monitorizó los precios de 2.950 productos, este año someterá a controles previos 155 negocios y 10.000 productos.

El Departamento de Empresa y Trabajo pone así en marcha una nueva campaña para detectar casos de publicidad engañosa en la indicación de los precios y vigilar la competencia desleal entre establecimientos comerciales. Los sectores más monitorizados vuelven a ser la electrónica, artículos de ropa y complementos y productos del hogar, que tradicionalmente concentran la mayor parte de los descuentos en estas fechas.

Se trata de una medida disuasoria que empezó hace dos meses para evitar que las empresas escondan subidas del precio las semanas previas al 28 de noviembre para después anunciar una rebaja. Empresa y Trabajo también endurecerá las sanciones después de que en la anterior campaña detectaran posibles incumplimientos de la normativa del 77% de las empresas inspeccionadas, un 9% más que en 2023.

Durante la campaña anterior, el departamento abrió un total de 45 expedientes que confirman dichas infracciones. Comercio ha abierto 28 por competencia desleal, de los cuales 21 ya se han resuelto con sanciones que ascienden a un total de 175.560 euros, y Consumo está tramitando 17 expedientes más.

El objetivo es proteger al consumidor, especialmente en las compras por internet, pero también al pequeño negocio. Comercio es el organismo encargado de controlar a 55 empresas, tanto presenciales como por internet, mientras que Consumo eleva de 25 a 100 las empresas controladas en la venta en línea. En esta campaña, las prácticas comerciales que vulneren los derechos de los consumidores implicarán multas de hasta 100.000 euros, mientras que aquellas que contravengan la normativa de Comercio podrán ser sancionadas con hasta 20.000 euros.

“La finalidad de los controles es doble. Por un lado, reforzar la transparencia en la información que reciben los consumidores, y otro, proteger al comercio de proximidad, normalmente perjudicado por la publicidad engañosa de las grandes plataformas”, ha explicado Isidor Garcia, director de la Agencia Catalana de Consumo.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) recomendó el pasado lunes que los compradores comprobaran los precios de los productos que quieran adquirir con antelación para evitar estafas. De hecho, en 2024 la institución analizó 15.000 precios de 60 negocios de compra por internet del sector de la electrónica y constató que solo un tercio de los productos estaban rebajados en realidad.

Además de las inspecciones, Consumo ha iniciado en redes sociales una campaña divulgativa protagonizada por la creadora de contenido, Queralt Vidal Sala. La finalidad es concienciar a los consumidores, especialmente a los más jóvenes, más susceptibles a las estafas en las compras por internet. Desde la Generalitat instan a los consumidores a planificar el gasto para evitar compras impulsivas inducidas por la publicidad que inunda tanto el espacio físico como virtual.